CRÓNICA: FIESTA 10º ANIVERSARIO LA MIRADA NEGRA / INSONORO – DESASTRE + SÍNDROME PETER PANK + 4 TRAGOS

FIESTA 10º ANIVERSARIO LA MIRADA NEGRA / INSONORO

DESASTRE + SÍNDROME PETER PANK + 4 TRAGOS

2 – 02 – 13

Erandio (Sentinel Rock Club)

Muy interesante el cartel de la segunda jornada de nuestra fiesta. Y no lo digo porque estemos implicados en ello, sino porque es evidente que cada una de las bandas por una u otra cuestión iba a suponer algo especial en esta noche mágica en el Sentinel de Erandio. Además, esta jornada fue planteada por nuestros compañeros de Inosnoro, mientras que la del viernes nos tocó a nosotros, con lo que lo digo desde una mayor sinceridad ateniéndome a lo que realmente supondría cada una de las actuaciones.

En el caso de 4 Tragos porque era la primera vez que se iban a presentar encima de un escenario en formato acústico. Por lo tanto iba a ser una rareza que con el tiempo suponemos que dejará de serlo. Hoy en día la posibilidad de tocar en las FNACs, en la radio o incluso en pequeños locales en este formato es una posibilidad de promoción para las bandas que se está explotando bastante. No todos los grupos pueden adaptarse a ello, pero sin duda el rock & roll de 4 Tragos tiene ese punto de sencillez que lo hace apropiado para trabajarlo en esta onda tan natural, sin eléctricas distorsionadas.

La banda presentaba esta noche un calentito nuevo disco cuyo formato físico estaba recién editado. Precisamente de “Otro Beso De Judas”, segunda obra de la banda, extrajeron algunos temas como “En La Orilla”, “En Medio De La Ovación”, o “Telaraña”. No se olvidaron de su debut “Salta Al Arcén” con un sensacional “Cuando Doblen Las Campanas”. Y también se marcaron algún tema doblemente especial, como la versión de los Flying Rebollos “4 Acordes”. Nos sale la comparación fácil con Platero, pero seguro que esta mítica banda vizcaína a la que terminaron homenajeando tiene tanto o más que decir en el rock & roll que exhalan por los cuatro costados 4 Tragos con la misma fragancia que el humo sacado de cada calada de un cigarro. Con sus pequeños fallos salió bien el experimento. Seguro que tendrían oportunidad de repetirlo, pero ahora también uno tiene ganas de poder verles en eléctrico. Tienen nuevo disco que presentar, así que seguro que habrá oportunidades.

Síndrome Peter Pank era la primera vez que pisaban Bizkaia. Y mira que tenemos cerquita Miranda de Ebro, lugar desde el que se desplazaron para ofrecernos su desacomplejada música. Muestra de ello ha sido su primer disco “¡Vente A Mi Barrio!”, pero una banda con letras y actitud tan divertida estaba claro que tenía que dar más de sí encima de un escenario. Y por supuesto que lo hicieron en esta oportunidad. No fueron pocos los que vinieron expresamente para verles a ellos, no solo de su localidad sino también de Bizkaia y alrededores. Con ello se creó un ambiente fantástico ante un público que en algunos casos conocía esas canciones y apoyó a la banda de principio a fin. Aquello se convirtió poco a poco en una fiesta auténtica merced a temas que, si en lo musical mueven hasta a los muertos, con sus letras resucitan neuronas de los cerebros más acomodados. Esto es para sentir el cosquilleo en cuerpo y mente… y la reacción llega por sí sola.

Así se lo tomó un público que no paró, terminando con la fiesta en todo lo alto una vez pasada la pequeña timidez del inicio. Tanto en sus temas más ska, como en los más punkarras o en cualquier otro estilo que toque esta banda, porque es mucha la variedad, nadie quedó indiferente y salieron de allí con el triunfo logrado.

Ya se iba viendo venir desde el principio, con temas que iban calando y provocando reacción. Así iniciaron con temas de su maqueta, como “En El Espacio” o “Ponte En Guardia”, dando cada vez un paso para acabar con cualquier atisbo de pasotismo en el personal. “Puede Ser” es uno de esos temas que tienen la clave para arrastrarnos hacia el terreno que pisa esta banda e inculcar un mensaje que demuestra que diversión y reivindicación unidas puede ser un cóctel muy efectivo. Una risa irónica acompañada de un mensaje inteligente que deja a la verdad en vergüenza, de absurda que es, puede hacer más daño que los puñetazos.

