CRÓNICA: SWALLOW THE SUN + OCEANS OF SLUMBER + AEONIAN SORROW
SWALLOW THE SUN + OCEANS OF SLUMBER + AEONIAN SORROW
3 – 05 – 19
Portugalete (Groove)
La noche iba a ser especialmente oscura este viernes en la sala Groove de Portugalete con la presencia de tres grupos de Doom Metal de gran nivel. Tres estilos afines pero a la vez diferentes entre sí, con un denominador común marcado por la densidad, su tendencia atmosférica y a la vez una melodía que los podía hacer a los tres más abiertos a un sector del público no necesariamente orientado de manera exclusiva a estos sonidos.
Eso sí, el público que se dio cita ante el escenario de la Groove fue de lo más selecto. Gente que sabía muy bien lo que iba a ver y que valoró muchísimo cada una de las actuaciones. Actuaciones que no dan para mucha interacción entre grupos y personal, pero que sin embargo cautivó a los presentes sin ningún género de dudas. Y es que las bandas bien merecen todas las alabanzas ante su excelente nivel de calidad y a un sonido limpio que nos permitió disfrutar de las tres descargas.
Aeonian Sorrow aparecieron en escena sin bajista y con los teclados, elemento fundamental en su estilo, disparados. Eso le restó esa sensación orgánica al directo. Sin embargo, no hay que quitarle mérito a la labor compositiva de la banda y a su capacidad para evocar muchísimos sentimientos. La dupla de vocalistas acapara buena parte del protagonismo, creando un contraste brutal entre la agresividad gutural de Ville Rutanen y la sofisticada voz femenina de Gogo Melone, ante cuya calidad solo cabe rendirse. Lo que transmite esta chica y qué gran nivel para hacer fluir su voz.
Cinco temas de su único disco “Into The Eternity A Moment We Are” fueron los que completaron su repertorio. Un repertorio corto con el que dieron buena cuenta de su nivel de calidad para ofrecer una penetrante y oscura sensibilidad con la que erizaron el bello de los presentes.
Otra presencia femenina sería protagonista en el caso de Oceans Of Slumber. Cammie Gilbert es la imagen y el sentimiento de esta banda americana más enfocada hacia el metal progresivo dentro de estas atmósferas que hoy nos llevaban a los ambientes más sombríos de nuestra música. Esto hace que aparte de esa vocalista con tanta capacidad de transmisión y con un limpio registro espectacular haya que sumar el buen nivel de calidad técnica que percibimos en cada uno de los músicos de la banda. Estos sí contaron con el teclado en directo, también un elemento muy importante en su música. Y aunque destaquemos a la vocalista aquí todos los músicos aportan destellos de calidad y ornamentos fundamentales a la hora de trasmitir esas emociones que nos han dejado en tres trabajos discográficos editados hasta la fecha, el último y el que presentaban esta noche “The Banished Heart”.
El grupo deslumbró a los asistentes con altas dosis de calidad, algo que suple una presencia escénica tal vez muy sobria. Pero no dejaron dudas de lo que un grupo como ellos puede aportar al actual panorama del rock a nivel internacional, un paso más allá de lo que pueden suponer lo sonidos del dark y el doom convencional. Encajan perfectamente con sus compañeros de cartel esta noche, pero Oceans Of Slumber se pueden abrir a un público más diverso.
Sí la melancolía e incluso la tristeza son sensaciones que abarca el doom metal, esta la ha sabido reflejar especialmente bien Swallow The Sun en su última entrega “When A Shadow Is Forced Into The Light”. Obra inspirada en la tragedia sufrida por el guitarrista Juha Raivio tras la pérdida de su mujer de manera prematura. De hecho, lo suyo fue un concierto vestido de luto, con una iluminación apenas tenue tras unos músicos encapuchados completamente vestidos de negro que fueron dando rienda suelta a temas de ese último trabajo discográfico y a pasajes de una trayectoria que ya cuenta con 7 discos en su haber.
La intensidad de una calma tensa y decadente fue sembrada sobre nosotros con temas como el homónimo de esa nueva obra, o algunos cortes rescatados de anteriores obras como “Lost & Catatnic” o “Firelights”. Como el fluir de la sangre manando de una herida abierta siguieron con “Cathedral Walls” y “New Moon”, con un Juha Raivio especialmente expresivo. Más incluso que el vocalista Mikko Kotamäki, aunque la sola figura tenue de los músicos como fantasmas en la penumbra del escenario, daba bastante dramatismo ya a lo que Swallow The Sun nos transmitían.
La banda no cerraría su alma para nada, dejando escapar más sentimientos atormentados, pero a la vez de cautivadora melodía, con canciones como “Upon The Water”, “Slone Wings” y “These Woods Breathe Evil”. Tras ello se marchaban del escenario, pero regresarían sin mucha demora para brindarnos dos temas más. Muy agradecidos por un público que supo valorarlos moviendo sus cabezas al cadencioso ritmo de “Emerald Forest And The Blackbird” y un tema tan representativo de mezcla de agresividad y sensibilidad que se esconde en el interior de los sentimientos más profundos de este grupo como es “Swallos (Horror Pt. 1)” de aquel “The Morning Never Come” con el que empezaron a caminar discográficamente allá por el año 2003.
Con ello el público salió plenamente satisfecho de una descarga en la que encontraron lo que iban a buscar. Una transfusión de dolientes emociones recreadas con preciosismo y crudeza por tres grupos magistrales en estos ambientes.
ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)
