DIVINITY

(The Singularity)

10/10

¿¿¡¡Madre mía, de dónde han salido estos!!?? Ese es el comentario que mi mente refleja cuando recibo este disco desde Canadá, sin nota de presentación y sin ningún otro tipo de referencia sobre el grupo. Escuchando tan portentoso documento sonoro, lo que pienso es que detrás de Divinity tiene que haber un conjunto de músicos curtidos en mil y una batallas, pero tampoco es así. Desconozco de dónde ha partido un grupo que aparece con la capacidad de abrir la boca y engullir de un bocado todos los estilos que se le pongan por delante. Ellos mismos mencionan en su Myspace como influencias a grupos como Into Eternity, Strapping Young Lad y Soilwork. Sobre todo son los segundos los que a mí se me han venido a la mente en muchas ocasiones según iba escuchando este trabajo. Pero, con todos mis respetos para el genio loco Devin Townsend, lo que Divinity nos ofrecen tiene muchísima más concreción que lo que él nos ha ofrecido con su banda, cosa que se agradece a la hora de comprender la música de este grupo. Son temas con estructuras claras, a las que puedes asirte fuertemente por esos mastodónticos riffs de guitarra en los que parece no acabarse el manantial de ideas. Es entrar en los terrenos de “Beg To Consume” y adentrarte en composiciones técnicamente depuradas al milímetro, con un sonido que revienta tus tímpanos y con una fluidez asombrosa que nunca te hace ver a Divinity como una banda obsesivamente enrevesada. Técnica, perfeccionista y elaborada sí, pero con las ideas claras.

“Monsters Are Real” es de los ejemplos más agresivos en base a contundencia en los ritmos, una pegada de la batería que ha quedado reflejada como un trueno y una voz versátil en estos terrenos con la que te puedes echar a temblar, tanto por sus brutales registros como por su forma de cantar. Me llama la atención “Embrace The Uncertain”, por sus reminiscencias de metal clásico. Aquí se utilizan ciertos dejes melódicos que emparentan a Divinity con la ola de nuevo metal americano. Me parece un tema un tanto distinto de entre este conjunto de 9 cortes en los que abunda la caña.

Podemos encontrarnos con tramos que van del thrash arrasador y de extrema agresividad a momentos directamente de brutal death metal. La elaboración nos lleva a muchos pasajes progresivos, que nunca se me hacen recargados. Si quieres disfrutar de la exquisitez más absoluta a la hora de tocar lo vas a hacer, pero tampoco vas a dejar de apreciar la contundencia seca y dura que exponen estos chicos. El toque definitivo de seducción del disco lo pone, al menos para mí, esas pinceladas industriales que se llegan a fundir con lo sinfónico. No existen distancias estilísticas insalvables en “The Singularity”. De esta manera, una banda que suena a nueva generación mantiene una raíz añeja que pueda hacer que los puristas no tengan por qué darles la espalda. De hecho, seas más o menos tendente a un terreno musical u otro esto te sonará de muerte.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

INFORMACIÓN ADICIONAL:

www.myspace.com/divinitymetal

www.divinity.ca