AZKENA ROCK FESTIVAL

23, 24 y 25 de junio

Vitoriza – Gasteiz (Mendizabala)

Un nuevo récord de asistencia y un nuevo éxito para el festival más “eclécticamente rockero” de Europa. El décimo aniversario se celebró por todo lo alto con nombres de primerísima fila, volviendo a demostrar un año más, que en el ARF la calidad no está reñida con el éxito, y que no es necesario elaborar un cartel de altos vuelos para conseguir unanimidad entre asistencia de público y calidad musical.

CARLOS GARCIA AZPIAZU

 

JUEVES 23 DE JUNIO:

BLACK COUNTRY COMMUNION: 19:30 (Solomon Burke)

O lo que es lo mismo: Joe Bonamassa, Jason Bonham, Derek Sherinian y Glenn Hughes. Cuatro principiantes, vamos…

BLACK COUNTRY COMMUNION - CARLOS GARCIA AZPIAZU

Ante semejante ristra de nombres, poco se puede añadir que no podáis imaginar: rock con pelotas y Hughes acaparando el peso de la actuación (impresionante el Burn de Deep Purple) descargando el poderoso disco que han publicado recientemente (tan bueno como el anterior) y que por lo visto en el escenario, tienen cuerda para rato.

BLACK COUNTRY COMMUNION - CARLOS GARCIA AZPIAZU

 

THE CULT: 20:45 (Solomon Burke)

The Cult es un grupo que necesita muy poco para mover a todo el respetable. Si, además, cuanta con una nutrida legión de seguidores que guardan sus himnos a fuego en el corazón, que en este festival aunaba al más afín al hard rock y al rockerío más alternativo propio del Azkena; con lo que se comprende que siendo aún de día pocos de los asistentes dejarán de estar frente al escenario principal a las 20:45.  Ante esa cantidad de espectadores la banda de Ian Astbury y Billy Duffy no tardó en conectar con ellos. Comenzaron con “Fire Woman”, pero fue con el clásico “Rain” con el que ya pudimos ver palmas desde la parte más próxima al escenario hasta la mesa de sonido. Pocos de los artistas podrán decir que recibieron una respuesta tan unitaria y que la gente se implicara tanto en la actuación. Sus temas se prestan para ello, más cuando el set list viene plagado de clásicos como “Sweet Soul Sister”, “Phoenix”, “Lil´ Devil”, “Wild Flower” o “She Sells Sanctuary”, que los hayamos escuchado una y mil veces es lo que la gente más agradece en estos festivales al aire libre. Ya habrá tiempo para presentar su inminente nuevo lanzamiento, de lo cual nos dieron un avance aquí los británicos, en una próxima gira donde tampoco se van a olvidar de rescatar muchos de los temas que tocaron en esta actuación. Sin embargo, lejos de ser temas de un pasado que quedó atrás, se demostró que su efectividad en vivo a día de hoy es tanto o más alta que siempre. Como anécdota para los aficionados a chascarrillos, hago referencia al estado físico de un Ian Astbury ciertamente orondo, más que cuando le vimos hace un año en Barakaldo. Sin embargo, en este ambiente festivo estuvo bastante comunicativo con sus seguidores e incluso bromista. El sonido no fue del todo potente, no lo sería en todo el día, pero quien se dejó llevar por estas canciones y por la reacción unitaria del público pudo disfrutar de una de las actuaciones más concurridas de todo el festival enlazando en día con la noche.

THE CULT - CARLOS GARCIA AZPIAZU
THE CULT - CARLOS GARCIA AZPIAZU

 

ROB ZOMBIE: 22:15 (Solomon Burke)

Lo que a priori parecía ser el nombre menos atrayente de la recta final del primer día del Festival, se convirtió, con ese espectáculo mezcla de circo, Halloween y monstruos clásicos de cine de terror (no en vano, Boris Karloff y Lon Chaney junto con King Kong presidieron el escenario durante todo el show) en la sorpresa de la noche; no sólo por su increíble energía (Zombie no para de hacer headbanging y correr por el escenario ni un solo segundo) sino también por la calidad de la banda (Ginger Fish reventando la batería y John 5 haciendo lo propio con la guitarra, literalmente) y una sabia elaboración del setlist. Dragula, Superbeast, Living Dead Girl… sin duda todos los grandes éxitos que han hecho del cantante una superestrella en su país.

