CRÍTICA: ROBBEN FORD – BRINGING IT BACK HOME

ROBBEN FORD

(Bringing It Back Home)

8´5/10

Ha habido multitud de músicos que no han estado necesariamente ligados al mundo del rock de manera constante, y mucho menos al del heavy metal o rock duro. Por ello medios especializados como este se pueden sorprender de lo que descubren a estas alturas. En el caso que nos ocupa, hablamos de un hombre que debutó discográficamente en 1972 y que nos ha dejado múltiples discos, muchos de ellos más afines al jazz, pero también con cercanía al blues. Ahora Robben Ford nos presenta “Bronging It Back Home”, demostrando que a estas alturas la imaginación de este gran instrumentista está lejos de agotarse. Si cabe se le nota en pleno apogeo en una obra que calificaría de blues, aunque no la metería de lleno en ese estilo. El primer tema del disco se llama “Everything I Do Gonna Be Funky”. Y, aunque tampoco es un disco funky, se le puede atisbar esa pincelada a ritmos bastante alegres para el blues. Podemos decir que este y los siguientes “Birds Nest Bound” y “Fair Child” son temas de ambos estilos y puedes poner delante el que prefieras, aunque de lleno tampoco dan en el clavo de lo que ofrece Robben Ford en este nuevo disco. En lo que no nos equivocamos es en afirmar el altísimo nivel que Robben Ford muestra en esta obra tras cuatro décadas de carrera.

Como suele ocurrir en estos casos, no se trata solo del protagonista principal, que más que rodearse se acompaña de un tremendo equipo. Porque si su guitarra es excelsa, no lo es menos el teclado, cuyo tacto resulta delicioso. Igualmente hay un saxo que aporta maravillas en algunos temas. Si nos queremos centrar en un pieza para comprobar todo ello, la instrumental “On The Mornig” es un trago maravilloso para los amantes de la improvisación. Se percibe un entendimiento entre los músicos perfecto, que hace que todos se sigan en un concepto musical que adquiere su toque vacilón en un variable “Sick Capers Blues”, o se aviva en un concepto más rhythm & blues en “Most Likely You Go Your Way (And I´ll Go Mine)” para terminar, esta vez sí, con un indiscutible blues llamado “Fool´s Paradise”.

A resumidas cuentas se trata de una calidad musical digna de la élite mundial. Tal vez él no sea el más reconocido guitarrista, pero su trayectoria y lo que escuchamos en este disco nos hacen mirar a lo más alto que la música nos puede dar.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

INFORMACIÓN ADICIONAL:

Sello: Mascot Label Group