CRÓNICA: DISCORDANCE FEST – THE EYES + CRISIX + LINES
DISCORDANCE FEST
THE EYES + CRISIX + LINES
Bilbao (Azkena)
La gira conjunta que esta llevando a Crisix y a The Eyes por buena parte de la geografía estatal se disfrazó a su llegada a Euskal Herria de festival, bajo el nombre de Discordance Fest. Esto supuso el añadido de algún grupo más al cartel para redondear la propuesta de un par de noches de inicio muy prometedoras. Al día siguiente actuarían en Pamplona en la segunda jornada de festival junto a otras bandas emergentes tan interesantes como Allowance y Dawn Of The Maya, de las cuales ya teníamos referencias. Los que para mi eran unos perfectos desconocidos eran Lines, encargados de abrir esta noche en Bilbao.
Lines aún no han editado trabajo alguno y hoy daban el primer concierto de su carrera. Por ello se excusaron ante los posibles fallos, que los hubo. Sin embargo, la impresión que me dejó esta banda el día en que la descubrí es altamente positiva. Su estilo es denso, complejo, personal, marcado por bandas novedosas en una línea a medio camino entre el grunge y el metal. Capaces de alcanzar la agresividad más rabiosa y una relajación nada tranquila. Sus ritmos cambiantes, sus contrastes y sus estructuras elaboradas me cautivaron en unos sonidos no del todo ligados a la caña de sus compañeros de cartel. Impresionante me pareció la labor vocal y muy meritorio el trabajo compositivo de estos temas. Si esta fue solo una noche de debut pudieron irse contentos para casa. Esperemos seguir teniendo noticias suyas.
Tras ellos el estilo cambiaba de forma abrupta con el thrash de vieja escuela a cargo de unos jóvenes catalanes llamados Crisix. Estos chicos están revolucionando los escenarios que pisan, haciendo que el más escéptico con el revival del estilo que representan pueda disfrutar de unas actuaciones que no dejan indiferente. Plagadas de anécdotas arriba y abajo del escenario, muy entretenidas y arrolladoras.
En contra de la imagen thrash de gesto cabreado y cara de malotes, estos chicos salen ahí a divertirse con una sonrisa de oreja a oreja en el caso de los 5 componentes. No por ello hacen menos ruido. De hecho, fue salir al escenario y pusieron la sala patas arriba solo arremeter con “Dead By The Fisful Of Violence”. Un pogo de lo más bestial comenzó para no parar hasta el final de la descarga. Por eso digo que también la parte de abajo del escenario está plagado de anécdotas, ya que entre encontronazos y empujones pasó de todo en esas primeras filas. Como, por ejemplo, la dificultad de hacerle a la banda una buena foto, para lo que hay que jugarse el tipo y el equipo.
El ritmo frenético de “Internal Pollution”, “Flesh Collector Machine” y “Spawn” nos mostraban a una banda tremendamente rodada. El rostro de niños traviesos no concuerda con las tablas que el grupo presenta ahí arriba, enganchando al respetable con un carisma innato, encarnado en Juli como vocalista, gesticulante y comunicador, pero también en la química que se respira entre los miembros del quinteto. Tanto es así, que puedan cambiar los papales para interpretar un par de versiones sin que la maquinaria deje de funcionar. Cada uno cambia de instrumento dejando el puesto de cantante a Busi para interpretarnos el “El Hit The Lights” de Metallica y el “Antisocial” de Anthrax, con respuesta muy entusiasta de un público en el bolsillo.
