BLUE OCTOBER

(Any Man In America)

9/10

 

 

Blue October nos presentan su séptimo trabajo de estudio. Una obra que podemos tomar básicamente como conceptual en la que el cantante, compositor y guitarrista Justin Furstenfeld hace un esbozo de las sensaciones producidas por el fin de su matrimonio y por la batalla por la custodia de sus hijos. Los sentimientos aquí presentes, por tanto, son angustiosos, agónicos, y dan como resultado un disco de lo más introspectivo. Ahora bien, destila tal calidad “Any Man In America” que en nada se me ha hecho difícil de escuchar por su enorme carga de profundidad. Es más, aunque Blue October no sea un grupo que venga del progresivo, los que no se hayan podido tragar los últimos discos de Marillion tal vez deberían darle una escucha a esta obra, porque consigue una conexión que pocos grupos logran cuando se meten en estos terrenos tan exigentes para el oyente.

Una obra que se engloba dentro del art rock, aunque eso se lo dejamos a los más entendidos en esto. Para quien suscribe esto es una obra de música que evoca muy diferentes estilos, porque lo mismo tenemos temas más rockeros como “Drama Everything”, en los que las guitarras cobran un mayor protagonismo, como temas descaradamente poperos, pero de un nivel musical que los hace apetecibles para cualquier amante de la música. Sin ir más lejos tenemos ese inicial “The Feel Again” con unas melodías pausadas, penetrantes y preciosas. Jamás los sentimientos negativos de los que emana esta obra pudieron sonar tan bellos. Y es que es una obra que cuida las formas, los detalles y las siluetas de todas estas canciones.

En un tema como “The Flight (Lincoln To Menneapolis)” se hace una fusión con el hip hop muy acertada. Precisamente continuando con el desarrollo de una obra que nos conduce por unos pasadizos de tormentosa calma es alucinante como en el siguiente y homónimo mantienen la fusión de hip hop, pero la amoldan a un terreno más afín al estilo propio de Blue October, dando un ejemplo de versatilidad y de que los buenos músicos son capaces tanto de amoldar estilos como de amoldarse a ellos según convenga. Eso engrandece aún más esta obra que te recomiendo escuchar de principio a fin, con sosiego y metiéndote en el universo de sensaciones.

Podemos apreciar un tono asequible, pese a la decadencia que acompaña a toda la obra, escuchando temas como “The Chills”, “The Getting Over It Part” o “The Follow Through” con la colaboración de Patricia Lynn de Soldier Thread, que da un toque más de color a una obra que no por intimista suena apagada, ni mucho menos. Se trata de una obra que logra llegar a la complejidad de sacar los sentimientos más profundos y atormentados para colocarlos en un disco que es capaz de trasmitírtelos de una manera totalmente abierta en la que la estética de la música nos hace identificarnos con lo que escuchamos y ver la luz al final del túnel, representada en la voz del niño y el padre del final del disco. Casi como si hubiéramos visto una película o leído un libro, solo que encarnado todo en un puñado de canciones. Un camino tortuoso pero bello.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

INFORMACIÓN ADICIONAL:

Sello: EarMUSIC

Fecha lanzamiento: 26/08/2011