CRÓNICA: SKID ROW + BUCKCHERRY + BUFFALO SUMMER

 

SKID ROW + BUCKCHERRY + BUFFALO SUMMER

19 – 06 – 14

Bilbao (Santana 27)

 

 

En otros tiempos no cabe duda de que la aparición conjunta en un cartel de dos nombres como los de Skid Row y Buckcherry hubiera hecho que la Santana 27 se quedara pequeña. Pero en la actualidad este cartel se acogía con un poso más nostálgico que de verdadera sensación actual que puedan reportar ambas bandas a la escena. En una fecha complicada, a tan solo un día del Azkena Rock en Gasteiz, con el mundial de por medio y un jueves que llamaba a las puertas del verano, teníamos cita con dos grandes bandas con historias bien diferenciadas.

BUFFALO SUMMER
BUFFALO SUMMER

Por un lado Buckcherry, que nunca llegaron a romper de manera definitiva para conseguir ser esos nuevos Guns N´ Roses a los que les catapultaban las críticas sobre todo de su debut homónimo del año 99. Unos nuevos clásicos del hard rock, que han conseguido estar cerca del objetivo, pero que pese a ser un grupo bien considerado que además se ha colado en festivales importantes, dista mucho de ser el fenómeno que por ejemplo Skid Row sí fue y sigue siendo si tenemos en cuenta la relevancia de sus trabajos todavía a día de hoy.

BUFFALO SUMMER
BUFFALO SUMMER

Porque, por otro lado, la clásica banda de hard rock americana se presentaba en Bilbao con buena parte de su formación original, pero sin la presencia del que siempre será considerado su cantante. No obstante, teníamos curiosidad por ver cómo se desenvolvía Johnny Solinger en ese papel, más que en sus temas propios en los clásicos de la formación con los que todos fuimos en mente a la sala Santana 27 y que, evidentemente, no pueden fallar. A su favor, que no se han dejado ver por aquí en mucho tiempo, con lo que esta era la primera vez que en mi caso iba a poder presenciar un concierto de Skid Row. Esté quien esté en la formación un nombre siempre grande para nuestra música. Que nadie se olvide.

BUFFALO SUMMER
BUFFALO SUMMER

Los que tenían que batirse el cobre abriendo la noche eran Buffalo Summer. Una banda de los que algunos recordaban su paso hace cosa de un año por la sala Azkena de Bilbao en un concierto gratuito, pero de los que en general muy poco se sabía. Su estilo tal vez se quedaba excesivamente setentero en comparación a los otros dos integrantes del cartel, pero no les fue óbice para salir victoriosos del envite. Qué gran banda de directo capaz de sonar de cine con una básica formación de cuarteto. Lástima que el revival  setentero ha encontrado en los últimos años a grupos como The Answer, porque en esa liga podrían estar a ese nivel estos escoceses sin ninguna duda. Ya sabemos que los nombres que centran la mayor atención parecen eclipsar a todo lo demás. Pero su concierto para nada quedó ensombrecido esta noche por nadie. Grata impresión por parte de un grupo de músicos fantástico, que cada uno en su faceta se desenvuelve bien en ejecución y en puesta en escena. Me recordaron en ocasiones a The Black Crowes, desprendiendo autenticidad dentro de sus clásicas influencias. Gente a la que la música que toca les ha calado hasta los huesos y así lo desprenden igualmente, con ilusión y buen hacer.

BUCKCHERRY
BUCKCHERRY

En el reparto de turnos que a lo largo de la gira vienen teniendo durante los dos cabezas de cartel, hoy le tocó a Buckcherry salir en primer lugar. Con muy buen rollo aparecieron en el escenario con la intro previa a “Lit Up”. En este aspecto se lleva la palma un simpático Stevie D que bien le podría prestar un poco de carisma a Josh Todd. Con el pedazo de voz que posee este tío, es una pena que a veces parezca estar excesivamente relajado en escena, con un tic llamativo que lo convierte en fumador sicológico.

BUCKCHERRY
BUCKCHERRY
BUCKCHERRY

Si destacamos el carisma de Stevie D a la guitarra, el talento y el tacto de un más sobrio Keith Nelson es remarcable y la base rítmica conformada por Kelly LeMieux al bajo y Xabier Muriel a la batería es de auténtica categoría. Sin embargo, como en Kobetasonik, me vuelvo a quedar con la sensación de que este grupo puede resultar más impactante en directo. Será por dejar siempre algo para la próxima.

BUCKCHERRY
BUCKCHERRY

Comenzar con el tema con el que muchos les conocimos allá por 1999, integrante de su debut, supone un cartucho gastado muy pronto que tal vez en una parte más avanzada del concierto hubiera sido un seguro para levantar el ánimo. Pero la banda angelina hizo una actuación a la inversa de lo que suele ser habitual. Es decir, los temas más longevos aparecieron al principio y los nuevos al final. Estos desgranaron sus mejores y más conocidas bazas en la primera mitad del concierto, continuando con “Dead Again” a las primeras de cambio dando ya por zanjado el recuerdo a su homónimo disco. “All Night Long” fue un festivo interludio para pasar a otra fase, en esta ocasión de presentación de temas del que puede ser su trabajo angular hasta la fecha “15” Consecutivamente nos interpretaron “Broken Glass”, “Everything” y “Sorry”, balada excelentemente acogida por el respetable.

