GLENN HUGHES

(Live In Wolverhampton)

8/10

 

 

Muchos clásicos siguen siendo recordados fundamentalmente por los hits que les hicieron famosos en los 70 u 80, pero muy pocos son capaces de llegar a la actualidad con la capacidad de cambiar a su antojo el repertorio de sus conciertos y dejar al público siempre satisfecho. Glenn Hughes no solo es un músico que sigue estando en lo más alto con sus últimas publicaciones, como en el caso de su trabajo con Black Country Communion, también es capaz de ofrecer en solitario siempre discos de interés que con la sola calidad de su voz y su originalidad, imposible de igualar, pueda hacer todo un recital que deje boquiabierto a cualquier ser vivo, sin necesidad de tirar de temas de los más conocidos, que también los tiene. Pasar por Deep Purple deja su poso en cualquiera. Estamos hablando de un músico que no es de canciones o discos concretos, sino con una carrera entera a la que le puedes sacar partido en cada uno de sus diferentes momentos.

Dicho esto pareciera que lo que vamos a presentar es un disco con nuevos temas que así lo ratifique pero, por el contrario, lo que nos ocupa es un disco en directo que indaga en el pasado de la voz del rock. Sin embargo, no esperemos un directo más que a los que admiramos a este fenómeno con forma humana nos hubiera casi decepcionado, aunque no hubiéramos dudado de su espectacularidad. Lo que tenemos aquí es un doble CD que repasa la carrera del músico en solitario y con Deep Purple, pero rescatando temas de los que no son claros hits. Así por ejemplo, no hay hueco para “Burn” en este trabajo, pero sí para un “Mistreated”, oscuro y sugerente, con un inicio de largo solo de guitarra tremendo. También para un poco conocido en las nuevas generaciones “What´s Going Here”, con un sabor a rock del que todo el que hoy pretende dedicarse a esto debería coger una porción. En este primer CD el tema central es “Don´t Let Me Bleed”, con muchos minutos de improvisación y de magia. “Muscle And Blood” es un genial inicio con ese tono entre funk y soul que tanto le gusta a Hughes. Funky sigue siendo, a pesar de su título “You Got The Soul”, enlazando con “Love Communion”. “Crave” y “Hold Out Your Life” nos muestran el lado más visceral, incluso algo sucio, de uno que pese a sus coqueteos con todos los estilos posibles, no deja de ser un auténtico rockero.

Si el primer CD tiene miga, el segundo es el verdadero aliciente y motor de la edición de este álbum. Tenemos diez temas de la época de Hughes previa a Deep Purple, con Trapeze. Homenajeando en una noche muy especial, descargando esos temas en directo por primera vez, a su fallecido miembro y amigo Mel Galley. En su propia casa, en Bilston (Wolverhampton) y con un sonido de directo sin retoques, que suena prácticamente a una recogida cruda directamente de la mesa, acrecentando la sensación de club acogedor y no de una gran sala. Todo ello da a este trabajo el tono necesario para que resulte más emocionante. En cualquier caso, Glenn Hughes no sabe hacer las cosas si  no es a su estilo, con lo que no dejamos de encontrarnos aquí con esa personalidad inquebrantable. Recordemos que no solo en solitario este hombre marca estilo, sino que en cada proyecto que ha participado sus formas quedan impresas. Por ello es inconfundible el aire que transmite ese riff, de nuevo bastante funky, de “Way Back To The Bone”, un arranque de segunda parte fuerte que se une a otro riff que muestra presencia como es el de “Touch My Life”. “Jury” comienza con las mismas premisas, pero nos termina introduciendo en una fase más relajada que desemboca en “Coast To Coast” para adentrarnos en un sonido más blues propio de los años 70 con “Sealfull”. “Good Love” es un ramalazo algo pop que desvía la trayectoria hacia “Your Love Is Allright”. Tal vez el tema más conocido por sus seguidores, ya que se incluyó en su recopilatorio de hace unos años “Different Stages”. Con “Medusa” se recrudece el sonido para dar paso al significativo y colorista “You Are The Music” y terminar con las duras guitarras de “Black Cloud”.

Este hombre sigue brillando con luz propia en todo lo que toca, tanto o más que en los años 70 en los que Deep Purple lo lanzó a la fama. Su carrera en solitario y sus proyectos han seguido siendo de un interés y de una calidad que nunca ha desfallecido y merece la pena escucharle tanto o más hoy en una sala con unos cientos de personas que en los años de esplendor del rock con unos cuantos miles. Nunca ha dejado de mirar adelante a lo largo de su carrera y en este caso, que mira al pasado, es para traer a la actualidad una época previa a Deep Purple que nunca se había recogido en vivo y que seguro que muchos van a conocer hoy en un directo que nos pone al auténtico Glenn Hughes de la manera más real en nuestro cuarto. Sigue siendo irrepetible y sigue sin repetirse él mismo pese a tantos años de carrera. Gran homenaje a Mel Galley, espléndido recordatorio a Trapeze y un disco nuevamente interesante con el Glenn Hughes más en forma. 

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

INFORMACIÓN ADICIONAL:

Sello: EarMUSIC

Fecha lanzamiento: 06/05/2011