CRÓNICA: BENITO KAMELAS + DESIDIA

BENITO KAMELAS + DESIDIA

3 – 02 – 12

Zorrotza (Gazetxe)

Hacía un par de años que Benito Kamelas pasaban por la sala Rockstar Live de Barakaldo en una de aquellas fechas elegidas para grabación de disco en directo. Ahora, no muy lejos de aquel lugar, la banda regresaba para presentarnos un nuevo disco en el cual tienen fe ciega. No en vano, “Buena Energía” es un trabajo que da pie a que la banda lo pasee con orgullo por todos los escenarios entre su buena colección de clásicos que les ha hecho dejar un buen reguero de seguidores a lo largo y ancho del estado.

Antes que ellos, calentaron el Gaztetxe de Zorrotza Desidia. Un trío aún en fase de avanzar hacia la edición de un primer disco, aunque ya tenían una maqueta que vendían al módico precio de 1 Euro. La banda aún debe de crecer musicalmente, pero dejaron constancia de su actitud en el escaso tiempo que permanecieron sobre las tablas, en una onda demasiado punk para un público de Benito Kamelas que en algunos casos viene de ese palo, pero que también cuenta con un sector más abierto hacia otras corrientes musicales. Tal vez por ello no hubo una respuesta excesiva más allá de los aplausos de rigor entre temas, aunque la banda puso lo mejor de su parte.

El Gaztetxe cogía un sensacional aspecto con más de tres centenares de personas dispuestos a cantar cada uno de los temas de los valencianos. Sin miramientos la banda salió a morir sobre el escenario presentándose con “Soy”, un tema que dice tanto de lo que son estos chicos con una carrera que empieza a mostrarles como unos clásicos de la escena. Y es que desde 1997 ha llovido un poco. De lo que son hoy, esos roqueros con ganas de sentirse vivos, pasamos a lo que han sido estos años en los que “Y No Perdemos Ni Un Solo Minuto” es la filosofía con la que Benito Kamelas encara la vida y las actuaciones. Y es que los temas se iban sucediendo de forma enlazada, sin descanso, presentando su nueva obra con una buena muestra de la misma. Entrelazando los nuevos y viejos temas. Los más emblemáticos de trabajos previos al directo editado hace un par de años hacían aflorar un clamor en el recinto.

Bien es cierto que algunos de los temas nuevos ya suenan a clásico, como puede ser el homónimo “Buena Energía”. En cualquier caso, como es evidente, se notó mayor respuesta en temas pasados que los seguidores han interiorizado como una parte de su vida. Es el caso de “He Decidido”, emotivo en esa introducción donde Quini movía sus brazos para echar a volar en ese electrizante estribillo cantado con muchas ganas. También debemos considerar en este apartado de favoritos de los seguidores “Fue Mi Abuelo”, con sembrada referencia y descripción acertada y fiel de la familia real por parte de Quini terminando en un grito de ¡viva la republica!

La parte más punkarra de la descarga también fue disfrutada con toda la adrenalina desatada, con temas como “Iros A La Mierda”, “Loko” y “Cocaina”. Posteriormente la descarga derivaría de nuevo hacia una tesitura más rockera, ofreciendo de nuevo canciones nuevas que estoy seguro que algún día van a adquirir su peso importante en los repertorios de directo del grupo. Me gustó mucho el resultado en directo de “Naturalmente” o ese “La Guarida De Los Gatos” que puso un pelín de calma a la descarga sin tregua que el grupo nos estaba brindando. Un tema en el que disfrutamos de las guitarras de Juan Manuel Loco y Vicente de una manera más sutil. Alguna gamba a aparte, dos hachas que transmiten precisamente esa energía que la banda propaga desde el escenario, sin parar en ningún momento con Nacho acoplándose con su juventud a un ritmo acelerado que le viene de cine.

Curioso resultó el solo de batería de Ismael El Sexi, ya que en estas bandas no suele ser muy habitual. Tal vez era una manera de marcar un antes y un después del inicio de la recta final del concierto, ya que a falta de camerinos sobraba eso de hacerse de rogar. La sencillez marca la forma de ser de Benito Kamelas, reflejado en sus canciones y en un público de los que se hace seguidor para toda la vida, que no les dejó de apoyar ni un segundo al igual que ellos no dejaron espacio para que nos despistáramos con parones. A piñón fijo y metiendo más leña en la caldera llegábamos a “Aquellas Cosas Que Solíamos Hacer”, otra de las que toca la fibra más sensible de su audiencia. Difícil ya de superar en emoción, aunque para competir no fue mala baza “Ayer Soñé”, antes de dedicar con todo el corazón “Valencia Ciudad” a esa ciudad embrujada de la que procede este grupo en un estupendo momento. Pese a que desde hace tiempo podemos decir que su carrera se consolida, aún se percibe una línea creciente entre unos seguidores que cada vez son más y en unos conciertos en los que el grupo sale con nervio, muy lejos de verse acomodados con una situación que les da un importante estatus dentro de las preferencias del personal asiduo al buen rock que conecta con las emociones de una banda con la capacidad innata de transmitirlas y de introducirlas para siempre en su público en actuaciones con un latir muy especial.

 Texto y fotos: ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

MARI JOSE MARTIN (mari@lamiradanegra.es)