BUCKCHERRY
BUCKCHERRY
BUCKCHERRY

Ya con el vocalista mostrando su cuerpo tatuado hasta el cuello y sudoroso en una tarde noche de mucho calor en Bilbao Buckcherry rescató de su segundo trabajo, “Time Bomb”, “Slamin” y “Porno Star”. Si bien no contó con la buena acogida del primero, canciones como estas demuestran su valía. “Tired Of You” nos llevó a fuego lento a la parte final del concierto, que sorpresivamente fue dedicada a su reciente obra “Confessions”. De la misma “Gluttony”, “Wrath” y “The Truth” nos acercaban hacia un final del concierto con menos picante de lo que había tenido la primera parte de la descarga. El grupo, sabiendo que esta no sería la forma de despedirse que más satisfaría a sus seguidores, se reservaron “Crazy Bitch”, dejando como extra una versión más curiosa que otra cosa del “I Love It (Say Fuck It)” de Icona Pop, que sin embargo hizo mover a más de uno con ganas de fiesta. Me dejaron mejor sensación que cuando les vimos en Kobetasonik en 2009. Hay clase en la banda de sobra.

BUCKCHERRY
BUCKCHERRY

Skid Row basaron su repertorio fundamentalmente en sus clásicos. La presencia en la banda de Scotti Hill, Snake Sabo y Rachel Bolan avala la esencia de aquellos temas, si bien hay que admitir que un miembro no original de la banda como Sebastian Bach, que entró en 1987 y permaneció en el grupo hasta 1996 ha dejado una sombra muy alargada, resultando imposible de sustituir, imposible de borrar del recuerdo de cada uno de los seguidores de los americanos que se dio cita en Santana 27 e imposible de dejar de mencionar en esta crónica. Y digo esto reconociendo la mejor intención puesta por un Johnny Solinger que lo sabe tan bien como nosotros. El vocalista se esfuerza en conectar con el respetable, se defiende perfectamente en los temas de su época en la banda, como en el incial “Let´s Go”  de lo último editado por el grupo, o en un “Thick Is The Skin” que de toda esta época nacida en 1999 puede ser el que mejor sabor deja  y el que pueda equipararse, aunque sea un poco, a alguno de sus temas clásicos.

SKID ROW
SKID ROW

Pero la banda sabe perfectamente lo que el público desea escuchar, y no repara a la hora de descargar temas de sus dos primeras obras. Skid Row nos dejaron dos imprescindibles discos al inicio de su carrera. En 1989 editaban su homónimo trabajo, poseedor de himnos que solo acrecientan su impacto con el paso del tiempo. Y en 1991 salía a la calle “Slave To The Grind”, que también nos dejó himnos imperecederos, encumbrando ya a los altares del rock el nombre de Skid Row. Pese a que con el tiempo se pueda ver su nombre como el de una banda venida a menos, lo cierto es que nadie les quita la firma de esas canciones que han marcado a varias generaciones.

SKID ROW
SKID ROW
SKID ROW

Tan solo hubo una pincelada más de la última época del grupo. Me gustó el impacto de “Kings Of Demolition” del último EP, que la banda también tiene la obligación de presentar en vivo. No serán en este caso un grupo que digamos pueda decir que está en un momento musical a la altura de su pasado, pero cuando menos hay zarpazos como este que muestran que no estamos ante un grupo que se limite a repartir nostalgia, aunque inevitablemente haya mucha en su actuación. También nos ofrecieron  “Psycho Therapy”, versión de Ramones incluida en su disco de rarezas “B Sides Ourselves”, interpretada por Rachel Bolan a la voz con una gran actitud.

SKID ROW
SKID ROW

El reparto de clásicos propios entre estos pequeños guiños fue constante. Y si bien a Solinger le podía costar trazar las melodías de Sebastan Bach y se esforzaba por llegar a los registros rotos más agresivos de algunas canciones, no dejaron de ser disfrutados por el personal, con unos músicos que se entregaron para constatar que estábamos realmente ante uno de los grandes del hard rock de todos los tiempos, algo que se demuestra con piezas incontestables de nuestra historia como “Big Guns”. Segundo tema de la noche que abrió ya un recorrido por aquel debut del 89 con “Makin´ A Mess”, “Piece Of Me” y “18 And Life”, recibida con un clamor popular lleno de admiración hacia una de las grandes baladas del rock de siempre.

SKID ROW
SKID ROW
SKID ROW

Sin embargo, le superaría posteriormente  “I Remember You” en cuanto a emotividad. Fue la última balada del repertorio. Anteriormente también nos brindaron una igualmente sensacional “In A Darkened Room”. Pese a contar hasta con tres temas lentos la banda los escalonó y no se hizo para nada el concierto parado, ni mucho menos. Además que en esta tesitura Skid Row se ha currado unos enormes temas, sin dejar de ser una banda con dureza siempre en temas clásicos como “Riot Act”, que brindaban al concierto siempre una necesaria intensidad. Con el puñetazo llamado “Monkey Business” se marchaban para regresar con tres zarpazos definitivos como “Get The Fuck Out”, “Slave To The Grind” y “Youth Gone Wild”.

SKID ROW
SKID ROW

Con este repertorio queda clara la mejor intención de la banda para complacer la exigencia del público. Otra cosa es que la imagen de su época clásica no se nos fuera de la mente mientras disfrutábamos del presente de Skid Row. Cosas de un pasado glorioso, el paso del tiempo y sus consecuentes cambios.

Texto: ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

Fotos: MARI JOSE MARTIN (mari@lamiradanegra.es)