CRÍTICA: NEW MODEL ARMY – BETWEEN DOG AND WOLF

 

NEW MODEL ARMY

(Between Dog And Wolf)

9/10

 

 

 

Tras una larga carrera New Model Army siguen teniendo ideas en la cabeza para continuar siendo escurridizos a las etiquetas y saber aportar nueva inspiración a su carrera. Una trayectoria exitosa pese a su poca comercialidad. Al menos la intención no es que sus temas entren a la primera ni mucho menos, esto da para escuchas, para interpretaciones y para dar una y mil vueltas hasta que hayas asimilado todo lo que esconde una banda intimista a la vez que descarada en su lenguaje. No esconden su ideología transgresora, dan para pensar con sus sonidos y con sus textos y son uno de esos grupos que o los odias o los adoras. Por fortuna han sido bastantes los que están en este segundo saco, propiciando que los británicos sean una banda de culto de las que pueden contar con buenas cifras de ventas y una  legión de seguidores en todo el mundo. No olvidemos que de aquí salió Ricky Warwick para The Almighty, posteriormente vocalista de Thin Lizzy.

El nuevo trabajo del grupo es una joya que puede que a los más ortodoxos se les atragante. No es nada negativo, porque para los que busquen algo novedoso, el disco es arriesgado y original a partes iguales. A estas alturas de la película New Model Army es un fluir de ideas imaginativas a las que el término de post punk pienso que se les queda corto. Pienso que con ellos es más conveniente hablar del sentimiento de unos temas ambientales que nos sumergen en las historias que nos cuentan, a las que conviene seguir el hilo para atravesar todas las puertas que nos abren y transcender a una realidad en la que todo se ve mucho más claro. No, no me he fumado nada, aunque hacerlo tampoco sería una mala terapia para ver otro punto de vista de unas canciones atemporales, que lo mismo se hacen futuristas como recuerdan a los clásicos de los 70.

Llamativo el tratamiento atípico de ritmos que tenemos a lo largo de los temas, comenzando por “Horsemen”, una base de la creatividad de unos temas en los que la voz susurrante de Justin Sullivan es un cúmulo de emociones. Ni se despeina, no se desgañita para nada, pero la intensidad que transmite en temas como “Seven Times” o “Did You Make It Safe?” pone la piel de gallina. Reflexivo a la vez que hiriente. Esos ritmos se hacen un tanto más asequibles en “Lean Back And Fall”, bastante más estándar en este sentido para lo que es habitual en la banda. Pero este es un grupo que juega con las percusiones en un plano casi idéntico al de cualquier otro elemento, ya sea guitarra, bajo, voz o cualquier arreglo de otros diferentes instrumentos que embellecen y ambientan la obra. Aunque también puede prescindir de batería o bombos en “Knievel”, uno de mis temas favoritos de la obra, sin dejar nada vacio, adornado completamente y cargado de detalles.

Las guitarras rugen más en “Stormclouds”, y es que el grupo nos lleva al terreno que quiere con gran facilidad. Entre la docilidad de un perro y la ferocidad de un lobo se plasma con esta sutileza y este gran sonido que no deja escapar destellos de clase y calidad. Los aires desérticos de “Qasr El Nil Bridge” dan a este tema un broche dorado dentro de la obra. Se salen un tanto de la oscuridad para dar un toque de luz a “Tomorrow Came”, aunque el aura misteriosa predomina en un disco que siempre parece esconder algún enigma, algo que seguirás descubriendo en él incluso con el paso de los años, tal vez dándole un enfoque diferente en función de tu propia evolución musical y personal. Y si hablamos de misterio, esa es la sensación que deja “Ghosts” para terminar, con gran profundidad y un final lleno de destellos sonoros. Creatividad sin límites para una banda que no se corta a estas alturas en seguir retando a los oídos más inquietos que tantos seguidores les ha reportado en estos años.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

INFORMACIÓN ADICIONAL:

Sello: Top Artist Promotion (www.topartistpromotion.com)

Fecha de salida: 20 de septiembre de 2013