CRÓNICA: ICED EARTH + WHITE WIZZARD + FURY U.K.

ICED EARTH + WHITE WIZZARD + FURY U.K.

12 – 11 – 11

Barakaldo (Rockstar Live)

El Sábado 12 me disponía a vivir una inolvidable noche de Heavy Metal del más clásico. Primero con un estandarte de la escena como Iced Earth; pero no solo eso, ya que venían secundados por unos apetecibles White Wizzard. El último en discordia eran los Fury U.K., unos desconocidos para un ignorante como yo. Por ellos comenzamos.

 

Tres eran tres, los integrantes de Fury U.K. Comenzando por un baterista que demuestra lo grande que se puede ser con cuatro bombos escasos y otros tantos platos. Si de presencia hablamos, pocos puede haber como su bajista, con unos auténticos dedos locos que daban un ritmo diabólico a los temas. Pero lo más impresionante era la voz y guitarra, un verdadero portento sobre todo como hacha. MENUDA MAQUINA, UN AUTENTICO GUITAR HERO. Fueron solo siete temas de una descarga brutal, donde predominaba un thrash melçodico, muy al estilo de Megadeth con unos solos inolvidables. En verdad sorprendieron a propios y estraños y…si añadimos que después del concierto firmaron discos, sacaron fotos con quien quiso y (es más) repartieron pasquines a la salida del concierto entenderemos la buena impresión dejada en la sala. En mi persona al menos, han ganado un fan y solo espero que esta no sea su última visita.

 

Después de un pequeño descanso y una buena cerveza comenzaron los White Wizzard, ya unos reconocidos en el difícil mundo del metal. Su entrada fue tremenda, su descarga brutal y casi sin descanso. Cabe destacar a su cantante Cory Nagatochi, un portento de voz entregada con unos agudos magníficos. En su contra matizo que al final de la gala se le notaba ligeramente cansado y eso hizo algo de mella en su tono de voz. El resto de la banda se comportó de un modo talentoso y dando un claro ejemplo de la categoría y experiencia que atesoran. Su estilo es muy clásico con unos toques que recuerdan a los más rítmicos Maiden, (sobre todo su bajista). 35 minutos muy interesantes, con mucho talento, donde el sonido no fue lo mejor. Aún así el escaso público lo agradeció y se entregó con fervor.

Quedaba el plato fuerte y las sensaciones no podían ser mejores. Ahí estaban, a escasos cuatro metros, historia viva del Heavy Metal, Iced Earth. Comenzaron fuerte con la canción que da titulo al nuevo disco “Dystopia”, futuro clásico que fue aclamado por las 400 personas escasas que se dieron cita. Sin perder tiempo enlazaron el Angels “Holocaust” y “Slave to the Dark”. La gente se derretía y no solo por el calor reinante. Con su cuarto tema volvieron al último disco con el titulo de V, la canción engancha al igual que el cd. Volvieron a incluir tres clásicos: “Stand Alone”, “When the nigth falls” y, la que no podía faltar, “Damien”. Aquí la comunión público-banda se puede decir que fue total y no remitió hasta el último momento. Retornaron de nuevo al último disco (interpretaron cinco temas) con “Dark City”. Luego pusieron la sala patas arriba con la trallera “The Last Laugthy” y “Atehm”, para mi la mejor canción del “Dystopia”. Con una sudada indecente y una preocupante ronquera comenzó el tramo final. Primero un aclamado “Declaration Day”, con la sombra de Ripper Owens planeando por la Rockstar y finalizando antes de los bises “Days of Rage”, la última interpretación del “Dystopia”, y para mi la mas floja del disco, con un toque moderno que no le queda nada bien a la banda.

 

Descanso y … los dos bises bien calculados. ¿Que se puede decir del “Dante´s Inferno”?. Pues eso, los sentimientos a flor de piel, y por último “Iced Earth” (como no), un gran colofón para un concierto más que correcto. Brent Smedley, Freddie Vidales y Tory Seele rindieron a un gran nivel, con entrega total y sin fallos. Para Jon Schafer los años no pasan y la lucha, entrega y carisma con su gente es digno de mención. No me olvido de Stu Block, voz de Into Eternity. Se amolda como un guante al nivel  que se supone a Iced Earth, entregado como el que más. En su contra hay que reseñar un raro eco que ayudaba en los exigentes y numerosos agudos.

 

Una gran noche en resumen, quiero dar las gracias a Antonio y Mari Jose por dejar que haga esta crónica y de un modo muy especial al Heavy Metal, incomprendido por ignorantes y amado por gente comprometida y viva.

 

Texto y fotos: JESUS CORDEIRO