CRÓNICA: SÖNAMBULA + EUPHORIC + OSSYRIS

 

SÖNAMBULA + EUPHORIC + OSSYRIS

13 – 05 – 17

Barakaldo (Edaska)

 

 

Tres grupos de estilos completamente diferentes nos trajeron esta noche de sábado a la sala Edaska de Barakaldo. Un cartel por el cual cabe felicitar a la gente de Butarock y de Poyorock, que se tiraron a la piscina apoyando el metal desde una perspectiva tan abierta como acertada, a mi modo de ver. Y es que nada tiene que ver el heavy metal melódico de Ossyris, con la personal derivación thrash con múltiples matices de Euphoric y el doom death de Sönambula, que entrarían en sustitución de los anunciados en un principio Dominium.

OSSYRIS
OSSYRIS

De forma injusta el público no respondió como es debido a la propuesta. Bien por saturación de conciertos, por otro tipo de historias personales o por puro pasotismo, el caso es que la sala Edaska se quedó muy por debajo de lo merecido por las tres bandas que, por su parte, brindarían tres excelentes actuaciones con un sonido fantástico y una actitud encomiable.

OSSYRIS
OSSYRIS

Comenzaron los locales Ossyris, a los cuales he venido siguiendo de manera intermitente desde sus inicios, casualmente el mismo año 2003 en que quien suscribe comenzó a hacer radio junto al que entonces fuera su guitarrista, David Gallardo. La banda me ha ido demostrando en cada nuevo avistamiento que han mejorado bastante su propuesta de power metal, que no deja de ser exigente.

OSSYRIS
OSSYRIS

El preciosismo de esas melodías, los arreglos que atesora y la elaboración de las canciones supone una ambición por parte de la banda que poco a poco se va acercando al objetivo marcado desde un principio. Lo han dejado plasmado en su última obra hasta la fecha “Renacer”, que copó la mayor parte de su set list.

OSSYRIS
OSSYRIS

Tras varios cambios en la formación, permanecen firmes tirando del carro los fundadores Mikel De Las Heras a la guitarra y Javi Marquez en la batería. El cambio más sensible lo han tenido en la voz, dando con el acertado fichaje del experimentado Jonathan Lucer, completando la formación Iker Galante a la otra guitarra y un Jonathan Gonzalez al bajo, que pese a estar normalmente un paso por detrás de la primera línea de guitarras y voz en un escenario que permite muy poco espacio, lo cierto es que no solo da empaste al sonido de la banda, sino que sobre un escenario sabe vivir estas canciones.

OSSYRIS
OSSYRIS

“Mil Veces”, “El Cuervo”, “Anhelo” y “Amo Y Señor” demostraban que iban a defender a capa y espada su nuevo disco, dando paso a un “Siempre Seguiré” de su EP “Nuevo Mundo”. La banda se mostraba suelta en escena, dejando notar que han adquirido tablas y experiencia.

OSSYRIS
OSSYRIS

“Hasta El Final” fue otra demostración de lo recogido en “Renacer”, aunque no dejaron de lado su debut del 2009 “Se Acerca El Final” con “En El Silencio De La Oscuridad”. Lejos queda ya su primera maqueta, con la que recuerdo conciertos donde pese a su incipiente carrera musical por aquel entonces montaban unas fiestas entre amigos donde se coreaban las canciones como si fueran grandes himnos. Ahora la banda es mucho más profesional, se ve más hecha, pero sin embargo no alcanzan aquel poder de convocatoria, al menos en esta noche. No sé hasta qué punto tendrá la culpa haber tocado en Bilbao como teloneros de Vhäldemar gratis la noche anterior.

EUPHORIC
EUPHORIC

“Gure Lehia” me pareció el mejor tema de su descarga, y eso pese a que a Jonathan le costó la parte en la que colabora en el disco el genial Mikel Bizar. Por suerte o por desgracia para él, esa noche hubo algún gallo que tuvo bastante más repercusión mediática. Eso sí, muy buen apoyo por parte de Mikel con sus registros agresivos.

EUPHORIC
EUPHORIC

El medio tiempo “Cielo Azul” y el cañonazo “Renacer” ponían punto y final a la descarga de los vizcaínos, que con prácticamente tres lustros de experiencia dejan notar los resultados en este continuo camino evolutivo que es la música. Fieles a su estilo inicial y buscando un mayor perfeccionamiento que, sin duda, van logrando.

