CRÓNICA: SABATON + ACCEPT + TWILIGHT FORCE

 

SABATON + ACCEPT + TWILIGHT FORCE

19 – 01 – 17

Bilbao (Sala Santana 27)

 

 

Entre un debate abierto por parte de los seguidores sobre la idea de que Accept pudieran ejercer de teloneros de un grupo con mucha menos trayectoria y relevancia histórica en el heavy metal se presentó esta gira encabezada por los suecos Sabaton. Independientemente del hecho, no cabe duda de que estábamos ante uno de los grandes eventos del invierno dentro de nuestra música, con lo que se esperaba gran entrada en la sala Santana 27 de Bilbao, algo que sin llegar al lleno se cumplió completamente.

TWILIGHT FORCE
TWILIGHT FORCE

A todo esto, la noche la abrirían unos jóvenes suecos de la misma localidad que Sabaton. Una alegría para los que disfruten del power metal sinfónico de corte europeo porque Twilight Force defienden el estilo con todos los clichés que se te ocurran incluidos.

TWILIGHT FORCE
TWILIGHT FORCE

La épica, los ritmos veloces, la melodía y una indumentaria acorde a ese mundo de fantasía medieval dieron fe de ello en un concierto donde nadie les borró una sonrisa del rostro. Transmitieron muy buen rollo pese a apenas contar con espacio en un escenario reservado para los dos grandes a los que precedían. Sin embargo, considero que salieron fortalecidos del envite, dejando una grata sensación, aunque siempre haya quien recuerde que este estilo se saturó hace muchos años.

TWILIGHT FORCE
TWILIGHT FORCE

El caso es que ellos lo practican con solvencia, elegancia y mucha calidad, con lo que personalmente creo que son un grupo interesante y con mucho futuro. Tan solo tienen dos discos editados hasta la fecha, los cuales presentaron con temas como “Riders Of The Dawn” y “Gates Of Glory”, dejando bien clara la fe en el estilo que ellos practican y que tiene condiciones para enarbolarlo con garantías y darle continuidad en el tiempo.

TWILIGHT FORCE
TWILIGHT FORCE

La expectación para ver a Accept, evidentemente, no era la propia de una banda telonera. Estamos hablando de un pedazo de historia del heavy metal que se veía en un escenario reducido y en un tiempo igualmente muy corto para poder englobar las ya cerca de cuatro décadas de canciones que los contemplan.

TWILIGHT FORCE
TWILIGHT FORCE

Desde que Mark Tornillo se hiciera cargo de la voz es una formación que no ha decepcionado en vivo ni en estudio. Contra todo pronóstico el vocalista se hizo con el puesto de una manera tremendamente natural teniendo en cuenta el carisma y la leyenda de quien tenía detrás. A día de hoy a mí me convence completamente lo que Tornillo le brinda a Accept tanto en defensa de sus viejos temas como en los nuevos. Probablemente solo el original podría ocupar ese puesto mejor que él. Creo que con eso ya lo digo todo.

ACCEPT
ACCEPT

Curiosamente lo que eché en falta en esta noche es la consistencia de una segunda guitarra más implicada en la banda. Si Wolf Hoffmann es el alma de este grupo, es cierto que su segundo de abordo es muy importante y Herman Frank tenía mucho más peso en la banda de lo que una guitarra rítmica pueda hacer pensar. Tampoco quiero desmerecer la labor profesional que Uwe Lulis es capaz de realizar, pero se deja notar que no hay la misma implicación ni empaste con sus compañeros. Tal vez haya que darle tiempo.

ACCEPT
ACCEPT

Por cierto, que también en la batería ha habido remplazo, entrando ahora Christopher Williams en sustitución de Stefan Schuarzmann, manteniéndose a la derecha del guitarra líder un Peter Baltes incombustible y con una fuerza tremenda, que representa el corazón de la formación. Un bloque sólido que sigue sonando como una apisonadora a día de hoy.

ACCEPT
ACCEPT

Y no, no hizo falta esperar para comprobarlo a los temas más emblemáticos. La banda tiene nueva munición dispuesta a hacer estallar nuestros oídos desde bien pronto, como fueron los casos de “Stampede” y “Stalingrad”. Claros ejemplos de que los Accept actuales siguen ofreciendo mucha dinamita.

ACCEPT
ACCEPT

Claro que cuando “Restless and Wild” sonó aquello cobró otra dimensión. El tiempo es gran aliado de las buenas canciones y resulta que la fortaleza de esos riff y esos coros siguen retumbando con más fuerza cada vez. La banda se mostró completamente entregada, nada de mostrar una menor actitud por jugar un papel secundario en el cartel, sino la sensación de que se debían ganar una vez más a su público.

