CRÓNICA: ESTIRPE + MONCADA 20

ESTIRPE + MONCADA 20

11 – 02 – 17

Bilbao (Azkena)

Bien se encargó Manuel Angel Mart de recordarnos durante la actuación que habían sido 5 largos años los que habían pasado sin que Estirpe pisara la capital vizcaína. 5 años en los que la banda ha vivido la escisión de su formación más estable, la edición de un disco como “Neurasia”, que se quedaron a las puertas de presentar en Bilbao, y la superación de una dura enfermedad por parte del propio vocalista.

Fue precisamente a unos días de tocar en Bilbao cuando Mart tuvo que afrontar ese duro trago que finalmente ha superado y tras el cual discos como “Jam Fuzzion Klan”, la última edición de la banda hasta la fecha, dejan claro que Estirpe siguen teniendo ganas de innovar y de hacer que su música supere nuevas fronteras.

Pese a ello en estos mismos días se anunciaba que esta gira sería la última, de momento, puesto que necesitan un descanso indefinido. Eso hacía si cabe más especial la cita en una sala Azkena que acogió calurosamente a los cordobeses.

Una sorpresa me llevé con la presencia de Moncada 20 como banda telonera. O mejor dicho dos. Una porque el grupo resulta del todo interesante, tienen ya dos trabajos editados y no les conocía de nada. Otra fue el hecho de encontrarme en la batería con el genial Ernesto Sánchez, ex de los madrileños Antigua.

El grupo apenas sí contó con 25 minutos sobre las tablas para demostrar su buen hacer dentro de un rock bastante asequible y a la vez personal. Temas de su EP de debut como “Sobrevolando Campos” o “Navío Varado”, de su primer largo como fue el caso de “Caza de Brujas”, y algún tema nuevo fue lo que pudieron ofrecernos como excelente muestra de la música del cuarteto vizcaíno.

Con muchas ganas por parte de banda y público se acogió este paso de Estirpe por Bilbao. Se notó desde la salida de la banda a escena, con un personal que no quiso dejar demasiado espacio con el escenario y que comenzó cantando junto a la banda “En Tus Ojos”. El grupo salió con fuerza, dispuestos a demostrar que tienen en su haber un extenso repertorio con canciones de todo tipo y condición, sin rechazar ningún estilo, pero todo barnizado por el genuino y único sello de Estirpe.

El cuarteto conformado actualmente por Mart y Loren Gómez, supervivientes de la vieja guardia, con las incorporaciones mas recientes de Paco Records Jr. y Miguel Fuentes a la batería resulta impresionante en escena, sacando a relucir todo ese sinfín de influencias de una manera impecable, haciendo de la experiencia de verles en vivo algo netamente visceral y con matices que sin hacernos echar de menos lo que se plasma en una grabación, dan un punto diferente a disfrutar de sus temas sobre un escenario.

Incluso se atrevieron con la intro de Adrian Terrazas de The Mars Volta plasmada en su última obra original de estudio. De hecho, es muy destacable el papel camaleónico de cada uno de los músicos, tanto para ejecutar esos ritmos tan vertiginosos como imprevisibles, como para marcar esas líneas de bajo donde recordemos que alguien prácticamente insuperable como Pepe Bao ha dejado su huella en el trabajo en estudio de “Neurasia” obligándote a contar en el puesto necesariamente con alguien de verdaderas facultades. Por su parte la inteligencia y el sentido con el que Loren realiza cada uno de los sonidos emanados de sus seis cuerdas merece una mención especial. No hay nada puesto al azar y la originalidad es la palabra que mejor puede describir la aportación del guitarrista.

Mientras Mart muestra la fuerza con la que ahora mismo se encuentra en una actuación personal tan ajena a estereotipos como su propia banda, dejándose llevar por el sentimiento de cada pasaje que sigue con sus movimientos sin desaparecer del escenario en ningún momento y acercándose a recibir constantemente el calor de su gente.

No sé si en un concierto como este se puede destacar un momento de la descarga, pero si lo hiciera me quedaría con el enlace de “Vértigo”, uno de los temas de “Inventarse El Mundo” que ha quedado como clásico en la banda y que posee una arrolladora energía para los directos que hace reaccionar a la gente de especial manera; con el siguiente contrapuesto en tono reggae “Un Esfuerzo Más”, con un final muy intimista donde los músicos se acercarían hasta las escaleras de la sala Azkena para terminar en el cuerpo a cuerpo con su gente mientras que alguien le tiraba una ikurriña y una bufanda del Athletic al vocalista. Creo que ese nunca es el final quedó especialmente retumbando en la sala en una noche como esta.

Claro que no se reduce su largo set list de cerca de dos horas a eso, sino que pasaron por la potencia de “Mi Revolución”, “Te Seguiré”, “Por Suerte”,  el toque mestizo que en directo resulta completamente efectivo de “Magnético”, piezas con el mensaje y la potencia de “América” o canciones tan intimistas como “En Silencio”, donde es una mera anécdota que a Mart se le olvidara la letra en una de su partes.

Nada que no se supla con otros momentos cargados de emociones y de color en lo musical. Es el caso de “Contigo” o “No Somos 100”.  Se acordaron de algún tema más clásico importante en sus conciertos como fue “Mi Bella Condición”, con un Mart muy entregado, aunque con la sensación personal de que tal vez una parte de los presentes conocen más los temas nuevos. No es mala señal puesto que significa que la banda sigue muy viva en el presente, pero cierto es que temas como este han envejecido muy bien, con un mensaje aun muy vigente y con un vocalista que tuvo que entregarse en esos agudos tan particulares. “Encender Otro Ángel” marcaría un punto y aparte antes de los bises con previa presentación de la banda.

“Infinito” supuso el regreso al escenario, con otro momento de los más relajados como fue “El Último Pétalo”, uno momento espectacular cargado de sentimiento donde la voz de Mart fluye como ese violín con el que contaron en estudio. La sutileza con la que la interpreta suple esas sensaciones, haciendo comprender que los directos son siempre algo necesariamente distinto a la experiencia de escuchar la música registrada en cualquier otro formato.

Y si de color hay que hablar tenemos que mencionar un tema que lleva siendo de lo mejor en sus directos desde que la interpretaran por primera vez, aunque comenzara con algún percance a la tercera, como en esta ocasión. Hablo de “El Color De Mi Voz”, el mejor homenaje a la música por parte de una banda que a su vez tanto engrandece este arte. “Hazme Creer” fue la encendida ofrenda final para deleite de todos los presentes y lo último que atronó, por el momento, en la capital vizcaína. Porque aunque es algo que llevábamos dentro tras la reciente noticia jamás se hizo referencia desde el escenario a ese parón indefinido por parte de la banda. Así que… hasta la próxima.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)