CRÍTICA: FORRAJE – QUEJIDOS QUE NO ESCUCHA NADIE

 

FORRAJE

(Quejidos Que No Escucha Nadie)

7/10

 

 

 

Ya son cuatro trabajos los que Forraje lleva colocando como peldaños con los que ir subiendo en calidad y popularidad. Bajo la mano de Warner Music no se nos escapa que el disco tiene un toque de accesibilidad, pero no deja de ser el estilo más puro de Forraje, y un trabajo de rock que resulta todo un gustazo escuchar. De hecho entra con una suavidad que resulta acogedora cuando se arranca con “A Horcajadas”. Un tema con mucho ritmo, pero con un  deje muy amortiguado, nada abrupto o que se atragante.

 Y para que todo siga fluyendo como la seda, pese a relajar de primeras el disco con un medio tiempo como “Me Bebo los Vientos”, con un trabajo de guitarra delicioso y colaboración en los coros de Iker Piedrafita dotando de un mayor color a la envolvente voz de Lulu. Desde luego, el sonido sacado de los estudios  R-5 de Navarra por Kolibrí saca a relucir de manera impecable ese cuerpo tan especial que nos hace prácticamente sentir el tacto de estas canciones además de escucharlas. Unas veces sentimos como con sensibilidad nos envuelven, pero también sacan a relucir guitarras más cortantes en “Miradas Furtivas”, por ejemplo.

Meten una versión de “La Quiero A Morir” de Francis Cabrel que no me dice demasiado. Me quedo con sus propios temas y entre ellos destacado ese “Puñales” con la colaboración de Roberto Iniesta de Extremoduro, en un cálido tema a medio tiempo que gana con esa aportación que le va como anillo al dedo. Y no es que a estas alturas Forraje se marque temas en la línea de nadie salvo ellos mismos. Pero es que esa tesitura es ideal para una voz así, unida a la del propio Lulu. Puede que con la siguiente “Un Vendaval De Suspiros” algunos echen en falta más ritmo a estas alturas, ya que tenemos otro tema lento. Hay que esperar al posterior tema “Buscando El Cielo” para tener un estribillo con mucho gancho, contando con la colaboración de Fernando de Reincidentes dejando su sello inconfundible. Sigue habiendo rock más apaciguado en “Mucho Que Hacer”, pero terminan con su cara más rockera con “Entre El Barro Y Las Chabolas”.

Como digo, para los que quieran un rock más duro tal vez este disco no les ofrezca una descarga de electricidad plena, pero el estilo de Forraje está presente para una cuarta obra que le puede abrir nuevas puertas. Para ello es innegable un cierto tono de accesibilidad, algo que no choca con un buen trato en todos los temas, siempre con un trabajo de composición que deja sus pinceladas y aroma a rock cercano.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

INFORMACIÓN ADICIONAL:

Sello: Warner Music Spain