CRÍTICA: BOOBOLOGY – EXTINCTION LEVEL EVENT

BOOBOLOGY

(Extinction Level Event)

8/10

Se ha hecho de rogar este tercer disco de Boobology, banda a la que he tenido la fortuna de seguir desde su primer disco editado en 2009 “The Paradox”. Entonces el metal alternativo de la banda se mostraba aun un tanto incompleto, pero me dejaron una sensación de crecimiento en el siguiente “The Earth The Day Stood Still” de 2012. Desde entonces han necesitado 5 años. Una espera que ha merecido mucho la pena si atendemos a un trabajo que tal vez ya no solo sea reflejo de una progresión, sino la culminación de lo que la banda siempre ha querido ser. Vamos que con “Extintion Level Event” han dado en la diana y han creado un disco de los que apuntan consolidación de una banda que ya no es flor de un día. Una banda que no debería quedar simplemente como uno más de los que lo intentaron. Ellos han logrado dentro de su metal alternativo dar forma a un sonido que por su fuerza me hace acordarme de Disturbed, aunque por su profundidad Tool parece una clara referencia. Pero que intuyamos esas raíces no significa que la banda no desprenda una abrumadora personalidad.

“One By One” es un buen ejemplo de la alternancia de sensibilidad y agresividad, separadas por un fino hilo que nunca sabes cuándo se va a sobrepasar para un lado u otro. Las guitarras son duras, pero crean un ambiente hipnótico que atrapa y el trazado vocal me parece perfecto para transmitir el sentimiento requerido en cada tema. Sin llegar a hacerse enrevesados, han adquirido un tinte más progresivo, como apreciamos en canciones como “Dead Birds” o “Empty”. O incluso en el final con “Solstice”, donde se apoyan en las guitarras de Adan Bautista. Otro de los temas más detallistas de la obra es “The Last Song” con unas pinceladas corales y algunos arreglos que dan más sinfonismo a una obra que se pasa muy rápido pese a su hora de duración, aspecto en el que también se han superado en este disco. Han mantenido una personalidad y un estilo, pero le han dado mayor dinamismo, cortes como el industrial “Strigoi” ayudan a ello, pero no hay desperdicio en la dulzura y la dureza del siguiente “The Spiral”, o en el amargo regusto de “Dirty Promises”, donde siguen haciendo aflorar emociones como buenos músicos que son. Pero no por tecnicismos, sino porque en cada momento de la obra son capaces de tocar la tecla concreta de nuestro subconsciente para provocar algo en nosotros. El elaborado homónimo de la obra es otro claro ejemplo, pero tampoco hay desperdicio en “Here Comes The Storm”, “Falling”, “Selfdestructive” o “Gone”, un cúmulo de sensaciones aflorando desde una profundidad que puede ser tan apaciguadora como tormentosa, tan intimista como explosiva. Ni la revisión de “Preach” como bonus track deja de tener un gran interés.

Han dado un salto importante, desarrollando algunos aspectos que en pasados discos aun quedaban un tanto latentes. Su profundidad embauca, pero no dejan de pegar fuerte con muy buenos riffs metaleros, encontrando en cada nuevo paso aspectos y detalles que te invitan a volver a darle al play. Los matices pueden cambiar de prisma en cada escucha y siempre puede habérsete pasado algo por alto. Eso es madurez y riqueza musical.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanera.es)

INFORMACIÓN ADICIONAL:

Sello: B&B Records