ROB ZOMBIE - CARLOS GARCIA AZPIAZU

Dos concesiones hubo a su anterior banda, para regocijo de todos aquellos que nunca pudimos estar en un concierto de White Zombie: Devilman y More Human Than Human, las dos de esa obra maestra que es Astro Creep 2000 y que sonaron tan brutas como si hubieran sido compuestas ayer y no hace ya quince años.

ROB ZOMBIE - CARLOS GARCIA AZPIAZU
ROB ZOMBIE - CARLOS GARCIA AZPIAZU

 

OZZY OSBOURNE: 23:45 (Solomon Burke)

Los más críticos con el madman deben saber que dos días después suspendió en Graspop por laringitis. Es cierto que la actuación de Ozzy distó mucho de ser perfecta, pero no es menos cierto que su banda seguramente fue la mejor de todo el festival, con músicos jóvenes donde Gus G se erigió en el guitar hero de la categoría que todos le conocemos, y tampoco miento afirmando que si algún artista dio todo para complacer a su público en esta edición del festival ese fue el vocalista original de Black Sabbath. El tamaño de la leyenda que teníamos en frente es tan grande que solo me salen palabras de alabanza y muy pocos reproches que achacarle. Lo único que puedo es lamentar no haber visto a un Ozzy con sus 63 años, es cierto, pero en mejores condiciones de salud.

OZZY OSBOURNE - CARLOS GARCIA AZPIAZU

No se si por esos problemas de garganta o si será habitual en sus conciertos, era constante la salida de uno de los pipas con una taza de café para el vocalista. Aún así, durante los dos primeros, “I Don´t K Now y “Suicide Solution”, la cosa pintaba muy bien, ya que vimos a Ozzy totalmente activo, moviéndose de un lado al otro con esa mirada perdida, algo que viene siendo habitual desde su época de los 80 y que nos hacía vernos ante el Ozzy más genuino. Y vocalmente estos temas estuvieron a la altura. La cosa se torció, después de un “Mr. Crowley” que seguía apuntando hacia arriba, con “Bark At The Moon”, un tema que debería haber sido memorable, pero en el que tras mojarse el mismo con espuma  y regar a las primeras filas con esa manguera colocada entre los monitores comenzó a tener problemas de garganta. Hubo partes que no pudo cantar y comenzó a apoyarse en el público con una tos contenida que le impedía cantar en condiciones normales.

OZZY OSBOURNE - CARLOS GARCIA AZPIAZU

Aún así, no se rindió y nos dejo un “Faires Wear Boots” sorpresivo en el que su banda le arropó muy bien. Descansó durante la parte instrumental en la que Gus G se lució, como también lo hizo a la batería un portento llamado Tommy Clufetos. Tras eso Ozzy intentó retomar el pulso con temas como “Iron Man”, en el que no le faltó el aliento y el cariño del público, pero volvió a sufrir en temas que todos esperábamos como “Crazy Train”, si bien no fue impedimento para que los incondicionales disfrutáramos. Le vino bien cantar algo más relajado como “Mama, I´m Coming Home” antes de terminar con ese “Paranoid” en el que estoy seguro que, de encontrarse bien, Ozzy nos hubiera inundado de espuma. No hizo falta para que a petición del vocalista todo el Azkena Rock enloqueciera y reconociera a ese hombre que había sido capaz de ponerse de rodillas y reverenciarnos durante la actuación, devolviendo el apoyo que recibió, también con su habitual I love you all que se perdía entre los oes de agradecimiento por su visita. Él no se dejó nada dentro, muy consciente de su actuación pidió disculpas por su estado vocal y dejó claro que puede hacerlo mejor. 

