CRÍTICA: BAJOPRESIÓN – LA MAQUINA DE SUEÑOS

 

BAJOPRESIÓN

(La Maquina De Sueños)

8/10

 

 

 

“Desafiando El Caos” fue un primer disco de Bajopresión que ahora podemos ver casi como un trabajo experimental. La banda de Javier Caneco y Rodrigo Álvarez-Martín debutó tras la disolución de Asfaltika, que podríamos considerar el paso previo a lo que hoy es Bajoppresión, con un trabajo repleto de colaboraciones con un resultado verdaderamente espectacular. Pero aun faltaba armar a una banda base que ya funcionara con unos componentes fijos. Para conseguirlo al bajista y al guitarrista anteriormente mencionados se han unido el cantante Antonio Robledillo y el batería Nacho Ortiz. En principio un combo de metal muy básico para un grupo que lleva en el ADN un aspecto sinfónico. Sin embargo, el resultado me ha parecido de lo más redondo, siendo “La Maquina De Sueños” un disco de heavy metal bastante crudo, pero sin renunciar a esas melodías marca de la casa que me recuerdan a los tiempos de Javier Canseco en Cuatro Gatos, y también con un inteligente trabajo de producción que de manera casi intuitiva y sutil ha dejado esas detallistas pinceladas sinfónicas, que en estudio surten su efecto y que no deberán echarse de menos en directo.

El disco se compone de 11 temas variados y dinámicos al máximo, marcados por su calidad compositiva e instrumental. No se rechazan ciertos aspectos progresivos, como en el caso de “Tu Mismo”, donde colabora en la voz solista Leo Jiménez. Los ritmos son de los más atípicos en este corte. También cabe destacar la capacidad de la banda para unir estribillos tan memorables como el de “Delirios” con unos destellos instrumentales de mucho nivel, por eso me parece éste un gran single. Fernando Ponce de León le da un toque folk a “El Alquimista”, redondo tema de apertura. Y no tardamos en darnos cuenta de que la obra no va a tener desperdicio con temas cargados de fuerza y con un mensaje normalmente muy marcado, bien de superación personal, como en el caso de “Cambiado El Destino”, o con una clara crítica como en el veloz “Falsedad” o “Parásitos”.

Por supuesto no falta el amor y el desamor. Ahí están los casos de “Último Adiós”, un tema muy hard rockero donde destaca el brillo que Antonio saca de su registro vocal con contrastes entre los tonos altos y graves, mientras que la balada como tal se la dejan a “Cien Años Mas”, que tampoco está de más en un disco completo de heavy metal que se precie. Tampoco tiene desperdicio “Condenado A Divagar”, que pese a tratar sobre esos momentos en que las musas no acompañan a un creador, lo cierto es que es un buen ejercicio de imaginación. La obra llega a la recta final con un himno metalero como “Hermanos De Sangre”, con Manuel Escudero en la voz y en el libreto un bonito prólogo de Oscar Sancho de Lujuria. Se cierra con “Juicio Final”, de lo más completo del disco y al que la guitarra de Victor de Andres (Zenobia) le añade una nota de colorido que hace de este cierre un tema ideal para saciar las ansias de todo exigente seguidor del heavy metal, que en Bajopresión encontrará una banda con muchos atractivos, tanto si aprecias esos temas que enganchan con grandes estribillos como si te gusta reparar en detalles compositivos de lo más trabajados.

La banda ha grabado en varios estudios. Batería con Andy C. en Cadillac Blood Studios, guitarras con Jorge Salán en The Utopian Sea, voces en La Casa Del Ruido Studios con Dani Blanco y bajos en R.One Studios con el propio Rodrigo Álvarez Martin. Pero a todo eso le ha dado empaste la mezcla del maestro Pepe Herrero de Stravaganzza. Y también cabe destacar el resultado de la colaboración en coros y asesoramiento de Leo Jiménez a lo largo del disco. Un trabajo pulido al máximo que asienta a Bajopresión como una de las bandas más interesantes y personales en el presente del heavy metal cantado en castellano.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

INFORMACIÓN ADICIONAL:

Sello: Rock Estatal Records