CRÓNICA: SARATOGA

SARATOGA

Sábado 10 de febrero de 2024 – Sala Stage Live – Bilbao

Cómo gusta a los fans que una banda realice conciertos conmemorativos. Y es que el lanzamiento en vivo de “22/10/22… La Historia Continúa”, ya precedido del recopilatorio “XXX”, aparte de para dejar plasmado para la posteridad en un directo imprescindible para los seguidores una fecha que sirvió para celebrar los 30 años de Saratoga, también sirve para que exista una gira posterior en la que la banda sigue celebrando todo ese trayecto. Eso conlleva recuperar temas del pasado que, para qué engañarnos, suele atraer más que presentar nuevos temas cuando de bandas clásicas hablamos.

Puede que ello fuera clave para que la banda hiciera un sold out en la sala Stage Live de Bilbao. Un poder de convocatoria que no les recuerdo en la capital vizcaína desde los históricos conciertos que la banda se marcó en el Kafe Antzokia de Bilbao en su momento más álgido con discos como “Agotarás” o “El Clan De La Lucha”, que siguen siendo pilares a la hora de ofrecer temas para el repertorio de la banda. En este sábado de Carnaval la banda consiguió que saliéramos de unas calles en las que se respiraba el ambiente de la jornada que era para centrarnos en el heavy metal.

Con la iguana que simboliza otro disco tan clásico como “Vientos De Guerra” como espectacular pie de micro para Tete Novoa el escenario nos daba la bienvenida ante unas apreturas cada vez mayores en unas primeras filas que enardecerían con un inicio tan fulminante como “A Morir”. Un tema que pone cualquier sala patas arriba. A ello se sumó el queridísimo “Mi Ciudad”, con Niko del Hierro acaparando el protagonismo en el inicio de “El Vuelo Del Halcón”.

Por si fuera poco la intensidad del inicio se iba a mantener, o incluso crecer, con “Maldito Corazón”, donde Tete Novoa dejó claro que esta noche su portentosa voz tampoco le iba a fallar. Ha creado cierta disparidad de opiniones el vocalista por su show con su proyecto en solitario, aunque es lógico que haga cosas diferentes a lo que hace con Saratoga. Luego para opiniones los colores. Pero lo cierto es que el vocalista con la banda que le ha dado a conocer a la inmensa mayoría del público es heavy como el viento, comunicativo con el personal y, lo más importante, tiene un registro vocal al alcance de muy pocos.

El pegadizo “No Sufriré Jamás Por Ti” daba paso a “Ángel De Barro”, que de nuevo daba pie al vocalista para lucirse en ese estribillo. Por su parte, Jero Ramiro pareció ir saliendo de algún tipo de problema que le incomodaba al comienzo de la descarga, pero el legendario guitarrista no fallaría para nada en su cometido. Fue el único que no tuvo espacio para un solo particular, aunque bastante demostró en cada tema con su solitaria guitarra como guía.

El nuevo miembro en la batería es Arnau Martí, que ha encajado perfectamente en el grupo, tuvo su momento con un solo que permitió a todos coger un poco de aire tras un primer tramo del concierto frenético. Regresarían sus compañeros para la emotiva balada “Lejos De Ti”, de nuevo con el vocalista luciéndose. Tras “Las Puertas Del Cielo” lo haría en solitario, incluso mandando callar a la sala para que escucháramos su voz a pulmón, desprovista del micro. Tras intentar repetir lo que nos tarareaba el vocalista el público desistió para simplemente ponerse a sus pies.

Tras el himno “Heavy Metal”, que sigue siendo una declaración de principios de una banda acostumbrada a la pelea continua para abrirse paso, de nuevo el frontman sería protagonista saliendo del escenario para pasearse por la barra de la sala. Pareció tener un percance final que, por fortuna no le afectó para continuar con “Si Amaneciera”. Esta vez sin la acústica que otras veces ha exhibido Jero, pero con el guitarrista luciéndose de manera especial. Su compañero de batallas en el bajo se marcó posteriormente un lúcido solo que fue un poco más allá del típico alarde de virtuosismo. La ovación de la sala  fue cerrada para el líder de la banda, que respondió con un escueto gracias y una sonrisa de oreja a oreja.

El ambiente reinante en la sala daba motivos para que los miembros del grupo estuvieran radiantes. Respondieron con una gran descarga que tampoco flojeó en temas más recientes. Todo lo contrario. Casi diría que pese a la cantidad de clásicos que escuchamos esta noche “Como El Viento” fue el que más me puso el pelo de punta y de los mejores momentos.

Tras una despedida que de sobra sabíamos que no era real llegaría otro tema del penúltimo disco de estudio con nuevos temas de la banda “Morir En El Bien, Vivir En El Mal”, “Mi Venganza”, con los cuatro músicos de regreso al escenario para rematar con dos de los más emblemáticos temas que nunca le van a fallar, “Vientos De Guerra” y “Perro Traidor”, con toda la sala cantando a rabiar.

Las gargantas parecían no haberse cansado cuando el “Fear Of The Dark” de Iron Maiden sonaba a modo de despedida con la foto final de rigor del grupo, saliendo a celebrar este triunfo con sus seguidores en el momento que estalla el mítico tema de la doncella. Agradecimiento explícito a una ciudad que, recordando los mejores momentos de su historia, les volvió a acoger con los brazos abiertos.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)