OZZY OSBOURNE - CARLOS GARCIA AZPIAZU

 

KYUSS LIVES!: 01:30 (Solomon Burke)

Mucho me duele tener que hablar mal de esta banda, porque me han acompañado (y me acompañarán) desde que los conocí en un ya lejano 1993 (por aquel entonces no existía ni la palabra stoner) y …And the Circus Leaves Town es uno de los discos que más he escuchado en la vida.

Al contrario que otros, nunca vi con malos ojos esta “reunión”: tan solo faltaba Josh Homme, así que estamos hablando del 75% de Kyuss (Bjork, Olivieri, y sobre todo, John García), por lo que tenía una fe casi ciega en que lo que me iba a encontrar iba a ser un buen desquite para todos los que nunca fuimos capaces de conseguir ver a Kyuss en su época de máximo esplendor.

KYUSS LIVES! - CARLOS GARCIA AZPIAZU

El primer shock vino cuando me encontré con un sonido de guitarra saturadísimo que en nada se parecía al sonido orgánico de Homme, sino más bien a un intento de un grupo amateur de sonar como sus ídolos de una manera artificial, con un resultado a medio camino entre la risa y el llanto.

La voz de John Garcia también sonaba en primer plano, haciendo la experiencia aún más extraña si cabe: comprendo que sea el líder del grupo y se le tenga que ver y escuchar, pero para eso ya tiene sus propios proyectos. Creo que hubiese sido más acertado intentar respetar al máximo el sonido del grupo y no “reinventarlo”.

KYUSS LIVES! - CARLOS GARCIA AZPIAZU

Sé que hubo gente que disfrutó del show, pero no fue mi caso: después de One Inch Man, aquel remedo de lo que antaño fue una de las bandas más sólidas de los 90’s, se disolvió en mi mente y decidí no quedarme ni un solo segundo más.

 

 

VIERNES 24 DE JUNIO:

REVEREND HORTON HEAT: 18:40 (Solomon Burke)

Una de las grandes leyendas del psychobilly (quizá hubiera encajado más el sábado, por afinidad) que volvió a demostrar lo que hace tiempo que ya no tiene que hacer: que pocos rivales tiene en el género  y que es un auténtico peso pesado.

REVEREND HORTON HEAT - CARLOS GARCIA AZPIAZU

Si bien tuvo algún problema de sonido al principio (ajeno a la banda), no tardó mucho en solventarse y le permitió repasar toda su discografía tocando un tema de cada disco, para posteriormente convertirse en un jukebox humano y tocar cualquier tema que el público le pidiese (ahí pudimos escuchar su hit Psychobilly Freak-Out)

REVEREND HORTON HEAT - CARLOS GARCIA AZPIAZU

 

CHEAP TRICK: 20:40 (Solomon Burke)

Con todos los respetos que me merece una banda tan longeva como Cheap Trick, he de decir que su concierto solo me transmitió algo de energía en su fase inicial. Eso sí, ellos no perdieron el tiempo y descargaron un buen número de temas, demasiadas veces relajados, y hay que reconocer que el estado de forma de Robin Zander, como vocalista, y de Rick Nielsen como guitarrista quedó fuera de toda duda. Pero fue poca le energía que transmitieron, siendo temas tan conocidos como “I Want To Want Me” o “The Flame” temas que en este final de tarde se hacían demasiado poperos para animar un festival de rock. He de decir que puede ser una apreciación muy subjetiva, porque la respuesta del público fue más que digna. Yo no les resto nada como banda ni como músicos que interpretaron bien sus canciones, pero aún consciente de su estilo, pensé que en directo habría más fuerza.

CHEAP TRICK - CARLOS GARCIA AZPIAZU
CHEAP TRICK - CARLOS GARCIA AZPIAZU

 

BAD BRAINS: 22:00 (Ben Keith)

El año pasado ya estaban anunciados y fueron sustituidos por UK Subs a última hora, así que era justo que nos visitasen unos de los padres del sonido “hardcore megaloco”.

