ESTAMPIDA

(Brainwashers)

8/10

Un paso de gigante el que han dado Estampida en esta segunda obra. Con “Sin Rencor” ya dejaron ver su potencial para demoler cualquier muro y ahora con “Brainwashers” nos demuestran que son mucho más que una banda de metal que le pega verdaderamente duro. Siguen siendo una potentísima banda, pero además le han sabido dar un toque de pausa a este trabajo. Sin entrar en terrenos muy profundos, la banda ha utilizado más cabeza, mientras que siguen poniendo todo el corazón, como buenos argentinos.

No se te debe escapar el detalle de la intro, muy idónea para el concepto que se oculta detrás de esté “Lavacerebros”, que ataca a todo aquello que pueda dirigir tus ideas anulando tu voluntad y buscando ciertos intereses. Esto es, medios de comunicación, políticos o religiones están en el punto de mira de Estampida. Esa forma de abrir el disco casa con el cierre del mismo, cerrando un círculo al que la banda nos incita a entrar junto a ellos y que te ayuda a digerir y a entender lo que nos quiere transmitir este álbum.

En el aspecto meramente musical lo primero que percibimos es que la banda ha alcanzado un mejor sonido y deja una sensación más cuidada. Tal vez lo que más resalte en este sentido sea la voz, que ofrece más matices, pero eso también se lo tendríamos que aplicar al resto de aspectos de la música de Estampida. Podemos comprobar en un tema tan directo como “Malleus Maleficarum”, con un estribillo muy heavy metal tradicional, cómo la voz se destapa en unos tonos más agudos a los que no nos tenían acostumbrados, mientras que “Parasite”, todo un petardazo de apenas dos minutos y medio, se hace rasgado hasta alcanzar tesituras que podrían resultar muy black, solo que Estampida lo meten en su ambiente. Y es que si escuchaste “Sin Rencor”, vas a encontrar una personalidad que le da una continuidad a lo hecho por la banda anteriormente, algo positivo para hacerse reconocible y más cuando a la vez el grupo nos brinda una evolución que nos lleva a apreciar el desarrollo de composiciones como “Aguantando”. Con la potencia descomunal de inicio no esperamos un tema que ofrezca tantos detalles en el terreno instrumental.

Los argentinos afincados en Bizkaia han sabido elaborar más los temas sin dejar de lado ese atronador sonido capaz de provocar terremotos. Un ejemplo muy claro sería “Kaliope”. En detrimento de la balada, que no aparece en este disco, tenemos este medio tiempo nada falto de agresividad, pero que termina en un final de voces limpias y profundas que es otro rasgo que nos va descubriendo lo que esta banda es capaz de ofrecer. También la final “Calling To My Devil” es elaborada, con un espectacular solo de guitarra, otro punto a destacar de este disco que supone el acento para el heavy metal y que Estampida ha trabajado, dejando buenos solos en cada corte. En temas como “Animalux” puedes comprobar cómo el grupo sincroniza potencia con resplandores melódicos muy propios del metal europeo actual que gira alrededor del heavy metal, el death melódico y al thrash. Entorno de estas bestias metaleras, aunque no me decantaría por ninguna etiqueta concreta para ellos. Simplemente para amantes de la caña, capaces de dejarnos segadores riffs como los del homónimo “Brainwashers” o “Carnifex”, pero también ofreciéndonos un trabajo con mucho más que apreciar que su predecesor.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

INFORMACIÓN ADICIONAL:

Página web: www.estampida.org  / www.myspace.com/santaherejia