CRÓNICA: SEVEN BLACK ROSES + SLAMDOG + THIRTEEN LUCID DREAMS
SEVEN BLACK ROSES + SLAMDOG + THIRTEEN LUCID DREAMS
22 – 12 – 12
Bilbao (Azkena)
Noche de rock previa a las navidades. Se agradece en estas fechas en las que todo se para demasiado. Seven Black Roses, Slamdog y Thirteen Lucid Dreams se encargarían de endulzarnos musicalmente las fechas.
Thirteen Lucid Dreams no entra dentro del perfil rockero que seguimos en este medio. El trio de dos voces femeninas con una guitarra acústica, voz masculina y cajón se marcó una serie de versiones en apenas media hora. Temas muy relajados e interpretados en una tesitura netamente pop. Sirvió para calentar un poco el ambiente, pero con ellos las guitarras aún no rugirían. Si bien, nos dijeron que poco a poco van metiendo ya más detalles en sus canciones y que pronto tendrán temas nuevos.
Los que metieron caña fueron Slamdog. Esta banda de hard rock riojana nos sorprendió muy gratamente, a pesar de que comenzaron con alguna duda con unos primeros temas en los que no acabaron de sonar compactos. La afinación de la guitarra no cuadraba. Tras el cambio de guitarra aún tardaron en llegar a su punto exacto. Lo hicieron después de “Hold You”, tras afinar como es debido con alguna improvisación.
Sin embargo, a partir de ahí todo fue más rodado, el grupo comenzó a sentirse cómodo. El hard rock debe de ser sucio, como promulgan en “Get Dirty”. Era el último concierto de su teclista con la banda, al cual le dedicaron “Close To You”.
La banda se desmelenó, cada vez más cómoda en el escenario. Hasta la botella de Jack Daniels nos mostraron en el festivo “Drinking With My Friends”, llegando a la recta final cuando más estaban disfrutando ellos y nosotros con “Drive Crazy” y “Go Faster”. Una banda de hard rock con actitud, buen nivel musical y cosas que decir. Lástima que en esa primera parte temas como “Die M.F.” o “Rock And Roll Bulldog” no quedaran del todo bien por un sonido no cohesionado. También hubiera hecho más efecto la versión de “Inmigrant Song” de Led Zeppelin. De haber cuadrado esta primera parte hubieran redondeado un gran actuación, pero nos tenemos que quedar con la segunda mitad de la misma.
Seven Black Roses están ya más cerca del segundo disco, pero de momento siguen presentando fundamentalmente su recomendable obra de debut. Tras la intro de la música de la película “Terminator”, la banda entró a por todas con “Rock´N Roll Revolution”. En seguida se comprobó que el público estaba por la labor de apoyarles en todo caso. El grupo ha ido cosechando su legión de seguidores incondicionales y la propia banda sabe ganarse ese apoyo sobre el escenario, encabezados por Igone Dorao, quien más tarde atravesaría una fase del concierto difícil, pero que comenzó entonada como la propia banda.
Nos presentaron en esta primera parte un tema nuevo fácil de cantar, para enganchar al público que se sumó a entonar el título “Easy Money”. Un tema que nos explicó Eder Maseda, trata sobre esa gente que busca lucrarse con el Rock. Posteriormente, de lo mejor de la descarga fue “10.000 Nights”. Rock & Roll a todo trapo con actitud.
La noche iba a tener sus momentos especiales. Uno fue esa interpretación del tema nuevo, pero también lo fueron las colaboraciones. Aroa Zorrilla se marcó un dueto en la voz junto a Igone en el adaptado al castellano “No Mires Atrás”. Sensacional Aroa en su parte. Seguidamente Pedro De La Osa fue invitado al escenario por Eder. Recordando como era habitual en nuestra adolescencia escuchar entre las cintas de los clásicos del heavy metal a una banda llamada Gris Perla, que para nosotros formaba parte de esa colección de bandas que marcaron la época en la que aún estábamos creciendo. Con Pedro se marcaron “Running Free”, el cual improvisó algún solo al final del tema. Sin embargo, aquí comenzaron los problemas de Igone, que no llegaba a clavar los tonos y en algún momento se iba notablemente de la línea vocal a seguir. Después del concierto nos comentó que había estado con problemas el día anterior, con un virus gástrico de esos que las hacen pasar canutas, aunque no se excusó en el escenario. Ya lo hacemos nosotros en esta crónica porque la hemos visto cantar mucho mejor y creo que esta parte del concierto no hace justicia a su capacidad vocal.
El acústico “Wish You Were Here” también fue un pequeño sufrimiento para ella. Por fortuna, aunque no llegó a la perfección, se volvió a entonar en la parte final del concierto. Tras la crítica a la situación actual en “Forever”, indicando que todo cambiará y que nada es para siempre, tampoco lo negativo por fortuna, la banda nos dejó una buena interpretación de “Hell Frozen Fire”, aunque llegábamos a la recta final de manera apresurada, puesto que el tiempo se echaba encima. Metieron un pequeño guiño del “Paranoid”, que la gente agradeció muchísimo, en medio de otro nuevo tema como “Hungry”.
Fue una pena que no pudieran interpretar por falta de tiempo “Born To Rock”. Directamente pasaron a ese fortísimo “Rockwoman” que tanto significado tiene para el grupo. Hubo dedicatoria especial para Javi Acosta y su mujer, que pronto serán padres. Desde aquí vaya también nuestra enhorabuena por traer al mudo un nuevo rockero al que hubiera estado bien dedicarle ese nacido para el rock, pero como digo no hubo tiempo. La gente no dejó de animar hasta el final y la banda cerró con toda su fuerza la actuación. Una actuación ante su público a medio camino de presentarnos en un redondo nuevos temas. No solo supuso una forma de seguir engrasados, también tuvo la noche momentos muy especiales para recordar.
Texto: ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)
Fotos: MARI JOSE MARTIN (mari@lamiradanegra.es)