ACCEPT
ACCEPT

“London Leatherboys” fue otro clásico que pedía el apoyo de las voces de la sala en cada estribillo, antes de pasar a “Final Journey” y que Wolf Hoffmann ocupara el centro del escenario para dar arranque entre el calor del público a “Princess of the Dawn”, que vaticinaba una recta final demasiado rápida. Y es que ya llegaba el turno de escuchar la famosa introducción de “Fast as a Shark”, coreada por el personal y rota por el desgarrador estallido vocal de Mark Tornillo. Cierto que la velocidad del estribillo parece sobrepasarle en algún momento, pero tremendo papel el suyo igualmente.

ACCEPT
ACCEPT

No se hizo esperar otro gran himno como “Metal Heart”, con la concesión en la parte final para un “Teutonic Terror” que demuestra tener el carisma suficiente para ser considerado un nuevo clásico de la banda. Aunque el puesto de privilegio para ello lo tiene “Balls To The Wall”, con el cual cerraron la actuación.

ACCEPT
ACCEPT

Faltaron muchos temas en un repertorio muy corto que lo único que nos hace es esperar con muchas ganas su regreso con nuevo disco y como cabezas de cartel de una gran gira. Ellos tienen la fuerza y la relevancia sobrada para ello en el heavy metal a todos los niveles, aunque en esta ocasión hayan tenido la modestia de abrir la noche para un grupo al que triplican en trayectoria.

ACCEPT
ACCEPT

En cualquier caso, y aunque no sea la banda que personalmente más me guste, ni quiero ni se le puede quitar un ápice de mérito a Sabaton, que en estos tiempos tan complicados para encontrar ese relevo generacional que muchos ansían se colocan en una posición de privilegio para ser una de las bandas de referencia en el nuevo heavy metal. Las grandes acogidas de sus giras y de sus trabajos discográficos así lo corroboran.

SABATON
SABATON

Capitaneados por el carismático y atípico vocalista Joakim Brodén la banda salió a por todas con “Ghost Division”, dejando atrás la intro pertinente y, estos sí, ocupando toda la amplitud del escenario de la sala Santana 27, con una pantalla tras la batería que iría proyectando imágenes, habitualmente de temática bélica, acordes a las propias canciones de la banda que también ha amoldado su decorado e indumentaria a ese fin.

SABATON
SABATON

Por supuesto que presentaron su último “The Last Stand”, con temas en este primera parte como “Sparta” y “Blood of Bannockburn” que dieron ritmo al arranque de actuación. Posteriormente ya pasaríamos a las típicas bromas de los músicos de la banda, con un guiño incluido a “Run to te Hills” de Maiden para definitivamente entrar con “Swedish Pagans”

SABATON
SABATON

Habían encarado excelentemente este inicio, pero ya fue con “Carolus Rex” cando se llevaron de lleno a los presentes, que participaron desde el arranque del tema, para terminar coreando el nombre de la banda, algo que pasaría en repetidas ocasiones a lo largo de la descarga.

SABATON
SABATON

“Shiroyama” nos volvía a traer a la palestra su última obra, dejando claro que esa es la apuesta actual de la banda, aunque antes del propio “The Last Stand” nos interpretarían “Far from the Fame”.

SABATON
SABATON

La parte central del concierto estuvo marcada por la balada “The Final Solution”, no sin bromas previas de los componentes, con teclado en escena para interpretarlo. Solo fue un pequeño parón antes de que volvieran a caer las bombas, como fueron “Resist And Bite”, con Joakim Brodén haciéndese con una tercera guitarra, y posteriormente “Night Witches”.

SABATON
SABATON

“The Lion Of The North” realzaría la épica, perfectamente enlazado a “Diary of an Unknown Soldier” y encarando la recta final con “The Lost Batallion”, tras el cual tuvimos un “Union (Slopes of St. Benedict)” de su disco de 2008, “The Art of War”, que parece haber quedado como uno de sus discos más significativos hasta la fecha.

SABATON
SABATON

Tras ello nos emplazaban para los bises, que comenzaron en caliente con “Primo Victoria”, poniendo a botar a toda la sala. Reservaron hueco aun para seguir presentando disco con “Winged Hussars” y se despidieron con “To Hell and Back”, dejando previamente una anécdota por parte del vocalista y uno de los asistentes, cuando el primero le pidió cambiar su particular chaleco metálico por otro idéntico que éste llevaba, a lo que le contestó que por ser un regalo de su novia no podía hacerlo, ante lo cual el cantante le regaló sus oscuras gafas. En cualquier caso, sí mostraría su camiseta interior, cómicamente contando con una imagen idéntica que el chaleco.

SABATON
SABATON

Aclamados por la nutrida concurrencia se marcharon de la sala Santana 27 los suecos, dejado bien claro que son uno de los grupos que pueden permitirse el lujo de causar en salas medianamente grandes estas grandes sensaciones reservadas de un tiempo a esta parte a muy pocos.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)