KRAZARK

(Fireflake)

8/10

 

Krazark es una banda de stoner rock de Madrid en la que encontramos a Esteban de los impresionantes Grapeshot en la voz. Un grupo de rockoso y potente rock sin añadiduras, donde los sonidos graves de esos riffs hacen que notes cómo se estremece tu cuerpo con unas ondas sonoras más densas de lo normal. Este “Fireflake” es su primer disco, precedido del EP de 2018 denominado como la propia banda.

Se que ya es una frase hecha, pero hay que volver a tirar de ella para hacer honor a la verdad. En unos sonidos áridos, que parecen sacados del desierto de Arizona, se pueden tener bandas españolas que no desmerecen en nada a bandas que nos puedan llegar de aquellas tierras o cualquier latitud. En España también hay desierto y Madrid puede ser algo parecido en los calurosos meses de verano. Sea como sea Krazark capta perfectamente esa esencia en un estilo que además resulta fresco y no sin dosis de originalidad. No llegan a ser tan rompedores como Grapeshot, aunque tampoco es cuestión de comparar. Allí Esteban juega con registros mucho mas agresivos y hay una mayor mezcla de estilos.

Estos se quedan en un southern rock que no se anda con rodeos a la hora de mostrarnos su poder desde el primer tema “Free My Power”, con unas guitarras aplastantes. Un tema muy directo que no es tanto una pista de lo que viene como un golpe directo de bienvenida. Y es que la banda tiene un dinamismo brutal, jugando con registros más densos ya en el siguiente “Get The Fuck Out Of My Face” y pasando en el siguiente “Freak Show” a un terreno más alternativo, con una voz rota casi rapeada por momentos. En la senda más cercana al blues se desenvuelve el penetrante “Nothing Lasts Forever”, con un ambiente muy cargado y sugerente. El riff y el ritmo de “Rockin´ My World” deja claro que si quieren pueden hacerse mucho más ligeros, acercándose al grunge, aunque para sorpresa tiene una parte central más sicodélica y de aire muy The Doors. Ese aire del desierto impregna “Leave It All Behind” con un acercamiento a Black Sabbath por ese oscuro riff que va creciendo hasta resultar completamente desgarrador. El riff de “Far Away From Sorrow” les acerca al metal, insuflando fuerza positiva y de nuevo demostrando que dentro de un estilo se puede resultar así de versátil. “Fireflake” es de hecho una condensada muestra de esa capacidad de la banda para adaptarse a terrenos inhóspitos, reptando de entrada con un arrastrado riff que al final rompe en un tema muy metalero y con cambios caóticos. Imponentes en un sonido salvaje, árido y orgánico en el que se manejan con tanta seguridad como libertad.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)