Por eso Síndrome Peter Pank invita a coger una copa y a beber, pero no para olvidar, como en “Vuelvo Borracho”. Se comenzaba a llegar a un punto de no retorno en el que nadie iba a poder parar aquello. Temas como “Nunca Llueve Eternamente” fue un exponente de un avance en el concierto que seguía haciendo crecer la animación entre el personal. La banda arriba no paraba, se dejaba la piel y disfrutaba junto con los de abajo.

Tuvieron el detalle de ofrecernos un tema nuevo de título “A La Tercera”. A partir de ahí el ambiente de camaradería se desató por completo. El propio grupo invitó a Gonzalo, guitarra y voz de los también de Miranda A Kal Y Kanto, para cantar con ellos “Vente A Mi Barrio”. Uno de los momentos no solo de su actuación, sino de todo este fin de semana intenso para nosotros.

Al grupo solo le quedaba redondear la actuación, y lo hizo con algunos temas más como “Sobre La Luna” y “Desgastándome”. La banda de Miranda se gana con creces a cada uno de sus seguidores. Seguro que los que estuvieron allí en esta primera ocasión del grupo en suelo vizcaíno tendrán intención de repetir en la próxima, porque vaya cómo enganchan.

Con este ambiente predispuesto para más diversión y buenas canciones se presentaba la actuación de Desastre. Para mi fue un honor poder presentar a una banda que tras 25 años de andadura sigue en la pelea manteniendo el gran nivel y siendo una referencia dentro del rock urbano. Los números y las cifras me dan lo mismo. La personalidad que tiene la banda, la calidad de sus últimos trabajos “Callejón Desastre” y “Soltando Lastre” y la añoranza de clásicos que hoy siguen emocionando a los que vivieron el punto de inflexión que para la banda marcaron discos como “Dando Que Hablar” y “3 y ½” habla mucho más que la fría estadística. Estos fueron los cuatro discos de los que tiró el grupo esta noche para exponer sus credenciales en un repertorio de 23 temas si mis cuentas no fallan.

El inicio del concierto nos hacía presagiar algo inolvidable. Sonaba aquello muy bien con “Miradas Empañadas” y en “Dando Que Hablar”, homónimo de aquella tercera obra de la banda que fue acogido como un clásico entre los presentes. La banda prometía hora y media de descarga, algo que parecía que se podía hacer largo para Alfonso, que al no escucharse por monitores no conseguía estar cómodo y en alguna ocasión pidió que se solucionara aquello o se podía quedar afónico. La cosa ya había empezado con problemas, ya que hubo que ajustar el micro para que no se le cayera constantemente. El caso es que fuera sonaba de lo lindo y su voz gastada era la misma que escuchamos en sus obras. Una voz y una personalidad que no engaña.

Tuvo que sufrir un poco más en temas como “Incordiar” o “De Pena”, visiblemente cabreado, aunque la banda estaba ejecutando los temas perfectamente. Cuando los monitores comenzaron a sonar la cosa fue peor porque aquello no andaba del todo bien, así que media vuelta a uno de los altavoces y a seguir pa´lante para poco a poco terminar por olvidarse todo y, gracias al sensacional empuje del público y a la entrega de toda  la banda, acabar ofreciendo un inolvidable recital de rock urbano con marca de Usera. Lo del principio solo fue para dejar claro por qué del nombre de la banda. Los hay que salen volando por encima de la batería, otros tras una explosión de pirotecnia, otros con imágenes en grandes pantallas y los Desastre lo hacen engañándonos con que aquello no va a salir para al final ofrecer una actuación memorable.

“Soltando Lastre” y “Algo Mejor” comenzaron a mostrar que la fluidez mejoraba y que aquello cogía ritmo. Y ya para que todo mosqueo se pasara llegó la dedicatoria de Alfonso a los gemelos Carlos y Mikel de Insonoro de “Carta A Clara”. Un tema que la banda no tenía previsto tocar en directo y que gracias a la insistencia de estos la llevaron a cabo en Erandio. Por mi parte, y creo que en nombre de todos los allí presentes, agradezco la cabezonería de ambos y la condescendencia del grupo, porque es un tema muy especial dentro de su último disco y de toda su discografía. Un tema cuya letra estremece tanto que da igual si algunos arreglos del disco no se pueden llevar al directo. Aquí hay mucho sentimiento.

