CRÓNICA: VIII ZOMBIE JAIALDIA

VIII ZOMBIE JAIALDIA

Stormwarrior + Ad Eternum + Blast Wave + Unbound

15 – 11 – 19

Donostia (Larratxo K.E.)

Lluvioso fin de semana en las fechas en las que nos acercamos a los días más cortos del año, el ambiente ideal para disfrutar un año mas del Zombie Jaialdia, que en estas fechas alrededor de Halloween viene teniendo lugar ya por octava edición consecutiva. Contaba el festival con dos jornadas bien diferenciadas por estilos, siendo la del viernes más power metalera y la del sábado orientada a los sonidos oscuros y extremos del metal.

Dada la climatología y un atasco a la salda de Bilbao me fue imposible ver a Unbound, llegando ya para presenciar la presentación en directo del nuevo disco de los locales Blast Wave “Mil Rostros”.

Su bajista tuvo que actuar sentado, debido a algún problema físico que sin embargo no fue óbice para que aportara tanto con instrumento como en coros lo que el grupo necesitaba. Incluso en algún momento dado se pondría de pie, sin abandonar el sitio. Y es que la banda en conjunto nos brindó con todo su entusiasmo esos nuevos temas unidos a algunos de su anterior “Renacer”.

Contaron con el apoyo de unas pantallas laterales que visualmente dieron bastante juego mientras desplegaban temas como “Hasta El Final” y “La Verdad”, presentando una nueva obra a la que le costaba encontrar la respuesta de sus temas ya conocidos como el homónimo “Blast Wave”, que fue respondido por un personal no excesivamente nutrido en esta primera jornada del VIII Zombie Jaialdia. En la siguiente jornada se doblaría la asistencia de público

Repitieron esquema con dos nuevos temas como “Hasta que Te Vuelva A Ver” y “Promesas”, de nuevo encontrando más respuesta en un “Resistiré” que supone un clásico ya para ellos y su parroquia al igual que “Destrucción” y el ultimo “Renacer”, que al menos de momento parecen tener más gancho que los nuevos “Mil Rosotros” y “Tras La Tormenta”, a los que habrá que darles tiempo.

El ambiente gélido de la calle se trasladó al interior del Centro Cultural de Larratxo, algo con lo que tuvo que lidiar Ad Eternum, que siguen presentando su destacado debut “Dogma”. Pese a que les costara llegar a conectar con el público la banda cuajó una gran actuación.

Parece ser que han encontrado definitivamente batería, puesto que tenían vacante y donde el pluriempleado de la escena vizcaína Cobelo les había estado echando un cable. El puesto definitivamente lo ocupa el también batería de Blast Wave Mikel Iragui que esta noche haría doblete.

Al igual que ocurriría con los predecesores no contaron con el mejor sonido, pero sí con la mejor actitud para mostrar la buena colección de canciones recogidas en su primer disco, temas con estribillos de los que surten efecto en los directos a nada que la gente los vaya conociendo. Estos fueron cayendo junto con algunas versiones que Patxa amenazó con no tocar si el personal no se las ganaba. El caso es que más por generosidad que porque se cumplieran las exigencias del vocalista ellos ofrecieron “Anytime Amywhere” de Gotthard en el inicio del concierto y “I Want Out” de Helloween en una recta final con el personal algo más receptivo.

Entre sus temas “Dogma” fue a mi modo de ver el mejor momento de su descarga,  aunque himnos como los primeros “Guardián Entre Las Sombras” o “Caballero Inmortal” dejan una huella que les hace acreedores a perdurar en el tiempo si les das la oportunidad de entrar por tus oídos. Temas que además la banda defiende con plena fidelidad a lo recogido en estudio. “Sigo Aquí” fue aprovechado para que por fin los asistentes se metieran un poco más en la descarga.

A lo que se sumaría todo el mundo en el final “Ravel” sería a mantener un gran globo por los aires en ese tema tan especial y que tanto juego le da a la banda en directo, finalizando con ese aire circense como agradecimiento natural a los que han asistido a la actuación y que a su vez debe devolverse a una banda que puso todo de su parte.

Dentro de una tardía generación de bandas de power metal al más puro estilo alemán podemos encajar a Stormwarrior, que eta noche recalaban en Donosti para presentar su nuevo disco “Norsemen”, que oficialmente se editará este próximo 29 de noviembre. Pero ya aprovecharon la ocasión para presentarnos nuevos temas como “Freeborn” y “Odin´s Fire”, que para regocijo de los más puristas y apisonados de los primigenios Helloween o Running Wild, influencias nada disimuladas de Stormwarrior, mantiene la misma esencia que la banda ha defendido a lo largo de su trayectoria desde 1998 con 6 discos en su haber de doble bombo y velocidad endiablada.

En este aspecto se pudo hacer su descarga un tanto monótona, pero no cabe duda del buen nivel expuesto por estos músicos dentro de un estilo intencionadamente muy concreto. Los juegos de guitarra del líder y miembro fundador Lars Ramcke con Björn Daigger dieron frutos tan brillantes como “Ragnarök”, ya en la parte final concierto.

También cabe destacar la incansable y compacta base rítmica de Falko Reshöft en la batería y el veterano Yenz Leonhardt en el bajo, músico danés que merece un capítulo aparte por su extensa trayectoria, aunque sea un músico bastante en la sombra. Pero este hombre formó parte de bandas en algún momento puntual como Saxon, Iron Savior o Savege Circus y también ha sido músico de directo con Lacrimosa o Kingdom Come. Aunque lo que más llama la atención es su participación en lo que fuera el germen de Mercyful Fate, Brats, en 1979 donde militara al lado de Hanks Shermans, Carsten Van Der Vlsing y King Diamond. La verdad que tiene historia este hombre.

La banda tira de piezas ya para ellos clásicas que nos llevan a su debut homónimo y que dejan bien clara una fe metalera impresa en títulos como “Defenders Of Metal”, que dejan clara cuál es su filosofía de vida. De aquel debut destacado también resaltó un veloz, como no podía ser de otra manera, “The Axewielder”. Levantar el pie del acelerador parece estar prohibido para este cuarteto.

“Metal Legacy”, del recurrido en su repertorio “Heading Northe” fue otro de estos exponentes de una banda que de forma general tira hacia sus trabajos más antiguos, con temas como “Heavy Metal Fire”, “Sons Of Steel”, un destacado a nivel de ejecución por parte de unos destacables músicos “Lindisfarne” o el propio “Heading Northe”.

Resulta llamativo que de sus dos obras anteriores a la inminente nueva referencia no tocaran nada, yéndose ya una década atrás para confeccionar junto a ese par de nuevos temas un repertorio de 13 canciones que se cerraría con “Iron Prayers” e “Into The Battle”, curiosamente un último tema que a nivel rítmico seria de lo más reposado de una banda que ante todo se caracteriza por la velocidad de la más pura y vieja escuela del power metal de marca alemana, saciando las expectativas del público más inmovilista y tal vez haciéndose un poco repetitivos para quien tenga el cupo de bandas de este estilo ya cubierto. Pero independientemente de ello, una banda que sabe desenvolverse a un gran nivel en este ámbito.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)