PEPE BAO TRIO

17 – 12 – 11

Bilbao (Crazy Horse)

Fuimos al Crazy Horse con la sana intención de disfrutar de una noche de virtuosismo y nos encontramos con una de las actuaciones más especiales. La actuación se anunciaba a la medianoche con un trío formado por Pepe, por su hermano Anye Bao (Estopa Antonio Vega, Nacha Pop, Ketama, Luz Casal) a la bateria y Tato Icasto (Rosendo, Antonio Flores, Luz Casal y Rosario Flores) a los teclados. Los tres habían actuado con Raimundo Amador esa misma tarde en la sala BBK de la Gran Vía, pero a nosotros nos interesaba más lo que iba a ocurrir unas horas más tarde.

PEPE BAO TRIO
PEPE BAO TRIO

Más o menos puntuales se presentaron Pepe Bao y sus músicos en la sala para comenzar a probar sonido y casi sobre la marcha arrancar un concierto no se sabe muy bien en qué momento. Simplemente según fueron afinando los instrumentos estos tres increíbles instrumentistas comenzaron una jam session en las que la improvisación fue la tónica de una noche de lluvia. Bien recogidos estábamos junto a un puñado de amantes de la música que quisieron disfrutar del rock, del funky, del jazz, del blues, del flamenco… de los innumerables palos que tocó esta noche Pepe Bao Trio.

PEPE BAO TRIO
PEPE BAO TRIO

Especialmente quiero destacar la capacidad de un batería como Anye que es de lo mejor que he visto nunca. ¡Cómo toca y cómo lo vive el tío! Un dominio espectacular,  también la imaginación para seguir al capitán que era su hermano con el bajo. A él le seguían tanto Anye como Tato Icasto, al cual no quiero tampoco dejar a la zaga, porque solo con los nombres con los que ha tocado es como para quitarse el sombrero y porque es alucinante con qué sentido colocaba sus dedos para dotar de brillantez a todo lo que sus compañeros reproducían, aunque el sonido un tanto bajo de su instrumento le dio algún disgusto con el técnico.

PEPE BAO TRIO
PEPE BAO TRIO

Llevábamos como una hora de concierto envueltos por la calidad de unos músicos capaces de todo, con solo de Pepe Bao sin ningún acompañamiento ante alucine del personal, cuando apareció en la sala Raimundo Amador y no dudó en cogerse el bajo de Pepe, que decía haber parado para fumarse un cigarro. La verdad que le preferimos con la guitarra. Más tarde se haría acompañar de la banda al completo, primero con Pepe a la guitarra y con un nuevo batería que se trajo consigo como invitado. Entre todos continuaron con la improvisación ante el asombro del personal. Sobre todo del que entrando tarde en la sala se encontraba a Raimundo Amador en un garito donde no es habitual verlo subido a un escenario. Más tarde cambiarían los instrumentos para hacerse cargo cada uno del que le corresponde en principio. Y no fue poco el tramo que Raimundo quiso recorrer por ese universo de notas musicales con unos músicos simplemente dejándose llevar por su imaginación.

PEPE BAO TRIO
PEPE BAO TRIO

La noche estaba para que casi el que quisiera apuntarse subiera al escenario, aunque no muchos estarían al nivel. Otro batería tomó parte de la fiesta, si mal no me informaron, antiguo miembro de Bulldozer. La cosa derivaba en una auténtica fiesta musical de una manera a la que no estamos muy acostumbrados.

PEPE BAO TRIO
PEPE BAO TRIO

Ya sin Raimundo en el escenario la actuación se extendió sin un aparente fin en un momento concreto. Con la tropa que se había venido con los músicos disfrutando de lo lindo entre improvisaciones. Creí intuir alguna versión, pero tocada de la manera en la que lo hicieron estos eran poco menos que irreconocibles, salvo la de “El Lago” de Triana y porque tiene letra, cantada desde la batería por uno de los acompañantes de Raimundo Amador.

PEPE BAO TRIO
PEPE BAO TRIO

Cuando la banda llevaba más o menos dos horas y media sobre las tablas y notaron que a eso de las tres de la madrugada había una parte del público algo cansada, decidieron decir hasta aquí. Lo vivido anteriormente fue todo un alarde de talento y de una calidad que no nos hace albergar ninguna duda de que tuvimos ante nosotros a tres de los mejores instrumentistas que podremos ver nunca en un escenario. Toda una magistral clase de virtuosismo acompañada de sorpresas que fue todo un gustazo para asistentes y músicos. Sobre todo destacable que haya gente que haga este tipo de actuaciones que demuestran que además de una profesión lo suyo es verdadera pasión y gozo, porque de lo contrario no harían este tipo de actuaciones para un público más selecto que el que tienen cuando están con los músicos para los que ofrecen sus servicios. Incluido en este reconocimiento el propio Raimundo Amador que tuvo el detallazo de pasarse por ahí y subirse al escenario. Me pregunto cuántos de sus seguidores sabrían lo que se iba a cocer esa noche en un local pequeño por donde también pueden pasar los mejores músicos.

Texto: ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)
Fotos: MARI JOSE MARTIN OUBEL (mari@lamiradanegra.es)