CRÓNICA: LA DESBANDADA + BAJA CALIFORNIA

 

LA DESBANDADA + BAJA CALIFORNIA

Viernes 7 de febrero de 2025 – Sala Azkena – Bilbao

 

La gira conjunta que ha unido a La Desbandada y Baja California llegaba a Bilbao. Dos bandas de estilos dispares entre las que se respira muy buena química, con un público que además reaccionó positivamente ante ambos.

Baja California venían presentando su nuevo disco “Electricidad”, editado ya hace prácticamente un año y siguiendo con la buena línea que la banda ya ofreció con sus anteriores obras “La Cara B Del Rock” y “Horizontes”. Con este último trabajo dejaron una sensación impecable en Bilbao en 2019 como teloneros de Uzzuahïa, banda a la que por estilo, calidad y talento bien pueden suceder. Baja California son portadores del mejor hard rock actual, con todo lo mejor de los clásicos del estilo y ese poso de madurez que lo trae hasta la actualidad con energía renovada y proyección de futuro.

No fue la suya una actuación sencilla, marcada por algunos problemas en un punto ya avanzado de la descarga, aunque eso solo haría más heroica y grande la sensación que este pedazo de banda de rock duro dejó sobre Bilbao. Porque la actuación iba lanzada, alternando temas de su último disco con temas del anterior “Horizonte”.

La primera sensación ya impresiona con una banda que se suelta sobre las tablas con “Caída Libre”, que arrancó la velada con un excelente sonido ideal para disfrutar de un rock de alto voltaje que acaba por recorrer las venas de cada seguidor apostado al frente del escenario. Además, Manu sabe ganarse el favor del público. Dijo conocer pocas palabras en euskera, pero acabó dando en el clavo diciendo una en inglés que aquí sustituye cualquier religión. Athleeeeetic! gritaba el vocalista, encontrando el punto débil de muchos cuando pisas el bocho.

Al margen de ello esos estribillos arrastran a la gente con la banda de misma manera que una buena jugada en San Mamés. La banda se muestra excelente armada en esos pilares de una banda de rock tradicional que son una base rítmica acoplada y tremendamente versátil, dos guitarras que se entrelazan y se entienden a la perfección y el carisma de un excelente vocalista que ni mucho menos se conformaba con quedar bien. Su propósito era acabar por conquistar el alma de los presentes y vaya si lo haría.

Aunque temas como “Buscando Más”, “A 66” y “Blanco Y Negro” interpretadas de esta manera son suficiente aliciente como para que quedes cautivado por esa esencia de un rock duro con aroma americano pese a cantar en castellano, con un deje que los aproxima a bandas estatales como M-Clan que, al fin y al cabo no dejan de ser un grupo con ese carácter sureño que Baja California compagina con otros momentos de mayor potencia en su sonido.

El nuevo single que la banda ha lanzado en directo y que pertenece a su nueva obra es “Tiempo Suicida”, que continuaba con una descarga que parecía perfecta. Grupo compacto, rodado, trabajado, con tablas, sonando genial y transmitiendo una energía que hace honor al título de su nuevo disco y lo que siempre ha sido el rock en directo: “Electricidad”. Baja California lo encarnan tan bien como los mejores ahora mismo.

Manu, con su desparpajo habitual, prohibía que se sacaran los móviles para dejarnos embaucar por “El Mago” (de la luz azul). Tema con una dinámica en ritmos diferente que crea un ambiente bastante lisérgico. Por el contrario el vocalista nos diría después del trance que sacáramos los móviles, les grabáramos y les etiquetáramos, que al fin y al cabo tienen que comer y la gente debe conocer a la banda. Así arrancaba “Indomable” convirtiendo aquello en una fiesta total con “Reina De Hielo” y “Polvos Mágicos”, consiguiendo la interacción con el público, que rugía en cada coreo.

Cuando parecía que ya la entrega era total por parte de los presentes, viéndose ganados de lleno por la calidad y carisma de la formación asturiana, la banda arrancaba con la versión de “Shout”, original de The Isley Brothers y versionada por Bon Jovi, que seguramente sea el motivo por el que Baja California opta por marcarse este góspel en el que Manu acabaría sentándose en la barra de la sala para darnos la mejor misa que vamos a ver en Bilbao. De vuelta al escenario nos bendijo en el nombre del rock, acabando sudoroso en el suelo del escenario tras un momento de plena comunión con el personal. Sin embargo, la “Electricidad” les falló y se desconectaron todos los instrumentos tal vez por castigo divino o tal vez por alguna otra explicación aun no encontrada por la ciencia.

