CRÍTICA: SUJETO K – SUJETRÓNIKA
SUJETO K
(Sujetrónika)
8´5/10
Se la han jugado y eso de primeras me gusta. El caso es que puede que muchos puristas no soporten lo que Sujeto K ha propuesto en este disco. Sí, el título de Sujetrónika indica lo que imagináis, que el peso de la electrónica es muy grande en la obra. Hay temas que son más indicados para pistas de baile, en los que incluso las guitarras ocupan un plano discreto. De hecho, cuando comienza a sonar el primer “Trance” soy de los que se ha echado las manos a la cabeza. Qué se le va a hacer, soy rockero de pro y hay algunos aspectos que uno tiene muy inculcados. Simplemente ha sido un acto reflejo. Pero debo reconocer que el disco me empieza a gustar cuando las guitarras se colocan al lado de los sonidos prefabricados en “Dame Más”. Y si ya la cosa se vuelve cañera en el mensaje de las letras me empiezo incluso a sentir identificado. Eso ocurre cuando llegamos al ska de “Mane Chao”.
Sujeto K no dejan de fundir el rock y otros estilos dentro de esta base dance, industrial, experimental, moderna… Eso hace que partiendo de ese decorado del que han querido dotar a la obra acabe disfrutando mucho. Me tomo temas como “Pintxamelo” como un paréntesis para hacer aerobic (literal), pero no dejo de apreciar lo que ofrecen temas como “Estúpidos”, con un mensaje contundente que se vuelve un himno de estos tiempos que vivimos. Aquí reflejan una influencia del rap. Porque el disco se hace muy variado a la vez que queda envuelto bajo un manto que le da una personalidad particular. Incluso hay temas que parecen haberse adaptado al contexto de la obra, pero que mantienen una base más rockera, como son “Vicio” y “R.E.I.”, aunque con los consiguientes añadidos electrónicos. Y es que ya dejan claro el espíritu que ha poseído este trabajo en “Technologia”, pero sin dejar de lado influencias como el reggae de “Luna” y el ritmo funky con toque flamenco que se salta cualquier prejuicio en el caso de “Droguemos Al Señor”. La banda no se corta ni en lo musical ni en lo lírico. Con sus mensajes dejan en evidencia ciertas vergüenzas que muchas veces quedan al descubierto con palabras ajenas. Así utilizan algunos fragmentos de frases de gente que seguro conoceréis para lanzarlas directamente en su contra en un tema muy especial para terminar. Puro odio y rebeldía contiene “Ponte En Pie”.
Se la han jugado, pero poco hay que más valore encontrar a gente a la que no le importe lo que piensen los demás. Es la base de la sinceridad y ante todo la fidelidad a uno mismo en primer lugar. Solo eso ya sería honorable, pero es que finalmente, eliminando prejuicios, se puede valorar “Sujetrónika” como un gran disco, uno de los destacados incluso de los últimos meses. Es evidente que en primer lugar no dejará indiferente a nadie, que llamará la atención por su extravagancia, pero luego tiene un halo cautivador que nos conecta con él y nos hace alejarlo de la mediocridad o de un tipo de música que no va con nosotros. Puede que esto último sea lo que pienses en un principio si tienes muy fijados los márgenes de tus gustos, cosa que no te voy a pedir que cambies ante una obra que podría suponer un sacrilegio para más de uno. Pero la religión establecida es una de las críticas habituales del rock y romper moldes uno de sus comportamientos habituales. Afirmaciones que cumple, y de qué manera, esta obra.
ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)
INFORMACIÓN ADICIONAL:
Sello: Maldito Records