BAD BRAINS – CARLOS GARCIA AZPIAZU

Cada vez que afrontaban las canciones más burras, la ejecución era impecable (aunque creo que un poco más de actitud no hubiera sobrado: eso de cantar tus propias canciones con las manos en los bolsillos…) y quedó demostrado con creces con los pogos que se montaron en las primeras filas. El problema venía cuando se marcaban algunos reggae que contrastaban (para mal) con la energía que se vivía después de cinco o seis canciones hardcore. Cortar de raíz la energía que se crea para cantar sobre “el amor y la amistad” a ritmo de reggae durante diez minutos, provoca que la gente ansiosa por escuchar los clásicos más potentes abandone en estampida.

BAD BRAINS - CARLOS GARCIA AZPIAZU

 

DIRTY YORK: 22:20 (Monster)

Los que buscábamos auténtico rock & roll saciamos nuestras ansias en el escenario Monster. Por allí pasaron algunas de las bandas más cañeras del festival, con mucho predominio de los sonidos setenteros. Puede que ninguno tuviera un nombre de relevancia, pero la mayoría de las actuaciones fueron sorprendentes y muy valoradas por un público que no dejó de lado este tercer escenario del festival que a las 22:20 de este segundo día de su décima edición vio como dos bandas actuaban a la vez en dos escenarios distintos por primera vez en la historia del festival. Mientras que Bad Brains mezclaban reggae y hardcore en el escenario Ben Keith, en el Monster Dirty York demostraron ser una banda de personalidad dentro de los sonidos setenteros, con una voz desgarrada al frente y con una actitud que agradecieron los asistentes.

DIRTY YORK - © MUSICSNAPPER

 

PRIMUS: 23:20 (Solomon Burke)

Les Claypool es un marciano. Su talento musical es infinito (al igual que el de sus dos compañeros, ojo) y supongo que dentro de su mente tiene algún sentido el intrincado laberinto de estructuras y sonidos imposibles que crea, pero hay que reconocer que no lo pone fácil para el público estándar. No había más que ver la cara de la gente que asistía al concierto… tan divertida como la música que sonaba…

PRIMUS - CARLOS GARCIA AZPIAZU

Partiendo de la base de que My Name is Mud es lo más cercano que han tenido a un hit (increíble la interpretación en directo) os podéis hacer una idea de por dónde fueron los tiros en el concierto: solos interminables de esa manera irreal que tiene de tocar el bajo (¡incluso tocó el violencello!), máscaras de animales mientras cantaba historias que harían gemir de placer al mismísimo Tom Waits, cambios de ritmos de una densidad y lentitud que exasperaron a los que no estaban familiarizados con su música (pero que disfrutamos todos aquellos que nos parece una banda básica)… Un gran concierto, muy difícil de catalogar en lo musical, pero fácilmente distinguible de la aburrida fórmula actual de virtuosismo sobre la misma base oída una y mil veces.

PRIMUS - CARLOS GARCIA AZPIAZU

 

RIVAL SONS: 23:45 (Monster)

Si sus predecesores en este escenario dejaron buen sabor, se puede catalogar de triunfo lo que hizo este joven cuarteto californiano, liderado por un vocalista de nombre Jay Buchanan que pareciera la reencarnación de Jim Morrison físicamente, pero que se acopla a una banda con un sonido entre el blues y el rock que nos recordó mucho a Led Zeppelin. Nos atraparon en sus redes y terminaron por hacer alucinar a la gente congregada en torno a este escenario más destinado a curiosos. Era difícil que nadie se volcara con un grupo apenas conocido para todos, pero nos contagiaron su fuerza y acabamos rindiéndonos ante un concierto que, como mandan los cánones, fue de menos a más. Primero conectaron con la gente, luego nos deleitaron con su música y acabaron en éxtasis rockero. Los que buscaban la sorpresa la encontraron en un grupo como Rival Sons, auténticos dominadores de las tablas que trajeron al Azkena el genuino sabor a rock de los 70.