La banda supo salir del paso de una manera que denota unas tablas que ni los mas veteranos son capaces de esbozar en muchas ocasiones. Tras un solo de batería vino otro de una de las guitarras que había vuelto a la vida, luego llegó juego de voces con el público, totalmente entregado a la banda, algo aun mas meritorio cuando no estamos hablando de una sala repleta, ni mucho menos. Dieron la vuelta finalmente a la adversidad cantando prácticamente en acústico y a capela “Años Atrás”, que tenían previsto interpretar completamente enchufados, lógicamente, pero que de esta menara no les quedó nada mal. Con los músicos sentados en el borde del escenario la banda salió del paso ofreciendo una versión diferente y entrañable de este tema emblemático dentro de su aun corta discografía de tres discos. Pero el aroma a clásico que rezuma desde la primera vez que lo escuchas es innegable. Gran momento pese a todo… o gracias a todo.

Por desgracia no pudieron tocar el homónimo tema de su disco, porque el tiempo no les daba para más y Manu dio a elegir entre este y “Dueños De La Noche”, con bastante unanimidad en la elección de este segundo que ya es un nuevo clásico del rock para los que lo hemos escuchado. Al menos en nuestra discografía particular. Solo había que ver cómo cantaba la sala y cómo respondían, con el vocalista abajo del escenario nuevamente consiguiendo el calor de un púbico que en cualquier sala que pisen nunca le deba faltar a una banda con este nivel y esta capacidad para conectar con el personal.

Que todo ello les haga muy grandes, porque nada les falta para ello. Solo que la próxima vez que veas un cartel con el nombre de Baja California no dudes en asistir a su concierto. Consejo de amigo si te gusta el rock duro.

Posteriormente La Desbandada desplegó sobre la sala Azkena un rock urbano que explicaba el por qué de las varias camisetas de Marea que se podían ver por la sala. Y es que los navarros, al igual que La Fuga, son influencias que parecen más que evidentes en los de El Vendrell. El cuarteto catalán no dio tregua en un intenso concierto que para dar más señales sobre por qué camino cabalgan arrancaron con “La Luna Sigue Sola”.

No serán la banda más original a estas alturas, pero también son sinceros: No venimos a salvar el rock, venimos a vengarlo. Que nadie les quite ese derecho que ejercieron interpretando en este concierto un buen puñado de canciones con tremenda intensidad, presentando temas de su último disco “Las Musas Siguen Bebiendo”, como el anteriormente mencionado, “Te Merecías Más”, “Tras El Vendaval” o “Miedo”, ante los que responde la gente con tanto entusiasmo como ante sus temas ya más longevos. Incluso ante los del disco que calificó su guitarrista y vocalista Balta Hurtado como el que más feliz les había hecho, añadiendo luego después de este último, que al fin y al cabo es con el que ahora venían bajo el brazo. Y ya sabemos eso de que siempre el último es el mejor.

Pero sí que es verdad que “Hoy Venimos A Morir” de 2016 les dio un espaldarazo definitivo para asentarse y ganar seguidores. A ese trabajo pertenecen temas como “Regresar”, “La Hoguera” o “Hace Tiempo” que también jalonaron esta actuación de actitud impecable por parte de cuatro músicos entregados a sus canciones, con un público respondiendo y una sala ofreciéndoles un excelente sonido. No dejarían de agradecer a la sala los músicos tanto este hecho como la acogida que les dieron.

En “Si Tiene Que Ser” contaron con la colaboración de Manu de Baja California, incendiando más la descarga. Sorprende que incluyeran la versión de “Palabras Para Julia” de Los Suaves, que no les mencionaría como una de sus grandes influencias. Dejando para el final de la actuación el intimista arranque de “Esta Noche” e himnos tan propios y con lema tan personal de la banda como “Hoy Venimos A Morir” y la rubrica de “Nacimos Pa´ Ganar”, que con el tiempo pisándoles los talones acabaría por cerrar la actuación de La Desbandada dejando precisamente esa eufórica sensación que impregnan estas canciones entre los presentes. Sensaciones muy positivas por parte de un grupo entregado a sus canciones que crea una comunión muy especial con su público en directo.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)