CRÓNICA: SEVEN + ORION CHILD + INNER DESTINY

 

SEVEN + ORION CHILD + INNER DESTINY

02 – 10 – 11

Barakaldo (Edaska)

Apunto estuvo de contar esta actuación de Seven en la sala Edaska de Barakaldo con la presencia del guitarrista de Rage Victor Smolski, que ha sido productor de esta banda checa. Finalmente, aunque el guitarrista hizo un clinic apenas unos días antes en Bilbao, las fechas no cuadraron y nos quedamos con la miel en los labios. Precisamente con Rage habíamos tenido oportunidad de ver a Seven ya por nuestra tierra. En esta ocasión ellos como baza principal se aventuraban a visitar una sala en la que no acostumbramos a ver grupos internacionales. Por lo tanto, nos parecía un lujo poder ver a esta banda, con 7 discos editados y con gran calidad, en una distancia tan corta.

 INNER DESTINY

INNER DESTINY

Antes que ellos, era muy atrayente también la presencia de Orion Child, para los cuales la prensa especializada no ha escatimado en alabanzas tras su espectacular debut discográfico “A New Dark Apology”. Los que eran unos desconocidos totales para el público general eran Inner Destiny que, sin embargo, juntaron una buena cantidad de familiares y conocidos. La sorpresa fue muy grata. Ya desde fuera de la sala, escuchando la prueba de sonido, me estaba impresionando lo que llegaba, cosa que luego pude corroborar con mis propios ojos y oídos.

 INNER DESTINY

INNER DESTINYEl sonido no les hizo ningún favor, ya que no fue del todo bueno y les jugó alguna mala pasada, pero las dotes de la banda apuntan un gran futuro para estos chicos tan jóvenes. Su power metal de escuela alemana no goza hoy de tanta popularidad como hace unos años, pero todo puede cambiar en un futuro. Desde luego, ellos tienen muy buenas cualidades, especialmente en los elementos fundamentales que siempre han destacado en el heavy metal: la voz y la guitarra. Ruben tiene una voz espectacular que nos recuerda mucho a la de Michael Kiske y Julen es un guitarra técnico que mete unos solos veloces e inmaculados en cuanto a ejecución. También cabe destacar la aportación del teclado, con unos detalles que en lo más ampuloso también recuerdan en parte a bandas italianas. Seguro que Labyrinth es otro grupo de los que gusta a estos chicos formados bajo el nombre de Inner Destiny desde 2008. Cuando asomen la cabeza van a dar una  alegría a los seguidores del estilo que practican.

 ORION CHILD

ORION CHILDDe los que ya teníamos unas expectativas creadas era de los también vizcaínos Orion Child. Al igual que a sus predecesores el sonido tampoco les ayudó demasiado, lo que no impidió que me dejaran una impresión fantástica, con un engranaje de los 6 componentes del grupo digno de cualquier banda internacional. Comenzaron el concierto sin que la voz gutural se escuchara. Una pena porque estaba siendo demoledor el arranque de concierto con “Slave To The Dark”. La banda venía de tocar en Madrid ante una sala bastante más concurrida quela Edaska, pero desde el inicio y pese a los problemas, pudimos percibir que estos no son de los que se achican ni de los que dejan de darlo todo sobre el escenario en cada momento.

 ORION CHILD

ORION CHILDPese al sonido, pudimos disfrutar de la buena forma en la que el grupo se encuentra tras la edición de ese debut que les ha puesto de lleno en el panorama de nuestra música llamando la atención de mucha gente. Unen la elaboración a la contundencia y la melodía la funden en un clamor de rabia encarnado en esa agresividad que desprenden unos temas de power metal extremo, que lo mismo puede atraer a fans del progresivo, que del metal alemán o del death metal. Tiene de todo y en directo la banda para nada sufre las consecuencias de tanta complejidad, sino que fluye de la manera más natural. Hay que destacar la pareja de guitarras que conforman los dos hachas del grupo, que dejaron solos compartidos del agrado de los más tradicionales.

 ORION CHILD

ORION CHILDIntentando que un público un tanto alejado del escenario se acercara fueron cayendo temas como “Out Of The World”, “Dark Matter” o “Eclipse”. Finalmente, y ante el esfuerzo de la banda, accedimos a dar un par de pasos hacia delante para arropar en la medida de lo posible a una banda que debemos mimar por el capítulo que nos ha dejado, por los que nos puede dejar y porque, además, son un autentico tornado que nos envuelve en directo. La voz melódica, unida a la tónica elaborada de las canciones, nos recuerda a esos Arwen cuando Nacho Ruiz se hacía cargo de la voz. No en vano, José Garrido, precisamente líder de ese fenomenal grupo madrileño, se hizo cargo de la producción del disco que hoy nos presentaban.

