CRÓNICA: OBUS + LEIZE

OBÚS + LEIZE

22 – 10 – 11

Barakaldo (Rockstar Live)

Por el calibre de ambas bandas no distinguiría posiciones diferentes en el cartel de esta noche. Se trataba de un cartel compartido por dos de los grupos más grandes de la historia del rock estatal, sin que uno mereciera estar por encima de otro. Bien es cierto que Obus ha logrado un reconocimiento mayor que Leize, pero considero a estos últimos uno de los diamantes que nunca se llegó a valorar del todo, pese a su momento de auge con trabajos inmortales como “Devorando Las Calles” o “Buscando Mirando”. La hora y cuarto de la que dispusieron los guipuzcoanos muestra que para nada estábamos ante unos teloneros al uso, sino ante una banda que necesita de tiempo para saciar a sus seguidores con buena parte de sus clásicos. Aún así se echaría de menos alguno, si bien la banda aprovechó todo su tiempo sobre las tablas, sin  descanso, echando una detrás de otra. De esta manera tan solo fue un tema menos que Obús lo que nos interpretaron en una noche de leyendas de nuestra música.

Leize no se han dejado ver mucho por Bizkaia desde que se reunieron, con lo que había ganas de volverles a tener aquí. Ese ímpetu también se notó en ellos, que salieron a por todas, ilusionados y entregados, con el carisma de sus componentes impregnando el recinto. La presencia de Patxi, Toño y Felix en el frente del escenario engancha con su sola complicidad. A estos miembros originales se une ahora el batería Andoni Regueiro, el cual encaja a la perfección en la banda, no solo por su nivel, sino por la personalidad que transmite.

El último trabajo del grupo rescata algunos temas de su pasado no muy conocidos, como los de su primera maqueta o los temas del single negro, junto a algunos temas nuevos. Pensé que la actuación giraría más en torno ello, o a su última obra completa de nuevas piezas “Solo Para Ti”, cuyo telón presidía el escenario. Sin embargo, con guiños a esos álbumes más recientes, el grupo optó por un grueso del repertorio dedicado a sus grandes clásicos.

Entraron de cara con “Todo Por El Suelo”, su tema más gamberro que daría paso a himnos de rebeldía, reivindicación y realidad, de la de hace más de veinte años y de la de ahora. Ahí queda ese directo “Y Otra Vez” o ese “Futuro Para Mi”, en los que la emoción se disparaba con una banda clavando los temas, con esos coros tan únicos y esa voz solista tan especial. Todo fueron temas del empaque y la historia de “Acosándome”, parece mentira que se escribiera hace tanto tiempo, “Volveré A Salir”, como auténtico himno, “Absurdo”, apunto de hacer salir alguna lágrima a los que recordamos la lacra que fue la heroína en los 80… La balada por excelencia “A Tu Lado”, encontró competencia con “Otra Noche Más”, siempre emocionando con el feeling tan especial que tiene el grupo. Lo más curioso fue verles interpretar uno de sus temas de aquellos primerísimos tiempos donde la banda comenzó cantando en euskera. Pudimos comprobar como “Egun Batean” cambia el idioma, pero mantiene las constantes sensaciones del buen hacer del grupo, con unas señas hoy por hoy en perfecto estado.

El tiempo no ha resquebrajado lo que suponen temas como “Buscando Mirando”, “Devorando Las Calles” o “Muros”, tan vigentes como siempre y con la misma chispa que si estuvieran recién editados. Aunque echamos de menos algunas de sus canciones y a la banda se le hiciera corto el tiempo de estancia sobre las tablas, el set list fue de lo más completo, como podéis comprobar. No faltó el festivo “Noche De Ronda”, que provoca buena respuesta siempre, un rescate meritorio de “Solo Para Ti” con “Héroe”, ni un “Sangre De Barrio” de esos comienzos en los que el grupo ya reflejaba una identidad muy bien representada en temas como este. Así que por el estado mostrado por la banda y por los temas elegidos todos satisfechos. Además de algún clásico más, alguno de sus nuevos temas incluidos en “¡Lo Que Faltaba!” hubiera sido la perfección absoluta, porque el estado de forma mostrado por el grupo da para ver a los mejores Leize posibles en la actualidad, cerquita de los 30 años de historia.

Los que ya han llegado a esa mágica cifra son Obús, apunto de celebrarlo con la grabación de CD y DVD en directo. Pueden ir seguros de que llegan a esa cita de La Riviera, apenas a un par de semanas vista de esta actuación que aquí os contamos, en un momento espectacular. Aún faltando dos de los miembros originales de la banda, sigue siendo inenarrable la que pueden montar estos tipos en un escenario. Paco Laguna traspira ilusión en cada uno de sus riffs y de sus solos de guitarra y Fortu merece un capítulo aparte, por su capacidad innata como frontman, porque físicamente está hecho un chaval y porque sigue poseyendo ese deseo de subirse a las tablas y ganarse el calor del público. Primero me quito el sombrero y ahora sigo con lo que vivimos en la Rockstar Live.