RIVAL SONS - © MUSICSNAPPER
RIVAL SONS - © MUSICSNAPPER

 

QUEENS OF THE STONE AGE: 00:50 (Solomon Burke)

Ojalá todas las bandas que llenan estadios en la actualidad estuvieran en la misma forma y nivel compositivo que Queens of the Stone Age. Homme y los suyos pertenecen a esa estirpe de músicos que se prodiga poco: manteniendo su actitud y sin ceder un ápice, consigue que todos le den la razón  tarde o temprano (porque la tenía) y ahí está, encabezando por segundo año el Azkena Rock Festival, y ofreciendo otra vez un concierto a la altura del ya mítico que dieron en 2005.

QUEENS OF THE STONE AGE - CARLOS GARCIA AZPIAZU

Misma energía, misma furia, mismas ganas y un sonido megalítico para unos clásicos en vida… Y si no lo creéis, a su setlist me remito: No One Knows, Little Sister, Go With the Flow, Mexicola…

Pocos conjuntos actuales con un nivel de proyección tan masivo pueden hacerles sombra.

QUEENS OF THE STONE AGE - CARLOS GARCIA AZPIAZU

 

SABADO 25 DE JUNIO:

NEW BOMB TURKS: 17:45 (Ben Keith)

Velocidad, fuerza y agresividad a partes iguales de estos tarados, que todavía se estarán preguntando qué pintaban ellos el día más “blando” del Azkena.

Se encargaron de poner la carpa patas arriba (y eso que la hora no acompañaba mucho) y se entregaron hasta la extenuación ante un público que participó y arengó a la banda como si fuese el último concierto que iban a dar en su vida.

 

AVETT BROTHERS: 18:40 (Slomon Burke)

Avett Brothers son un grupo atípico. Atípico porque tienen ese “toque” que los distingue, a pesar de su juventud, de las demás bandas de su generación y estilo, haciéndoles acreedores de un lugar reservado en el Olimpo de los más grandes desde ya.

Atípico también porque usar un banjo, un violín, un contrabajo y una guitarra acústica y mantener pendiente de cada giro vocal a una audiencia manifiestamente rockera tiene un gran mérito.

Y atípico porque una demostración de calidad como la que se vio en el escenario principal a esa hora de la tarde, demuestra que no todo está perdido en este siglo donde los mil y un sesudos críticos se encargan de repetirnos que cualquier tiempo pasado siempre fue mejor.

Será porque no se han molestado en escuchar Emotionalism o I and Love and You, porque con canciones como Murder in the City, Tin Man o Talk on Indolence un concierto sólo puede ser enorme.

 

BAND OF HORSES: 19:40 (Ben Keith)

Para quien esto escribe, la banda (junto a Avett Bothers) por la que merecía pagar la entrada y acercarse a Mendizabala.

Son una de las nuevas sensaciones del panorama indie americano, aunque etiquetar como indie a Band of Horses es como intentar englobar la música que hace Bob Dylan con la palabra folk: la lista de influencias y matices en sus canciones es infinita, y sólo hay que escuchar esa maravilla hecha disco que es Infinite Arms para darse cuenta que folk, americana, indie o incluso rock son palabras que se quedan muy cortas.

BAND OF HORSES - CARLOS GARCIA AZPIAZU

Supliendo sus carencias  técnicas con un gran derroche de sensibilidad, pasión y enormes melodías vocales (la voz de Ben Bridwell llega a alcanzar tonos realmente desgarradores para el alma) consiguieron algunos momentos de catarsis en el público, como cuando tocaron “su única canción conocida”, The Funeral, que arrancó un espontáneo clamor incluso en aquellos que desconocían por completo a la banda.

BAND OF HORSES - CARLOS GARCIA AZPIAZU

Desgranaron sus tres discos en 50 minutos que supieron a poco, y se despidieron con una impactante de Am I a Good Man que nos dejó aplaudiendo incansablemente y con la sensación de haber visto algo difícilmente superable.

 

GREGG ALLMAN: 20:45 (Solomon Burke)

Escuchar a la banda de Gregg Allman es un privilegio al que pocos oídos pueden exponerse y no tener un nuevo baremo por el que juzgar los siguientes directos que se escuchen. Por momentos llega a ser tan perfecto que parece imposible que seres humanos estén tocando de esa manera y no máquinas programadas para no hacer otra cosa en la vida.

