CRÍTICA: JASON BECKER – TRIUMPHANT HEARTS
JASON BECKER
(Triumphant Hearts)
10/10
La historia de Jason Becker debe ser por todos conocida, muy bien resumida en el emocionante documental “Not Dead Jet”. Un guitarrista que llegó dejó trabajos de culto junto a Marty Friedman en Cacophony, posteriormente en solitario tras la salida de Friedman para Megadeth y en última instancia con la banda de David Lee Roth, cuando siendo muy joven se le diagnosticó ELA, quedando postrado de por vida sin mover un músculo de su cuerpo. Tan solo los ojos. Con ellos es capaz de comunicarse y también de componer música gracias a una máquina, algo que queda reflejado en este “Triumphant Hearts”, toda una obra de arte que camina por diferentes estilos, pero sobre todo por un espíritu clasicista en sintonía con el rock. Era uno de los estilos que mas gustaba a Jason Becker. Pero no se queda ahí la cosa ya que hay canciones más metaleras o temas más blues como “Tell Me No Lies” o funkies como “We Are One”.
Lo cierto es que esta es una obra maravillosa que trasciende estilos y que refleja la luz que hay en el interior de un hombre que lejos de reflejar una situación tan dura, como la que en principio padece, nos ofrece un disco luminoso que nos alumbra con las abiertas melodías de “Once Upon A Melody” o de una “Magic Woman” donde Uli Jon Roth y Chris Broderick lucen sus guitarras en un tema básicamente clasicista. También toca el soul con Codany Holiday en “Hold On To Love”, precedido de un primer corte ya tan mágico como “Triumphant Heart” con Marty Friedman, Glauco Bertagnin y Hiyori Ojuda.
“Fantasy Weaver” cuenta con Jake Shimanbukuro y la magia se deja notar incluso en los pasajes más desnudos, como el acústico “Blowin´ In The Wind” con Gary Rosenberg, que en la parte central del disco es un oasis de calma y paz. No es que el disco en sí sea una obra dura, todo lo contrario pero tienen múltiples colores sonoros de forma general, siendo este un momento bastante mas intimista. El siguiente es también bastante relajado, sembrando el terreno para el lucimiento de Joe Satriani, Aleks Sever, Guthrie Govan y Steve Morse.
El festín definitivo de la obra llega con “Valley Of Fire”, con una exposición de órdago de más de 9 minutos por parte de Michael Lee Firkins, Steve Vai, Joe Bonamassa, Paul Gilbert, Neal Schon, Mattias Ia Eklundh, Marty Friedman, Greg Howe, Jeff Loomis, Richie Kotzen, Gus G., Steve Hunter y Ben Woods sobre un ritmo bastante flamenco, donde casi se puede uno imaginar unas palmas, pero dando pie a unas guitarras eléctricas de lujo que estiran esas notas hasta el infinito y más allá.
Podía ser un colofón ya ideal para una obra que hasta aquí ya contiene nueve temas de una brillantez insuperable, pero luego se adentran de nuevo en un terreno más minimalista con Trevor Ravin apareciendo en “River Of Longing”, recuperando las sensaciones acústicas con el apoyo de teclas dejando un resultado entrelazado lleno de pinceladas de color y dibujando en nuestra mente belleza, la pieza va creciendo y ganando vida a medida que avanza.
La obra aun nos presenta el rockero “Taking Me Back” y el bluesero “Tell Me No Lies”, con una revisión de “Hold On To Love” con el remix de Chuck Zwicky y la outro “You Do It”, colofón a un disco que deja bien a las claras la creatividad de Jason Becker, un músico al que el impedimento de ejecutar con su propia guitarra estos temas no le impide inspirarse para que otros dibujen con notas musicales lo que sale de una desbordante imaginación. Obra luminosa de un nivel compositivo tremendo con una emoción perfectamente captada por los músicos que han plasmado todo el color de una música inmensamente rica en matices.
ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)
INFORMACIÓN ADICIONAL:
Sello: Top Artist Promotion (www.topartistpromotion.com)
Fecha de lanzamiento: 7 de diciembre de 2018
