CRÓNICA: SICK OF IT ALL + MADBALL + ANAL HARD

 

SICK OF IT ALL + MADBALL + ANAL HARD

21 – 10 – 10

Durango (Plateruena Kafe Antzokia)

SICK OF IT ALL

El cartel era de verdadero lujo. Dos de las bandas más grandes del hardcore de la cuna americana nos visitaban un jueves noche. A pesar de ser aún entre semana la gente no falló  a una cita con nombres de esta envergadura. Está claro que hay que repartirse bastante entre la cantidad de bandas que nos visitan, pero cuando estamos ante las bandas más referentes el tirón del rock es más que notable, sea un estilo u otro. Entre esos dos gigantes tal vez se viera muy pequeño el nombre de una banda a seguir la pista. Ya lo anunciábamos en nuestro programa de radio la semana anterior al concierto, que no convenía perderse la actuación de Anal Hard. Algo más que una promesa ya con su tercer disco en la calle.

 

ANAL HARD

El público fue cogiendo posiciones sin llegar a entrar de lleno en la actuación. Evidentemente para la mayoría todavía son unos desconocidos y también hubo quien prefirió reservarse para los dos platos fuertes. Tuvieron un molesto problema con la guitarra durante sus 25 minutos de actuación, donde nos encontramos con temas que ya deben sonar a sus seguidores más afines como son “Orgías Tolos Días” y “Coños Radiactivos”, con la que cerraron su descarga. Mucha fuerza la que transmitieron, mucho descaro y hasta falta de vergüenza para interpretar letras que explican por qué han denominado a su estilo Defeko-hardcore. Estando atento a esos textos, identifiqué entre medias de sus temas el “Bienvenidos” de Miguel Ríos y el “Bailar Pegados” de Sergio Dalma, aunque con esta guturalidad no se si todo el mundo se percataría de los detalles. Tampoco me preguntéis si esto es habitual en sus conciertos, si los temas están así registrados o si es simplemente paranoia transitoria de esta gente porque no lo se. Para la próxima ya les conoceremos un poco más.

 

ANAL HARD

La sala había ido cogiendo gente hasta comenzar a notar verdaderas apreturas. Incluso el palco superior tuvo que ser abierto desahogando un poco la parte de abajo. Probablemente desde ahí arriba se pudo disfrutar del espectáculo perfectamente, porque desde que salió Madball a las tablas ya no solo teníamos que mirar al escenario, entre la concurrencia también merecía la pena reparar en los circle pit y mosh que se irían sucediendo. Todo forma parte de este circo. Los veteranos de esta escena dominan el terreno como nadie y saben meterse al público en el bolsillo desde que comienza el show. No tardó ni un minuto Freddy Cricien en tener contacto directo con el público acercándose a las vallas cuando todavía los fotógrafos estaban en el foso. A partir de “Smell The Bacon” el ambiente se iría calentando paulatinamente con temas hechos para ese público entregado desde el principio. Así lo atestigua ese “We The People”, mientras que la banda aprovechaba para presentarnos su último trabajo, “Empire”, con el tema homónimo.

 

MADBALL

De ahí en adelante la velocidad de temas como “Can´t Stop, Won´t Stop” se encargaron de acelerar la descarga para hacer cundir al máximo el tiempo del grupo en escena. Para cuando la contundencia de “Hold It Down” nos golpeaba la banda ya estaba sudando a chorro limpio. No había reservas para encarar con inusitada fuerza temas como “Look My Way” o “Get Out”, con el inquieto frontman pidiendo a la gente en español que cantaran con él. Por supuesto, obtuvo respuesta en un ejemplo de carisma y conexión con la peña.

 

MADBALL
MADBALL

Precisamente para conectar vino de perlas la versión de The Animals “It´s My Life”, provocando la locura entre un respetable que cada vez perdía más la compostura. No es de extrañar ante una banda que escupía verdadera rabia y contundencia en temas como “Infiltrate The System”, realmente transmitido con odio. Pero el tiempo se les echaba encima y después de haberse mostrado agradecidos a Sick Of It All encararon una recta final donde estuvo lo más granado de su descarga. Ese “Pride (They Are Changing)” fue ya un verdadero puñetazo de furia que hizo estremecer las paredes del recinto. Y ya lo que faltaba era un tema como “100%”, que cantado en español fue la gota que colmó el vaso para que la gente estallara junto a la banda. Un momento en que el concierto pasó a ser un ritual con una unión entre todos. El tumulto pasó a ser un mar con bravo oleaje que luchaba por llegar a esa orilla marcada por la delimitación del foso, donde se aferraba el vocalista para estar lo más cerca posible de sus seguidores. Un último furioso grito de “Hardcore Still Lives” fue la más acertada y contundente manera de decir adiós a 40 minutos de una intensidad desmedida.

