CRÓNICA: CLARISSE + BARÚA

CLARISSE + BARÚA

5 – 01 – 12

Bilbao (Crazy Horse)

Barúa no visitaron Bilbao con su primera obra “Sin Que Duerman Las Horas”, algo imperdonable tratándose de una banda de nuestra vecina Navarra. Para saldar cuentas, con el recientemente editado “El Reencuentro” el grupo tuvo la oportunidad de presentarse ante la parroquia vizcaína una mágica noche de reyes. Un regalo que muchos no aprovecharon, ya que de los asistentes al concierto se dejó notar el claro color rojillo. Y es que el cartel tampoco ayudó a que un público rockero se acercara a la sala, puesto que sus acompañantes Clarisse, que ejercían de anfitriones, se quedaban en un plano demasiado popero incluso para un grupo que no destaca por su contundencia como Barúa. Puede que ese choque de estilos hiciera que muchos decidieran quedarse en casa disfrutando de sus regalos en lugar de salir a vivir una buena noche de música en directo. Si alguno de ellos lee esta crónica le desvelo que los reyes son los padres, así que en otra ocasión espero un poco más de ánimo cuando una noche tan señalada nos ofrezca una oportunidad así.

Barúa fueron los primeros en salir a escena. Muy motivados, sonrientes y entusiasmados con su nuevo disco y con una música que tiene el gancho suficiente para llegar a cualquier público, sin dejar de ser una banda de rock. La Fuga sonaba justo antes de que estos aparecieran en el escenario, y no es casualidad. Ellos son una de las alternativas más fiables dentro de estos sonidos que ya tienen su corriente. Y Barúa van bien posicionados en esa tanda de grupos con influencias de Rulo y compañía.

Pero lo suyo hunde sus raíces en terrenos más diversos. Escuchando la versión de Los Secretos “Pero A Tu Lado”, entendemos el toque pop del grupo. Ahora bien, ya podía ser la basura que hoy nos venden como pop del calibre del grupo versionado con este tema. En cualquier caso, “No Hay Fronteras” entre estilos, como nos demostraron en su tema más relajado dentro de una actuación con mucho ritmo pese a la tendencia melódica de la banda. En su repertorio hubo temas de sus dos obras editadas hasta la fecha. Me quedo con temas que adquieren un peso especial en directo como “El Reencuentro” o “Siempre”, si bien hay que destacar el gancho que poseen los movidos “Apuesta Segura”, interpretado después de ese inicial con estribillo de marca propia “Tu Rincón”, y un “Mejor Salir Corriendo” en el que encuentro un atrayente aire a Platero.

Con estas premisas el que guste de estos sonidos se engancha. Yo, que no soy muy seguidor de estos parámetros dentro del rock, admito que disfruté de lo lindo en directo de la banda junto a sus fieles seguidores. Se hace ameno lo que vemos y el grupo suda la gota gorda. Que se lo digan a su vocalista Iñigo Berrogui que dio todo lo que tenía tanto en ese aspecto vocal, que tan natural le sale, como en su papel de guitarrista, donde transmitió total entrega y sentimiento, acompañado en esa labor conjunta a las seis cuerdas por su compañero “Bolo”, una buena pareja para llevar a  buen puerto este grupo. Es verdad que eché en falta algo más de contundencia en el sonido. Yo hubiera subido más las guitarras, pero ya es una sensación que me queda en el disco y que atiende a mi condición de metalero. A los que les guste este tipo de bandas no creo que le pase lo mismo y disfrutaran con temas como “Segundas Partes”, que en ocasiones como esta sí pueden ser buenas. Y no nos olvidamos de temas de su primera obra que funcionan en vivo, aunque creo que han dado un ligero salto con el último disco. Pero ahí quedaron “Tu Olvido” o “Pintar Un Corazón”. Precisamente, demostrando que ellos apuestan por un estilo continuista que una las dos obras editadas hasta la fecha, el final contó con un tema de cada obra: “Las Noches Que Inventamos” del último y “Si Quieres” del anterior, dando carpetazo a una noche agradable de rock en la que el grupo transmitió todo el convencimiento en esa línea marcada.

Una línea que les pueda llevar de tocar a grupos como Barricada a otros metidos de lleno en terrenos pop. Espero que sea una baza que puedan aprovechar, aunque en muchos casos la división entre el pop y el rock es tan grande que pocos seguidores admiten medias tintas, y se echan para atrás si el cartel no se acompaña de otro grupo acorde a sus gustos. Eso ocurrió en gran parte en esta ocasión en la que pudimos escuchar de boca de ellos un aupa Osasuna al que nos sumamos. Incluso posteriormente con Clarisse tras un aupa Bilbao tuvo que corregirse por un aupa Pamplona. Y es que repito que por desgracia hoy la mayoría de seguidores eran navarros. Y digo por desgracia porque cabría esperar un poco más de respuesta del público local.

No puedo profundizar demasiado en la actuación de Clarisse porque su estilo se escapa completamente de lo que en nuestro medio tratamos. Es un grupo de pop que poco tiene que ver con lo que aquí cubrimos, aunque tiene sus puntos en los pasajes a lo banda sonora de Tarantino y cuenta con buenos músicos, como Albaro Alonso a la batería (Idi Bihotz, Clockwork, etc.) y un guitarrista de mucho tacto y gusto a la hora de tocar llamado Miguel Moyano. Me quedo con el inicio del concierto donde rescato algún tema como “Sigueme”, con un pequeño matiz rockero de tinte americano que podríamos rescatar para nosotros, pero la actuación termina yendo al terreno suave que el grupo propone. Esos sí, con la originalidad de la aplicación de la trompeta y resultando un combo de total elegancia, como demostró alguna versión que nos sonó a anuncio televisivo y que me chivaron… aunque ahora mismo ya no recuerdo de quién se trataba.

Texto: ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

Fotos: MARI JOSE MARTIN (mari@lamiradanegra.es)