CRÓNICA: HORN OF THE RHINO + SHISHA PANGMA
HORN OF THE RHINO + SHISHA PANGMA
Bilbao (Azkena)
30 – 04 – 11
Muy atractivo el tandem de grupos vizcaínos que teníamos la oportunidad de ver esta noche. Dos grupos que coinciden en una andadura bastante extensa que les ha llevado a patearse continuamente nuestros escenarios, donde una banda gana su verdadera reputación. Tal vez porque eso ya lo han conseguido los protagonistas de esta crónica esta noche nos sorprendimos con una estupenda entrada en la sala Azkena. La gente quería rock de calidad, hecho con garra, pasión y personalidad. Para ello tanto Horn Of The Rhino como Shisha Pangma eran dos propuestas infalibles.
Comenzaron Shisha Pangma, que tienen un flamante nuevo disco que presentar de título “Orquídea”. En el se centraron de inicio con temas como “En La Piel”, “Enero”, “El Extraño” y “El Hombre De Arena”, temas con los que también abren el disco que sirvieron para entrar de manera muy rodada en un concierto donde demostraron con un sensacional sonido lo hechos que están como grupo. Perfectamente se podrían encuadrar al nivel de bandas como Eldorado, Vintage o Uzzhuaïa, que están revitalizando el hard rock de clara raíz setentera, con la guitarra muy protagonista. Con esta fluidez pudimos disfrutar del grupo en todo su esplendor, aunque tal vez se hubiera agradecido que el público hubiera dado un paso más hacia adelante, como luego haría con Horn Of The Rhino. Eso hubiera provocado ese calor que los músicos tanto agradecen.
El grupo continuó a lo suyo, descargando un tema de una obra anterior como fue “El Monstruo”, para volver al nuevo disco con el que para mí fue su mejor tema de la actuación:“La Despedida”. “Hombre Menguante” y “En Cuatro Cajas De Cartón” continuaron con la exposición musical de un grupo que estaba dejando bastante marcado su sello personal. Pudo faltar algo más de comunicación, algo más de pose para los más tradicionales, pero estos ya no son unos adolescentes y saben que lo primordial es la música; y en ese sentido, en nada flojeó su descarga. Además, dentro de esa vena clásica el grupo muestra también influencias un tanto más contemporáneas. La versión de The Cult de “Love Removal Machine” demostró de donde le viene ese ligero toque alternativo. Fue una descarga muy consistente de un grupo que con esa nueva obra bajo el brazo se encuentra en un momento en que debe de hacerse oír en más y más gente que, al menos, pueda juzgar lo que hacen. Puedes hacerlo escuchando ese nuevo disco de título “Orquídea” o, mejor, puedes aprovechar la oportunidad de ver uno de sus directos.
A Horn Of The Rhino les había perdido la pista por completo. Tuve oportunidad de verles hace tiempo cuando aún atendían a la simple denominación de Rhino, pero desde hace bastantes años no había vuelto a tener noticias cercanas de ellos. Sí se que quien ha tenido la oportunidad de llegar a su música habla maravillas, sobre todo si está un poco metido en los sonidos más duros del rock. Su indefinición entre el thrash, el doom y el stoner les hace resultar aún más originales, importante para destacar en unos tiempos tan concurridos de buenas bandas. También venían con un nuevo trabajo que presentarnos. De ese nuevo “Weight Of Coronation” eligieron el propio tema de apertura “Speaking In Tongues para presentarse ante nosotros. Con los golpes de batería y ese grueso y distorsionado sonido de las cuerdas del bajo y la guitarra Horn Of The Rhino entraban aplastando lo que pisaban. Estos tres tipos sí que saben hacer ruido, darle sentido y además poner la calidad necesaria.
Comenzamos a balancearnos entre ese sonido oscuro y denso, con riffs descomunales que nutren todos los temas y con una voz que me pareció espectacular: agresiva, profunda y muy potente. Puede parecer desmedida en ocasiones, pero cuando fuerza en las curvas siempre termina retomando el rumbo. Javier Galvez a la voz y la guitarra capitaneó esta maquinaría destructiva. Continuaron con nuevas referencias a su último disco como “Throats In Blood” sin olvidar lo anterior con ese “Chosen” cuyo final thrash después de la densidad doom fue un punto de inflexión en el concierto.
La actuación contó con pinceladas que lo hicieron más completo, como la inclusión del teclado de más clásico sonido solapándose a la bestialidad de “Savoreign”. No fue lo único especial ya que en “Horned Crown” otra colaboración metió un espectacular saxo. Detalles estos de una inmensa calidad que enriquecen mucho lo que hace la banda y que quita cualquier prejuicio sobre lo que entra o no en una música tan dura. Está claro que donde hay nivel todo encaja. Lo que no deja de llamar mi atención es que el grupo no meta solos de guitarra sobre esos riffs. Parece que lo primordial para ellos es la estructura y que las paredes de los temas suenen infranqueables.
Lo mejor de una actuación que fue bordada en lo musical de principio a fin se lo adjudico a “Temple”. El grupo ya había hecho referencia a la buena entrada en la sala y para ese momento ya todo el personal estaba rendido ante ellos. Pienso que este tema fue el de más intensidad en todos los aspectos poco antes de terminar una actuación que dejó nuestros tímpanos temblando. Así dicho parece que sobre todo sobresale la visceralidad y el grosor de este sonido pero, además de eso, exponen muchos más argumentos. Imponentes.
Texto: ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)
Fotos: MARI JOSE MARTIN (mari@lamiradanegra.es)