 SEVEN

SEVENEntre ese extracto de su obra, con más temas como “Your Blood In My Hands” o “Fareway”, se marcaron una versión, inesperada por mi parte, de “Zombie” de The Cranberries, que en nada casa con la propuesta del grupo. Sin ser espectacular el resultado, es un tema destinado a enganchar al público, que debería valorar luego doblemente lo que hacen en un tema como “Tragedy Of Souls”, que termina su disco y que terminó su actuación. Una banda de presente y futuro con una obra que más de uno puede conservar ya como un tesoro para la posteridad y que brinda unos directos exquisitos en los que superan con nota la inclusión de todos los matices de una música que debe resultar aplastante y directa, a la vez que realza cada detalle técnico y de elaboración. Consiguen que en nada se pierda el sentir tan refinado de su trabajo de estudio a la vez que ganan en la crudeza de un directo. Impresionante banda que esperamos ver en mejores condiciones en un futuro.

 SEVEN

SEVENQueda claro por el lugar elegido que Seven no son un grupo demasiado conocido, aunque llevan ya una trayectoria bastante larga a sus espaldas. Tampoco esla República Checa un lugar de donde nos lleguen muchas bandas de heavy metal y más en una onda tan tradicional, lo que también le puede suponer un hándicap a la hora de salir. Ellos están intentando emerger por el resto de Europa, siendo esta la tercera vez que pisaban suelo estatal. Ya vinieron en dos ocasiones con Rage, a los cuales me recuerdan muchos riffs de guitarra del líder y único miembro fundador que permanece en la banda Honza Kirk Běhunek, uno de esos hachas que valen por dos, ya que él solo se sobra y se basta para sacar de sus seis cuerdas una colección de riffs de puro y duro metal que pueden quitar el hipo a cualquiera y además de ser un diestro solista que no necesita rival con el que batirse en duelo. Investigando sobre los inicios del grupo, no en vano, he encontrado que sus primeras obras eran instrumentales. En esa tesitura nos descargaron “The Whales Sing”, que fue un ejemplo no solo de virtuosismo, sino también de originalidad y de fuerza metalera, mientras que el siempre sonriente guitarrista destapaba el tarro de las esencias.

 SEVEN

SEVENPero lo que nos vinieron a presentar era su reciente nuevo disco “Freedom Call”, que es como un reinicio para la banda con un nuevo y portentoso vocalista llamado Lukáš Písařík, que acaba de debutar discográficamente con esta banda pero que tiene absolutamente todo lo que un vocalista de metal requiere: presencia escénica, una actitud fantástica y una voz alucinante donde la potencia y la melodía brillan a partes iguales. Un complemento que se acopla a la fuerza de una banda capaz de derribar muros con cada caída de uno de sus temas, cada uno un golpe que hizo retumbar los cimientos del edificio con un sonido en este caso perfecto. Hay que tener en cuenta que esta formación era mucho más básica, tan solo con una guitarra y sin presencia de teclado, lo cual simplifica las cosas para los técnicos que, en este caso, eran los suyos propios y no los de la sala.

 SEVEN

SEVENDe ese nuevo “Freedom Call”, que esperemos marque un arranque definitivo para la banda por fin con una formación estable, nos descargaron perfectos golpes de metal como el homónimo, “Wild In The Night”,  “The Road” o el que nos presentó el vocalista como el más fuerte de todos “Get It”. En “So Scarred” vimos al bajista y al guitarrista hacer el solo con unos taladros, al igual que Paul Gilbert apenas una semana antes con Mr Big enla RockstarLivede Barakaldo, y hay que destacar himnos como “No Surrender” o miradas al pasado del grupo con “The Magnificent Seven”, que refleja muy bien lo que la banda es en un solo tema. También me gustó mucho “Acedia”, porque cambia un poco la tónica de potencia del grupo para reparar en otros detalles y melodías más alegres antes de darnos de nuevo heavy metal del auténtico con “Midnight Cirkus” o “Last Hero”, con el cual se despidieron dejando una gran sensación.

 SEVEN

SEVENAhora que todas las piezas parecen encajar esperemos que se asiente la banda y que tengan la oportunidad de demostrar al mundo que en Seven tenemos una de las bandas a tener más en cuenta en la escena internacional. Si hasta Doro ha colaborado con ellos en uno de sus trabajos y Victor Smolski los avala es que en esta gente hay algo que les debe de llevar mucho más arriba tras 15 años demasiado en la sombra. Si te gusta el heavy metal con una buena colección de riffs pesados, directos, contundentes, pero también técnicos, unos buenos solos de guitarra, una base rítmica demoledora y una voz limpia y con una capacidad abrumadora, puedes arrepentirte de haberte perdido un concierto de este calibre en una situación tan íntima. Momentos que no pasarán a la historia como un gran acontecimiento, pero que son difíciles de repetir.

Texto: ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

Fotos: MARI JOSE MARTIN (mari@lamiradanegra.es)