CRÍTICA: SPARZANZA – DEATH IS CERTAIN, LIFE IS NOT

 

SPARZANZA

(Death Is Certain, Life Is Not)

8´5/10

 

 

 

Ya va siendo hora de que esta banda sea reconocida fuera de Suecia. En su país el peso de su larga andadura y el constante trabajo ya ha tenido recompensa, pero aun no son muy conocidos por nuestra zona. Podéis investigar en su discografía, pero si queréis acercaros a ellos una buena piedra de choque es este sexto álbum de su carrera. Un sensacional disco de heavy metal con todas las letras, en mayúsculas. Demostrando que se puede ser fiel a una clásica manera de entender el metal y a la vez evolucionar sin  que para muchos esto tenga que ser una herejía.

 Tenemos un puñado de temas muy potentes, con riffs puramente metaleros, con un estribillo que busca melodías y accesibilidad dentro de su profundidad. No es un trabajo que se quede en lo básico, sino que explora sonidos, pero tampoco por ello hace huir a los amantes de lo más tradicional. Eso es lo que le da un aire intrigante que a mí personalmente me atrae y me cautiva.

También es cierto que la temática en torno a la muerte que ha invadido esta sexta obra de los suecos le dota de ese cariz místico que tanto atrapa. Es verdad que no por ello dejan de ser directos como apreciamos en “When The World Is Gone” o “The Fallen Ones”, pero adéntrate en el sonido que el grupo propone y encontrarás esa oscuridad tan sugerente de temas como “Dead Inside”. Incluso se puede decir que un pequeño tinte gótico envuelve a los temas. Es heavy metal, pero llega más allá.

Y, por supuesto, hay un pedazo de banda detrás facturándolo. La voz de Frederik Weileby no es la habitual, tiene un toque especial No se hace chillón en ningún momento, domina las melodías y además añade mayor fuerza cuando debe siempre desde una solidez que se une a lo que propone el grupo en temas pesados y con los cimientos tan bien afincados de estas canciones. Capaces de salirse de esquemas preconcebidos, no es necesario que sea un riff el que inicia la composición o el que la guie. En “Endeavor The Dark” es la propia voz la que nos mete en un aura oscura que posteriormente se funde con una potencia que no merma la libertad de las guitarras y de la composición. Puedes apreciar en temas como este la versatilidad que el grupo tiene dentro de un estilo que no deja de ser el suyo propio.

La intensidad emocional es otro punto fuerte de estos temas. Se añaden algunos arreglos de samplers para terminar de dotar a las canciones de una emoción extra, como un invisible halo especial que envuelve a los temas. En casos puntuales hay arreglos de violines, como en el homónimo tema, que incrementan la intensidad. Eso ocurre también en el final y más relajado “When Death Comes”, que es el dulce toque final de oscuridad gótica no exenta de un  preciosismo que estimula mucho más la escucha más que recomendable de esta obra. Una obra con que lo mismo es capaz de atraparte en temas de pegada tan directa como “Legion” o llevarte en un manto ritualístico como en “Ad Viventes”. Todo un discazo de heavy metal que sin renunciar a lo que este estilo es en su raíz concibe elementos mucho más modernos y versátiles. Una obra que debería ser muy valorada.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

INFORMACIÓN ADICIONAL:

Sello: Spinefarm Records