EDGUY + KOTTAK

16 – 10 – 11

Barakaldo (Rockstar Live)

A punto estuvo de suspenderse el concierto de Edguy en Barakaldo. Nada sospechamos hasta el momento en que saldría la banda a escena con Jens Ludwig sentado en una silla, lo que nos abría un interrogante que Tobias Sammet solo despejó en parte durante el concierto. Al parecer, Jens tuvo una indisposición que le provocaba algún mareo, con lo que no quedó más remedio que hacer así la actuación o suspender. Por fortuna, el grupo optó por la primera de las opciones realizando un esfuerzo (sobre todo el guitarrista, claro está) que agradecemos desde el principio de esta crónica.

KOTTAK
KOTTAK

No se respiran en torno al grupo alemán las mismas sensaciones que hace una década. Es complicado mantenerse siempre en las  más altas cotas de imaginación en una banda que ha hecho mucho en pocos años, con una continuidad imparable y manteniendo siempre una formación estable; hecho que pocos grupos de los surgidos en la misma época han conseguido. Eso les ha provocado una regularidad de discos más que aceptable, si bien, sus últimos trabajos no convencen como lo hicieron “Vain Glory Opera”, “Theater Of Salvation” o “Mandrake”. Sin embargo, la banda conserva su tirón en tiempos de receso como demuestra una media entrada considerable un domingo a la noche en una sala tan grande y sin contar en el cartel con unos acompañantes demasiado acordes al estilo y del atractivo para los seguidores de la banda alemana como en su día tenían Andre Matos o H.E.A.T., con lo que les vimos en este mismo recinto en la última ocasión.

KOTTAK
KOTTAK

Esta vez el acompañante sería Kottak, la banda formada por el batería de Scorpions James Kottatk que, no nos engañemos, aquí no conocía ni el tato. La mayoría parecía más intrigada que consciente de lo que iba a ver. La primera sorpresa para muchos fue que el batería no era precisamente el que esperábamos. Y es que aquí James Kottak se hace cargo de la guitarra y la voz. Otra sorpresa fue encontrarnos con un estilo de punk rock gamberro y divertido que sirve para pasarlo verdaderamente bien en directo, pero que musicalmente a la mayoría de heavies congregados en la sala no creo que les hiciera ir directos a comprar uno de los cuatro álbumes editados por la banda después del concierto.

KOTTAK
KOTTAK

En cualquier caso, Kottak y su banda terminaron por enganchar al respetable a base de puesta en escena, actitud, fiesta y diversión. El propio carácter del aquí vocalista y guitarrista se contagia, ya que es una de esas personas que parecen agradecidas a la vida nada más que te topas con él. Siempre sonriente, juerguista y animado, pese a que comenzaran la actuación a contracorriente, con un sonido deficiente, probando sobre la marcha los instrumentos y los micros. Para los despistados coqueteó con insinuaciones constantes a su banda, como cuando tras entonar “I Love Rock & Roll” y “We Will Rock You” hizo un guiño a “Rock You Like A Hurricane”. Incluso versionaron “Holiday” completo, comenzando de manera pausada como la original, pero terminando con ese punk electrizante que apreciamos en temas propios como “Scream With Me”, “So Disconnected” o “Do You Want To Play?”, en los que una vez arreglado el sonido vacilante del principio, con total desparpajo, mostrando camisetas de Scorpions, Edguy y los propios Kottak consiguió darse un paseo triunfal entre los espectadores a los que había hecho pasar un buen rato con un estilo que, en principio, no pegaba con ellos. En su escaso tiempo de actuación también pudimos verle tocar la batería en dos temas donde la bajista se hizo cargo de la voz y tuvo el detalle de dedicar “Time To Say Godbye” a Ronnie James Dio y al recientemente fallecido Jani Lane de Warrant. Todo eso en un concierto tan corto como intenso que mostró la actitud positiva de un hombre que lleva tatuado el rock a fuego en todo su cuerpo.

KOTTAK
KOTTAK

La actuación de Edguy fue de circunstancias. Hay que destacar la voluntad de la banda por sacar adelante este concierto, cosa que consiguieron de manera excelente en cuanto a la ejecución de los temas, mostrándose bastante más solventes de lo que en otras ocasiones les hemos visto. La banda tocó muy bien y Tobias Sammet mostró un gran estado vocal desde el inicio. La noche se prestaba para lo mejor con un público rendido a los pies del grupo tan solo con pisar el escenario. Los temas de su nuevo “The Age Of The Joker” obtuvieron una gran respuesta por parte de los seguidores, demostrando que están con ellos en la actualidad y no esperando simplemente a que caigan sus temas más clásicos, de los cuales cada vez se echan más de menos.