GREGG ALMAN - CARLOS GARCIA AZPIAZU

Decidido a que le perdonásemos de una vez por todas su disco con Cher y que nos tenga completamente olvidados con su banda madre, vino a enseñarnos lo que es la clase y el buen hacer, respaldado con el discazo que es Low Country Blues, unos cuantos clásicos de blues interpretados por el señor Allman y una canción nueva, Just Another Rider, que sonaron a gloria en el escenario principal del festival.

GREGG ALMAN - CARLOS GARCIA AZPIAZU

 

THE KNOCKOUTS: 22:05 (Monster)

De nuevo el escenario Monster nos volvía a deparar una grata sorpresa a cargo de este trío que le puso a la llegada de la noche el rostro sonriente de su macarrería, a medio camino entre el punk rock y el rockabilly. La banda se llevó de calle al numeroso público congregado con temas directos, guitarreros y poderosos en su base rítmica con ese contrabajo frenético que se acoplaba a la batería para hacer volar sobre nuestras cabezas temas como “Queen Of The Underground” o “The Chimneys Of Chemnitz”. Para redondear la actuación y dejar más huella ocurrió uno de esos infortunios que finalmente lo que hacen es que recordemos el momento como algo más épico aún. Durante la interpretación de “A Lie Like In Natalie” el sonido petó del escenario para afuera, quedándose ellos con su sonido de monitores, que por cierto tenía un volumen considerable, ya que desde fuera se podía apreciar. Mientras que lo técnicos hacían gestos a la banda, estos no pararon de tocar viendo como el público arreciaba en sus palmas y en su respuesta en solidaridad con una banda que seguía dejándose el pellejo sin saber muy bien qué pasaba. Tras un minuto aproximado de tocar con el único sonido de monitores se solucionó el problema y la entrada de la banda sonando acoplada en medio del tema fue como un trueno que aún encendió más a la concurrencia, provocando una de las mayores respuestas de todo el festival en este escenario. Tiraron de alguna versión, muy bien llevadas a su sonido. “Summertime Blues” de The Who animó mucho el cotarro, mientras que “I Want You To Want Me” demostró como este tema de Chip Treak puede sonar en versión macarra. Pese a estar en el escenario de menos relevancia, el nombre de The Knockouts queda inscrito con letras de oro en esta 10ª edición del Azkena Rock Festival.

THE KNOCKOUTS - © MUSICSNAPPER
THE KNOCKOUTS - © MUSICSNAPPER

 

BRIAN SETZER’S ROCKABILLY RIOT: 23:20 (Solomon Burke)

Es conveniente aclarar que hubo dos partes bien diferenciadas en este concierto. La primera, carente completamente de energía (que no de alma), compuesta en su totalidad por clásicos interpretados por una banda con el piloto automático, y que por momentos parecía que estábamos en la fiesta de graduación de algún instituto estadounidense en vez de en un concierto de Rock.

La segunda parte, supone la llegada de Slim Jim Phantom a la batería y el cambio de contrabajista por un tipo más ligado al psychobilly, con lo que ya tenemos a dos de las tres partes de Stray Cats en el escenario y un repertorio que tira de espaldas.

BRIAN SETZER´S ROCKABILLY RIOT - CARLOS GARCIA AZPIAZU

Setzer cada vez más cómodo con esta versión de la banda y Slim Jim Phantom aporreando su caja como si le fuese la vida en ello.

Final apoteósico con Rock This Town, con tres contrabajos en el escenario, que por muy circense que resultase a simple vista (la cantidad de piruetas encima de este instrumento es digna de recibir un premio en el Circo del Sol) el sonido de tres trastos de estos tocando a toda velocidad impresiona incluso a aquellos que reniegan de este tipo de música.