Aprovechando el tono festivo que tomaba la actuación empezaron con los ritmos bailables de “Brutal Cadget”, cerrando el tema con la anécdota de las maracas que, de nuevo a la voz, Juli se saca sorpresivamente de debajo del chaleco para finiquitar el tema igual que en el disco. “The Last Monkey” sacó el lado más animal de la banda, con un vocalista nuevamente metido en el papel representativo que le correspondía al tema. Tras este comienzan a anunciar su despedida cuando dos tipos encapuchados atrapan a Juli y los sientan en una silla eléctrica. Era la forma de iniciar un “Electric Possession” que me parece su tema más redondo en su primer y único trabajo editado hasta la fecha y que también en directo tiene un peso específico en la parte final de la descarga. Aparte de este toque visual Crisix realiza un wall of dath rebautizado a futbol of death. Esto es, la sala se divide en dos partes y en medio el vocalista coloca un balón que, por fortuna para nuestra integridad, no pasaba de ser un globo. Se trata de que cuando den la orden los asistentes luchen por ser los primeros en patearlo. Impresionante la que se montó. En una sala con algo más de un centenar de almas, sin ser un recinto demasiado grande, vivimos pogos de los más brutales que uno recuerda. Y para añadir más cera nos quedaba el grito de guerra ULTRA FUCKING THRASH!!!!!. En ese “Ultra Thrash” vivimos una batalla de la que seguro que más de uno aún conserva hoy alguna secuela física. Solo ver la imagen de la banda en el escenario era síntoma de la juerga que se estaba montando a sus pies al más puro estilo thrash metal de vieja escuela. Entre toda esa tunda de mamporros solo reinó el buen rollo con el que Crisix conquistaron territorio vizcaíno.
Más le costó a The Eyes conectar con la audiencia. Se nota que hoy hay un público ávido por el resurgir del thrash metal y que el estilo de estos otros, más tendente al death melódico y el metalcore, está en parte retrocediendo o tal vez muchos de los que hubieran estado aquí se decantaran por unos S.A. que actuaban esta misma noche en Barakaldo. Pero The Eyes no es una banda más en este estilo, es una banda impresionante que te estampa en la cara como un cañonazo cada uno de estos temas basados en el sentimiento más crudo. En cualquier caso, lo bueno que tuvo el inicio más apático de la concurrencia fue que tuvimos que ver a un grupo ganándose la respuesta a base de sudor. Ni mucho menos The Eyes se amilanaron, sino que se pusieron manos a la obra para hacer temblar el recinto y ponernos así a todos en movimiento, por as buenas o por las malas.
Tras arremeter con temas de su tercera obra como “Redemption” y “Commitment” comprobamos el buen estado de la estructura de la sala Azkena, ya que a las sacudidas de los anteriores hubo que sumar el inicio demoledor de estos. Para mayor demostración Jordi se colgó de la barra que sustenta la parte delantera del escenario, intentando provocar la reacción de un público que aún se resistía. Pidió que el personal se acercara, consiguiendo poco a poco un mayor movimiento. La actitud del grupo incitaba a ello, totalmente lanzados a por nosotros con esa imagen de Wero constantemente elevando su guitarra por encima del hombro. Más al frente del escenario Jordi estaba cada vez más cerca del público, hasta que terminó por colocarse en las escaleras, llegando a coger a alguno de la pechera para terminar por sentir de lleno el calor del respetable.
La banda venía a presentarnos su recomendable tercer trabajo “Hold Your Axes, Rip Their Guns”, pero no dejaron de lado algunos recuerdos a anteriores pasos, atronando al mismo nivel en directo que las nuevas piezas. Hablo en concreto de “Above The Real Pain”, que debió retumbar por toda la ciudad. Ante esta entrega la gente fue dejándose atrapar hasta que en “Marea Negra” pudimos ver unos auténticos pogos, no tan bestiales como los anteriores, pero sintomáticos de que ante un exigente público The Eyes se estaban llevando el gato al agua. En caso necesario el vocalista se metía en el meollo para que aquello no parara hasta el final, aunque en una de esas ocasiones perdiera el micro por el camino.
Si la actitud de la banda fue encomiable, en el aspecto musical no hay tacha ante unos músicos compenetrados que saben como sacar el sonido más compacto y potente. El trabajo de voces resultó espectacular y disfrutar de los temas elegidos para grabar video clip de su último disco, aparte de provocar temblores de tierra, es una autentica gozada. Me refiero a “Wake Up Steel” y de “Die To Rise”, consecutivamente interpretados antes de finalizar con “Crucified Lie” una descarga donde habían convencido a los presentes, reticentes en principio. Son las victorias difíciles las que más se saborean y ellos supieron batirse el cobre para dejar una gran sensación.
Texto: ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)
Fotos: MARI JOSE MARTIN (mari@lamiradanegra.es)