EDGUY
EDGUY

“Nobody´s Hero” ya dejó escuchar al público, que continuó en plena entrega con otro nuevo “The Arcane Guild”. Jens Ludwig no se levantaría más que para coger agua en alguna ocasión. Sentado demostró su destreza con la guitarra, apoyado por sus compañeros que de vez en cuando se acercaban e incluso se ponían a su altura. Hay buen entendimiento en una banda que no ha cambiado de formación desde su inicio de carrera, tan solo incorporando un poco más tarde a Tobias Exxel como bajista para dar libertad a ese carismático frontman, tan bromista como siempre, incluso para explicar que a Jens no le pasaba nada en ninguna pierna pese a estar sentado…

EDGUY
EDGUY

“Tears Of A Mandrake” fue el primer de los temas clásicos de su discografía en caer, con la consiguiente respuesta del público. Pero todavía nos quedaban nuevas piezas como “Rock Of Cashel”, provocando saltos constantes entre el público, nueva muestra de que la última obra de los alemanes parece haber calado hondo. Si los ánimos están animados, que mejor para mantenerlos así que “Lavatory Love Machine” continuado por “Babylon” en un tramo de auténtico gozo para todos sus seguidores. Esto entre las coñas habituales del vocalista, quien retó al publico, como suele ser habitual, a gritar más alto que en las ciudades estatales por las que ya habían pasado, dividiendo a la sala en dos bandos y provocando una dura competición entre uno y otro.

EDGUY
EDGUY

“Superheoes” es uno de los temas con ese gancho para permanecer en el tiempo, en esa época más hard rockera que el grupo ha pasado en los últimos años. Un buen single de garantías para el directo. De su última obra, el elegido como tal es “Robin Hood”, el cual tal vez no sea tan pegadizo, pero es todo un temazo que me pareció de lo mejor de la noche, con la banda interpretando de manera excelente, exigiendo ese nivel para disfrutar al máximo de los temas mas heavies y elaborados de sus última obra. Aquí Tobias emuló al mismísimo Bruce Dickinson, no solo por la similitud de su registro, sino porque lanzó un par de scream for me Bilbao que nos lo trajeron inmediatamente a la mente. La gente respondió con euforia en el que yo considero más brillante momento de la noche.

EDGUY
EDGUY

El solo de batería de Felix Bohnke volvió a contar con sonidos grabados. Pero en lugar de las orquestaciones de su anterior gira, esta vez contó con la música del “Equipo A”, con el consiguiente tarareo del respetable. Destacamos que aún con aspectos decorativos como este, el batería se encuentra en plena forma y hace un perfecto despliegue para apoyar las canciones de la banda. El grupo regresaría con “Ministry Of Saints”, apresurando un final bastante prematuro. “Vain Glory Opera” era lo último antes de unos bises que no presumíamos muy largos. Como dijo Tobi, lo bueno de que sea el último es que tiene que ser bueno y no una mierda de tema. Cierto, aunque considero que dentro de esa obra de idéntico título que les abrió muchas puertas allá por el 98 había mejores canciones que la banda pasó por alto, no ya por la situación, sino porque los repertorios que elige el grupo raramente me parecen acertados. Teniendo el legado que tienen, no puede ser que discos como “Mandrake”, “Theater Of Salvation” o el propio “Vain Glory Opera” solo tengan una representación en un set list que aquí con el bis final “King Of Fools” se quedó en 11 temas, cosa que no se hubiera alargado demasiado de estar Jens Ludwig en buen estado, a tenor de lo ocurrido en otras ciudades.

EDGUY
EDGUY

Creo que no es excederse que rescaten cuatro temas más de su época más reconocida para dar una muestra más clara de su legado. En esta ocasión se llevaron el apoyo y el reconocimiento de todos, más ante unas circunstancias que, como explicó el propio Sammet, estuvieron apunto de provocar la cancelación del concierto. De hecho se merecen por ello todas nuestras alabanzas, al igual que por el buen estado mostrado a la hora de plasmar los temas en vivo. Sabemos que es una banda bastante irregular sobre las tablas que depende mucho de la forma de su líder y vocalista Tobias Sammet, que esta vez no flojeó en el aspecto vocal. Sin embargo, me dejan a la espera, una vez más, de poder decir que vimos una actuación lo más completa posible.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

MARI JOSE MARTIN (mari@lamiradanegra.es)