 

MADBALL

La actitud que posteriormente nos ofrecería Sick Of It All no le fue a la zaga a sus predecesores. Tenían el listón alto y vaya si los tíos se liaron la manta a la cabeza para no quedarse atrás. Todo lo contrario, con un personal ya de sobra metido en la noche que había ido a vivir, aprovecharon la carrerilla para terminar por reventar el recinto. Desde el principio con “Good Lokin´ Out” ocurrió así. Un estruendo de euforia y alabanza dio la bienvenida a la banda tras el primer ramalazo de caña. El disco que presentan en esta gira es ese reciente “Based In A True Story” del que no se olvidaron con representaciones como “Death Or Jail”, “The Divide” o “Month Of Sundays”, pero la gente quería harcore old school como pudo comprobar un hipercativo Lou Koller cada vez que preguntaba. Aunque para actividad la de su hermano Pete Koller que con su guitarra en ristre es un verdadero culo inquieto capaz de saltar de un lado al otro del escenario en un segundo. Cazarle en una foto fue una labor más que complicada.

 

SICK OF IT ALL

La energía es lo que prima en un concierto donde todo se acrecentó con respecto al panorama que dejó Madball. Sobre ese oleaje provocado por el movimiento del público pudimos ver brazos, piernas, cabezas… Una imagen se me quedó en mente cuando uno de los aficionados llegó, literalmente, flotando sobre los brazos de las personas presentes en la sala llegando ante la valla en la que Lou Koller se encontraba cantando. Este le dirigió el micro y terminó de cantar el tema con él. Desde luego, la gente se pudo sentir totalmente partícipe de una fiesta que ya era una orgía hardcore de vieja escuela. No en vano, teníamos delante a una banda que en 2011 cumplirá su 25 aniversario, cosa que el vocalista no se olvidó de recordarnos, dejando bien claro que este es uno de los grupos legendarios que se dedican desde hace mucho a sembrar el más libre descontrol en diferentes recintos.

 

SICK OF IT ALL
SICK OF IT ALL

Para comenzar a completar el recital “Step Down”  fue un punto de inflexión que nos puso a rodar cuesta abajo y sin frenos ante himnos coreables como “My Life”. Cuando llegamos a estos temas de los primeros tiempos de la banda comprobamos cómo los nuevos han ganado en agresividad, sobre todo en el aspecto vocal. Sin embargo, el público sigue prefiriendo temas antiguos, como suele ocurrir. Eso comprobamos con la respuesta verdaderamente efusiva de “Call To Arms”, “Busted”, con Craig Setari utilizando un megáfono y haciéndose cargo de la voz, o “Scratch The Surface”.

 

SICK OF IT ALL

La adrenalina estaba subiendo a lo más alto en otro concierto de una intensidad a prueba de bombas. Pero ya fue culminante cuando la banda separó en dos la sala para hacernos cantar a uno y otro lado provocando luego el choque de ambos bandos en una batalla sin cuartel, muy divertida y poco dolorosa, aunque alguno igual se llevó más de un golpe, mientras que los laterales de la sala se estrechaban ante el movimiento central. Era el turno del teórico final con “Us Vs Them”, rematando un concierto de entrega irreprochable por parte de músicos y público. Pero había ganas de  más a tenor de lo que pudieron comprobar las propios miembros de la banda con el clamor incesante de la concurrencia. Todavía nos ofrecieron dos ramalazos más ante un incansable Plateruena Kafe Antzokia, que no estaban inicialmente en el set list dispuesto para el concierto. Entre ellos estuvo un agradecido “Sanctuary”, para dar una última bofetada sonora de la noche que nos guardamos como recuerdo de la despedida. Todavía estoy notando en mis huesos el impacto.

 

SICK OF IT ALL

De nuevo fue un concierto corto, de apenas una hora, pero dio de sí tanto como para saciar hasta al más ansioso de los fans. Supongo que cuando te encuentras en el ojo del huracán el tiempo debe pasar más despacio. Esto fue algo parecido, solo que llevando esas sensaciones al plano más placentero. Una velada completa en la que Anal Hard preparó la tormenta, Madball la hizo estallar y Sick Of It All la desató definitivamente. Experiencia solo comprensible si la has vivido en el lugar.

Texto y fotos: ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es) y

FITTI (fitti@lamiradanegra.es)