CRÍTICA: SEALED ROOM – LA LIBERTAD DE LOS SUEÑOS

 

SEALED ROOM

(La Libertad De Los Sueños)

6´5/10

 

 

 

Como suele ocurrir en estos casos, no estamos ante unos novatos. Esta banda vizcaína lleva funcionando desde el año 2000, sin embargo es con este “La Libertad De Los Sueños” con el disco que yo les he conocido. Según apuntan en su biografía, han evolucionado desde el Nu-Metal de sus inicios hasta esta postura cercana a la onda Söber. Sin embargo, hay que destacar la personalidad que tiene el grupo. El estilo es deudor indudablemente de la banda de los hermanos Escobedo, pero hay matices, fundamentalmente en una voz con un timbre fantástico y especial, que les hacen dejar su propia aportación a nuestra escena y poder crear esa pizca de interés. Un ejemplo que me parece de lo más apropiado es “Punto Final”, donde la tesitura vocal luce de una manera diferente. Creo que sería interesante que este tipo de desmarques se aprovechen en una segunda obra.

En el plano musical destaca la alternancia de melodía y potencia, la capacidad de pasar de pasajes sutiles a tramos con guitarras fuertes. El problema es que por el momento se puede hacer algo previsible. Es muy habitual que los temas empiecen lentos y pasen a rugir en las guitarras con la voz melódica subiendo en intensidad. Unos ejemplos son el primero “Desigualdad” y “En Pie”, pero podría recurrir a demasiados casos iguales. Sin embargo, no pongo en duda una calidad incuestionable que con un mejor sonido hubiera podido subir bastantes enteros. Lo digo porque no sé hasta qué punto a muchos temas les conviene que se adquiera en la guitarra un sonido algo sucio cuando en contraste la voz es limpia como la patena. Otra cosa es que verdaderamente salgan temas como “Boomerang” que nos saca de una posible monotonía y suena fuerte desde el principio, resaltando un poco más la chispa que puede tener el grupo. Resulta brillante el grupo en pasajes melódicos en los que convive la voz a la par de originales detalles que nos hacen agudizar el oído y que demuestran imaginación para dibujar algo verdaderamente trabajado.

No diría que tan libre como reza el título de la obra, porque tal vez aún estos sueños tengan cierta inducción desde el exterior, pero sin duda Sealed Room muestra una calidad a tener en cuenta. Solo que me gustaría poder recomendárselo a más público que al acérrimo del sonido Söber y sucedáneos, pero de momento no puedo. Me quedo con los atisbos personales que se podrán explotar en el futuro. Eso sí, si tus gustos van por ese lado de la música de manera convencida, aquí tienes otra propuesta de nivel que no te defrauda seguro.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)