THE OCEAN + THE NAME

THE OCEAN + THE NAME

16 – 07 – 10

Barakaldo (RockStar Live)

Un concierto completamente de circunstancias el que vivimos en la Rock Star Live de Barakaldo dentro de una gira truncada para The Ocean, que finalmente vio cómo con la ayuda de promotores comprometidos, salvaba algunas fechas de su gira. Por suerte una de ellas fue la que nos ocupa en Bizkaia, aunque con el cambio de sala repentino y con el anuncio ya oficial publicado de la gira cancelada, en apenas dos días desde que se confirmara el concierto era difícil que la gente se animara en la cantidad que se merecía un concierto así. Casi es hasta largo de explicar, pero para que os hagáis idea, The Ocean venían de cancelar a última hora un festival en Portugal por falta de apoyo institucional para luego recalar en Madrid donde el promotor inicial se desentendió de la gira apalabrada con la banda. El grupo se encontraba tirado después de hacerse un buen puñado de kilómetros para defender su música. Finalmente el viaje no fue del todo en balde y esta noche en Barakaldo podrían descargar para un pequeño puñado de fans muy acérrimos.

También hay que agradecer el ofrecimiento de The Name con apenas 48 horas para suspender sus planes y plantarse en la sala dejando parte del equipo al grupo principal. Los vizcainos nos ofrecieron una actuación del tipo al que nos tienen acostumbrados, muy fuertes sobre las tablas, con mucha calidad y con mucho sentimiento. Su heavy metal pesado y oscuro no va del todo por el palo más doom y post rock de The Ocean, lo que puede explicar que una parte del público, tímido ante tan poca gente en una sala tan grande, permaneciera un tanto alejado del escenario. Pero es que visto lo visto, con The Name estamos ante una banda de presente firme de forma inminente. En cuanto terminen de sacar ese disco que probablemente lleve por título “Identident” (perseverancia en latín) con 10 temas en castellano, según nos dijo Guillermo esta noche a los privilegiados allí congregados, la banda puede dar un salto importante en su carrera con un primer disco completo bajo el brazo.

Estos temas nuevos rezuman descomunal fuerza y profundo sentimiento, muy acorde a lo ofrecido en el underground por una banda que tiene sobradamente labrado su estilo a pesar de ser aún bastante desconocidos. Seguro que los nuevos oídos que los descubran se sorprenderán con temas como “Si No Hay Perdón”. De hecho, entre la gente que les veía esta noche por primera vez ya hubo más de uno con ojos de tomar nota de aquello que comenzaban a ver. “I Feel Your Life” es un tema que estremece a nada que tengas tu mente abierta a sentir la música y donde Guillermo demuestra sus facultades como vocalista, muy fundido con los sonidos que emanan de su guitarra y rodeado de una base rítmica a cargo de Andrey y de Roberto que le dan al grupo una consistencia adecuada. El que esta noche daría su último concierto con el grupo era Oscar a la guitarra, una pena porque The Name venía asentándose con una formación que funcionaba muy bien. Más tarde conoceríamos al nuevo miembro del grupo de ahora en adelante.

Antes saltamos con el tema más propicio para ello, “Dying”, y nos emocionamos con “Heaven & Hell” dedicada a Ronnie James Dio. Diría que es la ocasión en que mejor les veo esta versión habitual en sus conciertos y muy acorde a su estilo de metal clásico y oscuro. “Tu Disfraz” sacó todo el sentimiento que esta banda lleva dentro y que demostró estar dejándose la piel para agradar a la concurrencia. “Secret Universe” es el momento elegido siempre para cantar ese estribillo de los más pegadizos de la historia del grupo, justo antes de cambiar de guitarrista para presentar a Javi como nuevo miembro oficial de The Name. Sin embargo, este tuvo problemas con su guitarra y tuvo que tocar con la de Oscar con los consiguientes nervios. Que no se preocupe que la cosa no quedó mal y además ya entra curtiéndose en estos imprevistos de los directos. “Mi Realidad” fue otro de los temas nuevos, descargado con una agresividad bestial, para luego terminar con un clásico para los que llevamos unos años siguiendo a The Name. “Aun Sigo Ahí” es una de las canciones que significan mucho para nosotros y que seguro que significaría también mucho para el público metalero en general de haber tenido The Name las armas para haber llegado a un mayor número de personas. Seguro que con el nuevo trabajo, primer larga duración de la banda, ese momento ha llegado porque una banda con una propuesta musical tan pura y sincera, con esta calidad y esta pasión, no dejará de provocar sensaciones que dejan huella. Esperamos con ganas esas nuevas canciones recogidas en un redondo.

Con las pocas personas reunidas en el recinto acercándose al escenario comenzaría la actuación de The Ocean. Fue curioso ver a Robin Stars a la guitarra sentado durante todo el concierto, y es que para colmo de males y para guardar aún un recuerdo más agrio de esta visita al sur de Europa, resulta que había comido algo que le había sentado mal y el hombre estaba que no se podía mover. Lo más positivo de todo es que si la banda supo solventar la papeleta dejando un considerable buen sabor de boca en estas circunstancias, sin duda tiene que haber más oportunidades para desquitarse y poder comprobar que en estos sonidos densos The Ocean son una de las nuevas propuestas más interesantes a nivel internacional.

Solo pudieron tocar seis temas que no dieron ni para una hora de descarga, pero la calidad musical, la capacidad para encontrar detalles colocados en su justo lugar, como flotando en estas atmósferas en las que recrearse, fue suficiente para confirmar a la banda como una de las de más futuro a nivel internacional en estos tiempos difíciles para el arte. Ya habían cosechado muy buenas críticas cuando nos visitaron hace un tiempo con Opeth y es una pena que esta nueva aventura no haya podido ser como ellos hubieran soñado.

Temas como “Firmament” o “Ectasian” ya corroboraban y comenzaban a saciar las ganas de un público que exclusivamente había ido a buscar estos sonidos ajenos a cualquier tipo de comercialismo. La forma de llevarnos de tesituras relajadas y limpias a agresivos pasajes cargados de distorsiones y de vibraciones que nos atacaban por todos los flancos, cargándonos de electricidad, fue llevada adelante con total precisión. Comprobar in situ una ejecución tan perfecta fue una delicia. Algunas pinceladas como el violín del final “The Origin Of God” fueron disparados en vivo para niquelar por completo el resultado de estas canciones, algo que no restó ni mérito ni espectacularidad a la banda que había convencido al puñado de fieles que se enteraron y quisieron asistir a esta cita.

Cuando esperábamos la posible nueva salida del grupo a escena, nos dimos cuenta que tendríamos que quedarnos con las ganas. Pensábamos que tal vez después de que su guitarrista hiciera una visita al bidé la banda tocaría aunque fuera un tema más, pero no fue así. Les perdonamos dadas las circunstancias, aunque esperamos que esto no quede así, y vuelvan para darnos un recital completo en plenas condiciones, para que tanto el público como el grupo puedan disfrutar de la música en una situación más digna.

Texto: ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

Fotos: MARI JOSE MARTIN (mari@lamiradanegra.es)