BRIAN SETZER´S ROCKABILLY RIOT - CARLOS GARCIA AZPIAZU

 

THIN LIZZY: 02:25 (Solomon Burke)

Pese a lo tarde que estaba programada la actuación de Thin Lizzy, el cansancio de tres días y que fue un grupo que entró a última hora sustituyendo a Danzig, pocos quisieron perderse la actuación de la que siempre será banda de Phil Lynott. La última actuación del festival se retrasó además media hora tras una insoportable prueba de sonido sobre la marcha que hacía presagiar lo peor. Sin embargo, contradictoriamente, nadie sonó con esa fuerza en ese escenario como lo hizo la banda británica.

THIN LIZZY - CARLOS GARCIA AZPIAZU

Cuando “Are You Ready” dio el pistoletazo de salida, se nos olvidó el cabreo propiciado por la espera y disfrutamos de Thin Lizzy como enanos . Con todo en contra la banda conformada por antiguos miembros del grupo, con la aportación de Ricky Warwick a la voz y esta vez del Gun´s N Roses Richard Fortus a la guitarra, se sobrepuso para erigirse en unos auténticos monstruos del escenario.

“Waiting For An Alibi” todavía afinó más el sonido, para continuar con una ración de clásicos que nos llevó a los 14 temas. El vocalista nos recibió con un good morning que nos hacía mirar el reloj y comprobar que dadas las horas que eran “Danzing In The Moonlight” podía ser muy apropiada, siempre mágica, aunque si nos despistábamos un poco el sol podría sorprendernos. Clásicos como “Jailbreak” o “Massacre” hicieron las delicias de los más afines al rock duro, dejando que la locura la sembraran “Whisky In The Jar” y “The Boys Are Back In Town”, apropiados como pocos para este clima de fiesta que adquirió el festival hasta su último minuto. “Emeral” nos dejó esos duelos de guitarra entre Scott Gorham y Richard Fortus. Este último se lució de tal manera que nos hizo no acordarnos de Vivian Campbell. Desde luego, este puesto de guitarrista que acompañe al miembro mítico a la otra guitarra está destinado a brillantes hachas. Por otro lado, Marco Mendoza hacía su show particular lanzando púas constantemente y muy complaciente con el público. En una noche menos fría que las anteriores terminó sin camiseta. Darrel Wharton estuvo en esa ocasión desde su teclado menos protagonista que cuando le vimos en invierno en sala y Brian Downey se mantenía oculto tras su batería, pero no se nos escapa que es el único miembro original de la banda y un motor fundamental para que este grupo siga deleitándonos con unas canciones imperecederas. Warwick comenzaba con la armónica otro de los temas destacados, entre los que metería a todos los que interpretaron, pero “Cowboy Song” sería el extracto qua sacaría de este concierto como muestra de lo que se vivió. No me esperaba “Killer OnThe Loose”, que nos hacía llegar con fuerza a la recta final de actuación, con el más romántico “Rosalie” y el acento irlandés de “Black Rose”.

THIN LIZZY - CARLOS GARCIA AZPIAZU

Sabemos que en torno a esta banda hay división de opiniones, lo cual no entiendo muy bien una vez visto como en directo el grupo demuestra con todo el respeto la grandeza de este legado en el que ahora también se homenajea a la figura de Gary Moore, para el que la banda también tuvo dedicatoria esta noche. Pero de fondo sobre todo hay una figura que puede estar orgullosa de que tras 25 años de su muerte haya unos compañeros que no solo mantienen vivo su legado sino que parecen acaparar como una presencia divina el espíritu de ese bajista y vocalista de color que sigue mereciendo más reconocimiento como clave en la evolución del rock. Dos veces les hemos visto este año y en ambas se hace difícil explicar con palabras todo lo que transmiten en vivo.

CARLOS GARCIA AZPIAZU

 

Esperemos que los nombres que se anuncien para la undécima edición del Azkena sean, por lo menos, tan grandes como las de ésta última, y si no puede ser cabeza de cartel Tom Petty, seguro que para el vigésimo aniversario (¡allí estaremos!) se consigue…

Texto: FER y ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

Fotos escenarios Solomon Burke y  Ben Keith: CARLOS GARCIA AZPIAZU (www.insonoro.com)

Fotos escenario Monster: © MUSICSNAPPER (www.lasttourinternational.com)