Y más que se iba a poner sobre la mesa con “Africa”. Que pedazo de tema dedicado a una realidad que por mucho que no sea portada de los medios de comunicación nunca debemos olvidar ni aceptar como normal. En este momento todo iba mucho mejor, la banda estaba más a gusto en el escenario y la gente entregada. Poco a poco allí no quedó nadie quieto, los asistentes mostraron además ser verdaderos seguidores de la banda y no la dejaron sola, cantando temas como “No Dudes”, “Combo Del Perdedor” o “El Loro”. El grupo, por su parte, supo recibir ese calor con los brazos abiertos y supo provocar aún más a los asistentes. Un ejemplo para aquellos que piensan que los grandes eventos solo se viven en grandes estadios. Ni mucho menos, preguntadle a alguien de los que estuvo aquí esta noche. Sin la frialdad de algunas estrellas, pero con el rock y el sentimiento por bandera, lo que vivimos en un lugar tan recogido como el Sentinel esta noche será difícil de olvidar. Ya en este momento lo sabíamos, pero todavía quedaban emociones.

Desde estas líneas agradezco a Alfonso y a la banda por invitarnos a subir al escenario en uno de sus temas más emblemáticos. “Quien Mucho Abarca…”, contó con la colaboración de los gemelos y sin esperármelo me tocó a mí también. Además un tema muy especial en el que hubo un recuerdo para Roberto de Porretas, que tal vez de alguna manera estaba presente en una sala donde se respiraba el rock con la autenticidad que precisamente a él siempre le caracterizó.

Todavía quedaban buenos momentos por vivir. Sin ir más lejos el siguiente “Que No Amanezca”, que a estas alturas aumentó si cabe más el pedazo de fiesta en la que se había convertido el local. La banda amenazaba con despedirse, algo que el público no le iba a permitir, con lo que no pudieron dejarse en la recamara ninguno de los temas que les quedaban. No podía faltar la versión de los vallecanos Aldebarán que se han marcado en su último disco y que tanto dice de la realidad del rock & roll. Hablo de “Rock De Carretera”, una letra con la que se da las gracias a mucha gente. Pero el agradecimiento debe de ir principalmente para los músicos, que dan todo en el escenario con una pasión que en el mundo rosa de la música no se percibe. La realidad de la calle no es la que muestran en los grandes medios y la realidad de la música tampoco. Está en lugares como este representado por bandas como las que teníamos en el escenario. Lástima que una gran parte del público solo se queda en la superficie, porque no saben lo que se están perdiendo en este tipo de conciertos.

Aquí no existe ese glamour y los músicos se la juegan. Menudo susto me dio Alfonso al caerse en “Tos´Dacuerdo”, por fortuna todo quedó en un pequeño susto. Y es que claro, el escenario del Sentinel se puede quedar pequeño. Ya se había mezclado con su gente mientras tocaba el bajo y remataba la actuación, en cuyo final no faltó “Me Piro”, primer tema que yo escuché de ellos hace ya unos cuantos años.

Personalmente nunca había tenido oportunidad de verles, así que cuando la gente de Insonoro me proponía la posibilidad de Desastre no me pudo parecer mejor opción. Solo falta que el público hubiera valorado tanto como yo esta posibilidad de ver al grupo en directo y, a tenor de cómo están las cosas, tendremos que dar por bueno el número de asistentes, aunque por desgracia sigue estando muy por debajo de lo que las bandas merecen. Pero tampoco es cuestión de ponerse a llorar, sino de seguir desde nuestro medio intentando que, al menos en la medida de nuestras posibilidades, esa tendencia pueda cambiar y nuestra música siga llegando aunque sea a una persona más. Los que miran para donde los medios oficiales les dirigen jamás serán capaces de entender lo que vivimos en este tipo de conciertos. Ni siquiera estas líneas llegarán a explicar esas sensaciones por mucho que me esfuerce. Para conocerlas de verdad, no te pierdas la próxima.

Texto y fotos: ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

Fotos finales: CARLOS GARCIA (www.insonoro.com)