CRÍTICA: THE RAVELING – LEVITATE
THE RAVELING
(Levitate)
9/10
Ya os hablé en esta página de la demo que esta banda vizcaína, con una parte madrileña, nos presentaba. Y os avisaba de que se estaba fraguando una maravilla. Pues aquí tenemos ya la constatación en una primera obra de un legado esperemos que muy extenso, porque nuestros sentidos lo agradecerán.
La música no solo se escucha con los oídos. Esa solo es la vía de entrada, pero tu mente, tu corazón y tu alma tienen mucho que ver en lo que sientes, en lo que percibes y en lo que eres capaz de descifrar de todo este universo de notas musicales, letras y sentimientos. Todo ese organismo lo tendrás que abrir de par en par para degustar al máximo posible una obra sin barreras estilísticas, que tampoco le pone límite a la emociones. Con lo subjetiva que es la música puede que esas sensaciones que alcances disten incluso de la propia pretensión de los músicos que nos dejan un libro abierto a la libre interpretación. Es una obra de ambigüedad controlada por las mentes pensantes detrás de “Levitate”.
El trabajo se abre con gran profundidad en el caso de “Back For More”, aunque si le das un par de escuchas percibirás una melodía que engancha. Luego es cosa tuya seguir indagando, porque son temas que no tienen fondo. Puedes seguir encontrando algo nuevo en cada escucha, dando un paso más allá en este infinito donde nunca nos sentimos perdidos, sino acogidos por estas canciones que saben cómo guiarnos una vez que dejamos de sentir que nuestros pies tocan el suelo. Si llegas a eso, no temas y disfruta.
Cuesta decir con seguridad si estamos ante una banda con influencias clásicas o modernas. O tal vez sea ambas a la vez. “Tricks” es un ejemplo de cómo un tema puede resultar tan actual como añejo, a la vez que estilísticamente puede encajar en muy diferentes ambientes. Un ejemplo de lo camaleónicos que pueden resultar The Raveling.
Así mismo es difícil discernir influencias y probablemente sería ilimitada la lista, pero desde mi punto de vista hay una sensibilidad y libertad compositiva de mitos como Pink Floyd, el tacto en las voces de unos The Beatles, la imaginación de bandas que marcan para toda la vida como Led Zeppelin, un barniz noventero pero con el grunge como una etiqueta muy corta, y una profundidad hipnótica de bandas como Tool. Podría decir más, pero al fin y al cabo, lo importante es que lo que The Raveling hace llega con la propia personalidad de músicos que congenian y que hacen fluir las ideas como una sincronía natural. Exactamente igual que los ejemplos que he puesto.
Por eso el disco es fantástico de principio a fin, sin un solo recodo que haya quedado sin sembrar de esta magia. Podemos escuchar temas que ya conocíamos de la demo, como “Shed Your Skin” u “Orphan Candles”, si cabe con mayor empaque dentro de esta obra. Por el aroma cálido especial que adquiere hay que destacar “Qibla”, que nos mete en una ambientación desértica cautivadora. Aunque este adjetivo se lo podría aplicar al resto de temas. También a la intimidad de “Undressed” o de “Flashing Pictures”, cerrando con “When Forever Ends” envueltos por el manto ambiental y sensible que hace honor al título de la obra, pero siempre con una intensidad latente que te hace no desconectar ni un segundo si amas las emociones que puede hacer sentir la música. De esa grandeza que ofrece esta cultura es buen ejemplo “Levitate”.
ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)
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