VIRGIN STEELE + SABATAN

21 – 10 – 11

Barakaldo (Rockstar Live)

De todos los conciertos que van a pasar por nuestra zona en esta temporada, probablemente uno de los más deseados por el auténtico devorador del metal fuera el de Virgin Steele, ya que no se presume nada fácil volver a ver por aquí a una banda tan peculiar, verdaderamente única en la escena internacional, tremendamente marcada por la personalidad de su líder y vocalista David Defeis. Una auténtica banda de culto que, como tal, acapara la atención de los más metidos en la materia. Por ello un selecto y reducido público de en torno a los dos centenares de personas nos reunimos en la Rockstar Live de Barakaldo. Por debajo de lo que merece la calidad de la banda americana, pero acorde con los extraños y duros tiempos que vivimos.

SABATAN
SABATAN

Los madrileños Sabatan tuvieron que lidiar con una sala a la que aún le faltaban bastantes de los asistentes que se apuntarían solo al grupo principal. La respuesta fría del respetable no les amilanó, sobre todo a un Dani López, también vocalista de los thrashers Rancor, que aquí lidia en un estilo mucho más tradicional. Tal vez no sea un vocalista que le saque todo lo posible a los registros limpios, pero como frontman es un seguro. Sus temas de heavy metal tradicional, con elaboración y cierto toque personal, no llegaron a calar demasiado en una audiencia poco receptiva que les premió con tímidas ovaciones, pero ellos sonaron bien y desplegaron sin reservas temas de cosecha propia como “Serpent King”, “Stay Heavy” o “Fire Angel”; con la ayuda también de la bien ejecutada versión de Annihilator “Phantasmagoria”. Deberán seguir currándoselo para oportunidades más favorables, ya que telonear a una banda como Virgin Steele tampoco les sirvió para tocar ante una audiencia demasiado grande.

SABATAN
SABATAN

Uno no puede perderse la ocasión de ver a un grupo como Virgin Steele, porque esta puede que no vuelva. Y no es por ser agorero. Pero es que una banda con el nivel de estos americanos sin observar el tirón necesario entre la concurrencia es difícil de traer con el riesgo que ello conlleva para los promotores que ponen su dinero. Por lo tanto, valoramos como única esta posibilidad, al igual que los asistentes que se arremolinaron en torno al escenario provocando la menor sensación de vacío posible. Había ganas de verles, como la propia banda tenía ganas de descargar. David Defeis no paró en toda la actuación, salió desde el principio a comerse el escenario, dando una sensación de fortaleza y liderazgo total en una banda donde quiero destacar también la aportación guitarrera de Edward Pursino, que se desenvolvió perfectamente tanto en riffs como en solos, así como en el acompañamiento de las melodías del teclado. Buena actuación individual la suya al servicio de las canciones de un David Defeis que se dobló en labores de vocalista y teclista, con la ayuda de algunas orquestaciones grabadas que realzan el carácter épico del grupo.

VIRGIN STEELE
VIRGIN STEELE
VIRGIN STEELE

Podíamos pensar que el repertorio se basaría en su última obra, pero nada de eso ocurrió, ya que la banda ofreció un recorrido por toda su discografía. El único reparo de la actuación lo encontramos en un inicio deslucido por el horrible sonido que no dejaba distinguir nada. Fueron cuatro temas, más o menos, entre los que no pudimos disfrutar en plenitud de maravillas como “Dust From Burnig”, “Inmortal I Stan” o “Wine Of Violence”. Esto no privó a la banda de descargar con actitud y mucho coraje. David Defeis ya había comenzado con su recital de falsetes en esa tonalidad vocal que le confiere un aspecto tan especial, de los que no deja indiferente.

VIRGIN STEELE
VIRGIN STEELE

Una vez pasado ese inicio, el sonido mejoró hasta lo aceptable, para poder disfrutar ya con mayor claridad de piezas clásicas como “Noble Savage”, cuyo título fue introducido con la ayuda del público. Un tramo del concierto al que se le unió otro clásico de aquellos 80 que dejaron bastante inadvertida a esta banda, con “Don´t Say Goodbye”, para pasar luego a canciones más conocidas por todos sus seguidores de esos finales de los 90 donde el resurgir del power metal tan bien le vino a esta banda. “Dominion Day” y “Victorious Mine” fueron un buen subidón, con el sonido siempre a mejor, cortado por el prescindible solo de batería. Me gustó más el de guitarra protagonizado por Edward Pusino, al cual se unió el resto del grupo antes de dar comienzo a “Defianze”, que nos llevaba a continuar desde el punto en que lo habíamos dejado antes de este descanso, continuando con un “A Symphony Of Steele” cargado de significado en un concierto de esta banda que pretendía no bajar el tono con “Twilight Of Gods”, nuevamente temas que para sus seguidores más tradicionales son importantes.

VIRGIN STEELE
VIRGIN STEELE
VIRGIN STEELE

Quiero destacar también la entereza y calidad con la que sonó “By The Hammer Of Zeus”, única pieza interpretada de su último “The Black Light Bachanalia”. Sus lanzamientos operísticos de temas muy conectados entre sí no llevaron a la banda a centrarse en plantear el concierto de idéntica manera, sino que estaban agradando a todos sus seguidores con una actuación, además, extensa y sin reservas. Pero aquello ya llegaba a su fin, aunque faltaba lo que terminaría de saciar a todos los seguidores. Tras un sensacional “The Burning Of Rome” la banda se marcha del escenario para volver con dos bises contrapuestos. Por un lado el heavy metal más ochenteno de “On The Wings Of The Night” nos daba la mano para volar junto al grupo en la posterior épica y ampulosa “Veni, Vidi, Vici”, extenso tema que fue como un orgasmo final de satisfacción total para todos los presentes. El mejor broche de oro a la descarga con el momento más grande en cuanto a calidad, intensidad y emoción. Virgin Steele en estado puro y con todo su esplendor.

Texto: ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

Fotos: MARI JOSE MARTIN (mari@lamiradanegra.es)