CRÍTICA: THE ZOMBIES – BREATHE OUT, BREATHE IN

THE ZOMBIES

(Breathe Out, Breathe In)

8/10

 

 

Pocos discos o ninguno he recibido desde que inicié esta andadura de una banda tan longeva, formada en el año 1961; antes de que estallaran las bandas creadoras de los sonidos que solemos cubrir en esta web y en nuestro programa. De hecho, no es este un disco de metal ni mucho menos. Es más, huele bastante a pop en muchos aspectos, pero la creatividad que engloba me parece más que suficiente para considerarlo un disco recomendable a todas luces. Como se agradece ante la saturación de música que uno se mete entre pecho y espalda, encontrarse con una banda que simplemente atiende a la etiqueta de MUSICA, con mayúsculas y sin más aditivos que el arte derramado en unas canciones.

Tampoco quiero decir con esto que este nuevo regreso de la banda británica sea la quinta esencia, se puede hacer en algún momento algo parado. Sin embargo, si eres metalero, es una buena obra para desintoxicarse de tanto decibelio, porque al margen del metal también hay buena música. Y si simplemente aprecias la música aquí puedes respirarla como aire puro para tus melómanos pulmones. Los temas más rockeros son “Play It For Real” y  “Show Me The Way” donde las guitarras cogen más protagonismo y dureza, mientras que los detalles principales del trabajo en el resto de temas, caso de “Any Other Way” o “Shine On Sunshine” se centran en el omnipresente teclado, conjugado con el sonido de órgano de tal manera que si prestas atención no dejarás de percibir detalles y sensaciones; así como en una excelente conjunción de voces por encima del estilo que es de una brillantez total. Recuerdan en algunos momentos a The Beatles, aunque prefiero quedarme con la magia propia y personal que emerge de estas canciones. El eclecticismo del disco se muestra en la forma en que llegan a tocar el terreno hard rockero en “Another Day”, de los más afines a una vena ochentera que esta gente puede saltarse a la torera porque ellos vienen de 20 años más atrás, y aquí los estilos eran mucho más abiertos e incalificables. Los músicos solo pensaban en hacer música con una mente menos esquemática que en la actualidad.

El trabajo se caracteriza por una sutileza que te invita a descifrar los entresijos de una obra detallista a la vez que sencilla. Incluso se han atrevido con un villancico llamado “Chritmas For The Free” para abrigarnos en esos días del año con un manto de dulzura. Desde luego, The Zombies no han tenido complejos, han regresado de la mano de sus miembros originales Colin Blunstone y Rod Argent con el mérito de ofrecer una nueva obra que perfectamente conserva ese aroma de los 60, con la producción de la actualidad pero con esas sensaciones de aquellos discos que no solo carecían de etiquetas, también resultaban atemporales. Demostrando que la grandeza de la música está por encima del tiempo y del estilo, dando en este aspecto (te guste la obra más o menos) toda una lección al puñado de generaciones emergida posteriormente a ellos.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

INFORMACIÓN ADICIONAL:

Sello: EarMUSIC