CRÓNICA: EVERGREY + BLOODRED HOURGLASS + GENUS ORDINIS DEI

 

EVERGREY + BLOODRED HOURGLASS + GENUS ORDINIS DEI

30 – 03 -19

Villava, Navarra (Sala Totem)

 

 

No sé si me equivoco demasiado en cuanto a fechas, pero creo que fue dentro del primer lustro de este nuevo milenio cuando quedé prendado de Evergrey en las dos oportunidades en que pude verles en vivo. Eran tiempos en los que la banda de Tom S. Englund vivía sus mejores años, dejando obras maestras como “In Search Of Truth”, “Recreation Day” o “The Inner Circle” y directos que reflejaban la magia de la banda en vivo cono “A Night To Remember”. Había llovido bastante desde que no se me presentaba una oportunidad como esta para verles, con lo que pese a lo plagado de eventos que teníamos el día por el norte la elección, al menos para mí, era clara.

GENUS ORDINIS DEI
GENUS ORDINIS DEI

En esta ocasión venían presentando “The Atlantic”, trabajo que cierra la trilogía oceánica iniciada con “Hymns For The Broken” y continuada con “The Storm Within”. Una época marcada por el regreso a la formación tras algunos años fuera de miembros tan emblemáticos como el guitarrista Henrik Danhage o el batería Jonas Ekdahl, con la entrada también en aquel mismo 2010 de Johan Niemann en el bajo. Los músicos, que junto al teclista Rikar Zander, acompañan con excelente simbiosis al alma de este grupo Tom. S. Englund. Un músico de los que sigo pensando que a día de hoy no ha alcanzado el reconocimiento merecido a su talento y trayectoria.

GENUS ORDINIS DEI
GENUS ORDINIS DEI
GENUS ORDINIS DEI

Esta cita nos dio la oportunidad de conocer a dos bandas acompañantes que se quedaron un poco extremas al lado de los suecos. Desde Italia Genus Ordinis Dei nos presentaron su death metal melódico. Su oscuridad era lo único que les podía emparentar con los cabezas de cartel.

GENUS ORDINIS DEI
GENUS ORDINIS DEI

Sonaron bastante bien, eludiendo en este aspecto ese papel de conejillo de indias que a veces los técnicos juegan con el grupo que abre la noche. Su carácter sinfónico les hace muy recomendable que se hagan con un teclista para no disparar tantos sonidos en directo. Pese a este apunte no me parecieron en absoluto una mala banda, dejando constancia en este directo de todos sus trabajos editados hasta la fecha: dos discos, un EP y el single de la versión de “Hail And Kill” de Manowar, a la que le han dado bastante la vuelta, cómo mínimo como para no dejar indiferente a nadie.

BLOODRED HOURGLASS
BLOODRED HOURGLASS

“You Die In Roma” y “Halls Of Human Delights” representaron su último largo “Great Olden Dynasty”, mientras que “Embracing The Earth” y “Red Snake” hicieron lo propio con su homónimo EP anterior y “Roots And Idols Of Cement” con su debut discográfico “The Middle”. Entusiasmo y actitud no les faltó.

BLOODRED HOURGLASS
BLOODRED HOURGLASS

Tampoco a los siguientes Bloodred Hourglass. Unos fineses que no tardas es comparar con sus paisanos Children Of Bodom, aunque también sacan a relucir algo de death melódico. Sonaron con más nervio que sus predecesores estando de nuevo alejados de la limpieza y elegancia de los cabezas de cartel, algo que pudo hacer menos efectiva su presentación ante el público que iba poblando la sala en mayor medida.

BLOODRED HOURGLASS
BLOODRED HOURGLASS

Tampoco generaron mayor entusiasmo, pero defendieron su propuesta fundamentalmente con temas de su último trabajo “Heal”, donde se recogen piezas como “Quiet Complain” o “The Last Of Us”, tal vez de lo que más destacaría de su incendiaria descarga.

BLOODRED HOURGLASS
BLOODRED HOURGLASS

Creo que a su estilo le falta algo más de originalidad para destacar en estos tiempos, aunque se desenvuelven con soltura en esa línea de voz extrema con reminiscencia del heavy metal tradicional y con unos ornamentos sinfónicos que también fueron disparados, algo que le resta espectacularidad al directo.

EVERGREY
EVERGREY

Con Evergey las pasiones sí que se desatarían entre los presentes. Al margen de que se respiraban muchas ganas de verles la banda supo también ganarse al público con su calidad y con la pasión que le imprimen a sus canciones, fundamentalmente un Tom Englund que sigue siendo puro corazón en escena. Un corazón que transmite con sosiego pero plena sinceridad a través de su voz, bien empastada en un progresivo tan gótico como el suyo, con la envoltura que todo el conjunto sabe darle a unas canciones que no por sombrías carecen de un brillo que les hace resaltar al más alto nivel entre los grupos internacionales.

EVERGREY
EVERGREY

Y por lo escuchado sigue siendo así en el caso de los temas de su último “The Atlantic”, con el cual empezaron con el extenso “A Silent Arc” y el siguiente “Weightless”, precedidas casi a modo de intro de “Panama” de Van Halen. Menudo contraste. Las nuevas piezas se ganan en seguida al público tradicional de la banda, por su estilo inconfundible y esa emoción que es marca indistinguible del grupo.

EVERGREY
EVERGREY

Con “Distance” y “Passing Through” nos pasábamos al capítulo anterior de la trilogía y en ese orden cronológicamente inverso continuábamos con el siguiente “The Fire”, con el que seguían repasando los últimos trabajos, funcionado a pleno rendimiento y poco a poco ganándose a todos los seguidores, que irían cada vez levantando más el puño y entonando más sus gargantas.

EVERGREY
EVERGREY

Cada vez más hacia atrás en el tiempo seguíamos avanzando con “Leave It Behind Us” de “Glorious Collision”. Este orden inverso se rompería con “Black Undertow”, con el que retomarían la trilogía, a la que le seguirían dedicando la práctica totalidad del concierto antes de llegar a los bises. Y es que antes de estos nos interpretarían “My Allied Ocean” y un “All I Have” cuyo misticismo en directo cautivó hasta alcanzar tintes de ritual ver a toda la sala entonando ese sencillo estribillo.

EVERGREY
EVERGREY

“The Grand Collapse” retomó la descarga tras unos instantes fuera del escenario, algo que nos hacía presuponer que la actuación se nos iba a hacer corta, como finalmente así sería. Pero no por ello se deja de valorar la emotividad y la calidad con la que la banda interpretó sus canciones, llegando al momento de los clásicos con “Recreation Day”. Tras ello el tramo de bises será partido por un solo de teclado de Rikar Zabder seguido de otro de guitarra de Henrik Danhage, que de por sí ya demostraron bastante en la ejecución de las canciones, así que no sé hasta qué punto resultó necesario.

EVERGREY
EVERGREY

Supongo que la gente recordará mucho más canciones como “A Touch Of Bleesing” o “King Of Errors” con los que terminaron. Tal vez faltó algún clásico más como “The Masterplan”, como me comentó alguien con buen criterio tras la actuación. Pero, aunque uno siempre quiera que estas noches para recordar duren más tiempo, lo que no faltó fue el sentimiento envuelto en ese manto oscuro tan elegante como pleno de calidad con el que Evergrey nos ha obsequiado siempre.

Texto y fotos: Antonio Refoyo (antonio@lamiradanegra.es)