Es inevitable vivir cierta nostalgia entre un público con una media de edad de 40 para arriba, aunque también con nuevas generaciones. Tanto es así que fueron varios los casos de niños con sus padres en primera fila, mostrando lo imperecedero del legado de las grandes bandas. Sin embargo, hay que destacar lo que supone para abrir ese “Corre Mamón”, que viene a demostrar la valía del último trabajo del grupo. No en vano, posteriormente “Cállate” volvería a ser un puñetazo que ante la respuesta de la gente no se podría distinguir de los clásicos. No se si cada uno le destinaría el mensaje a alguien especial para cantar con más odio ese sencillo y contundente estribillo de tan solo una palabra, pero Fortu se encargó de dedicar para el Papa el dedo corazón levantado antes de iniciar ese “Que Te Jodan”, que en diez años desde su aparición en “Desde El Fondo Del Abismo” se ha convertido en un clásico con tantos galones como muchos de los que la banda facturara en los 80.

Hay temas que por una y mil veces que hayas visto a la banda siguen siendo espectaculares, nunca fallan en directo, y cada vez que termina la actuación no sabes cual te ha gustado más. Me refiero a “La Raya”, con Fortu recorriendo el escenario de lado a lado con una chulería que lo hace aún más grande sobre las tablas pasándose la mano por la nariz, representando el significado de la letra de tan impagable clásico; “Autopista”, donde no podía faltar ante la respuesta del público un genuino se me pone morcillona, en otro clásico de clásicos; “El Que Más”, favorito de todos sus seguidores, como lo es “Juego Sucio”, con Fortu cantando sobre la batería con gesto solemne; “Te Visitará La Muerte”, con esa potencia especial y el vocalista haciendo la señal de la cruz en cada estribillo; “Pesadilla Nuclear”, simplemente aplastante siempre; y “Yo Solo Lo Hago En Mi Moto”, que por muchas veces que la hayas disfrutado en vivo no deja de meterte ese aire entre macarra y vacilón. Todos estos, por si hubiera algún despistado, son clásicos del heavy metal con peso específico que en directo causan siempre una sensación brutal. En esta ocasión no fue menos.

Luego hay que dedicar un apartado especial para canciones que más que clásicos han pasado la barrera del bien y del mal hace muchos años. No cabe duda de que “Dinero, Dinero” es un himno que atruena en las gargantas de todos los presentes en ese nunca podrás cambiar que deja tambaleándose todo recinto que se precie. Si ese es un himno qué decir de “Vamos Muy Bien”, con Fortu repartiendo licor en las primeras filas, provocando una fiesta total. Como también lo sigue haciendo “Preparate”, que  transciende incluso la historia del heavy metal para llegar a considerarlo uno de los emblemas de la música en general. Si alguien que ya anduviera por ahí en los 80 no lo conoce, sea o no seguidor de nuestra música, que me cuente en qué cueva estaba escondido. Estos marcan los momentos más festivos del concierto después de haber repartido heavy metal a diestro y siniestro con esa otra buena tanda de clásicos atrás mencionada.

Con todo esto ya tienen unas cuantas bazas seguras, a lo que hay que sumar la forma en la que se muestra el grupo, resaltando el protagonismo de un Fortu que buscó a las chicas para cantarles ese “Dame Amor”, que se convirtió por ello en otro momentazo de los que tuvo la noche. Así hasta 18, que fueron los temas que interpretaron. Como suele ocurrir últimamente, alargaron el inicio de “Esta Ronda La Paga Obús” con las presentaciones, en las que termina el vocalista haciendo el pino tras presentar a toda su banda, con espectacular solo de batería de Carlos Mirat, quien se ayuda de sus compañeros para colocarse frente al escenario con tan solo un par de tambores con Paco y Fortu golpeando el suelo con dos cilindros de madera y Fernando Montesinos haciéndose cargo de la batería estándar. Todo ello nos lleva a la invitación del público a subir al escenario. Primero las chicas, con las que Fortu hace un poco de show, y luego un puñado de chicos para cantar ese tema que nos invita a ir a la barra, aunque como diría Fortu: esta ronda la pagas tú. Desde luego, en un concierto de Obús hay motivos para celebrar la fiesta que montan con inigualables himnos de heavy metal a los que le aplican una actitud y una capacidad sobre las tablas que explican por qué desde siempre se han comido en vivo a bandas supuestamente con más calidad. Visto lo visto, además de por conmemorar sus 30 años, el próximo lanzamiento en directo será un momento adecuado para plasmar la forma en la que Obús se encuentra en estos momentos.

Texto: ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

Fotos: MARI JOSE MARTIN (mari@lamiradanegra.es)