EUPHORIC
EUPHORIC

Respeto a cualquiera que se sube a un escenario a dar lo mejor de sí, pero creo que hay ocasiones en las que hay que destacar especialmente a una banda cuando da el 200% de lo que tiene. Es lo que hizo Euphoric en una actuación memorable para los que tuvimos la suerte de verles. Los tolosarras consiguieron que un concierto íntimo pueda permanecer en nuestro recuerdo incluso por encima de acontecimientos musicales que, a la postre, brindan menos emociones que las expuestas sobre el escenario de la Edaska por su parte

EUPHORIC
EUPHORIC

Casualmente ellos también vienen funcionando desde 2003, solo que hace algún tiempo tuvieron que cambiar su nombre original de Agoraphobia por el actual. Habían editado recientemente un disco de estudio titulado “Nada Vale Nada”, pero lo que realmente me parece una carta de presentación verdaderamente consistente es “Trascendiendo Desde El Infierno”. Un directo editado hace unas semanas registrado en la última edición del Metal Norte en la sala Niessen de Errenteria.

EUPHORIC
EUPHORIC

Y es que quedó constatado que la banda tiene su punto fuerte cuando se suben a un escenario. No serán de los grupos más técnicos, pero han encontrado un estilo personal y les sobra fuerza, garra y entrega. No se reservaron ni una sola gota de sudor en su actuación, algo que cabe destacar mucho más en este tipo de conciertos más en familia, demostrando que verdaderamente creen y sienten lo que hacen. Y lo defienden con uñas y dientes.

EUPHORIC
EUPHORIC

Tras algunos cambios de formación, la actual se mostró como un cuarteto aplastante. Con los tradicionales Miguel Salas en la guitarra y la voz y Juanjo Zunzunegi en la guitarra aportando ese sonido áspero y particular. El primero también posee una forma de cantar que no pasa desapercibida y que acaba por dotar de originalidad a una propuesta nada sencilla de encasillar. Eduardo Miguel en la batería fue un seguro sobre el que apoyar este robusto sonido y Jon Ceberio es un espectacular bajsta que no para, que se come el escenario, se tira al suelo, salta, se mezcla con las primeras filas del personal… Los cuatro nos dieron una lección de lo que es poner todo alma en esto.

EUPHORIC
EUPHORIC

Su repertorio no solo se centró en los temas más nuevos, sino que tiro de algunos temas de la época de Agoraphobia, comenzando sorprendentemente con “Reflexión” y desgranando temas como “Virus” o “Franja De Gaza”.  Personalmente me quedo con canciones como “Mientras Una Madre Llora” o “Los Ojos De La Realidad” como de lo mejor de su repertorio, aun en la fase inicial; pero no hay que desmerecer para nada un rabioso “Condenados A La Vida” o el sentido “Ángel Caído”. “Un Segundo Por Vivir” dio paso a “Nada Vale Nada”, para cerrar con un medley de temas de Metallica, con el arranque de “Orion”, un pasaje de “For Whom The Bell Tolls” y la parte cañera de “One”.

SÖNAMBULA
SÖNAMBULA

Un final rompedor con Jon y Juanjo acabando fuera del escenario, sin reservas de ningún tipo. Una forma de afrontar el directo que demuestra la nobleza de Euphoric y que engrandece su propuesta. Porque no solo se trata de lo que haces, sino cómo lo expresas y lo defiendes para ganarte a quien tienes delante. En este aspecto ellos fueron todo un ejemplo esta noche.

SÖNAMBULA
SÖNAMBULA

Nuevo viraje cuando ya nos sumergíamos más allá de la media noche. Pues si se trata de adentrarse en la oscuridad pocos grupos mejores para ello que Sönambula. La banda liderada por el experimentado Rapha Decline en la guitarra y voz  que junto a la ex de Penadas Por La Ley, Maider, a la batería, crearon esta banda oscura como lo más profundo del mismísimo infierno.  Definitivamente y tras cambios siempre en el puesto de bajista, parece que el trío se asienta con la entrada de Errapel, que se mostró colosal en ese puesto.

SÖNAMBULA
SÖNAMBULA

Pese a su propuesta densa y penetrante la banda enganchó a los que se quedaron en la sala Edaska hasta última hora, fundamentalmente con temas de su debut “Secuela”. Una obra donde el propio Rapha hace algún guiño a su pasado como uno de los pioneros del metal extremo por tierras vizcaínas. Allá por el 94 fundaba los aun recordados Typhareth, a los cuales hizo referencia al presentar el tema de idéntico título recogido en su obra con Sönambula.

SÖNAMBULA
SÖNAMBULA

Pero la noche traería sorpresas. Aparte que se dijo que el audio quedaría registrado, no se si con intención de editar algo en el futuro, la banda presentó ya algún nuevo tema. Tan nuevo que aun no tiene ni título, como nos dijo Rapha.

SÖNAMBULA
SÖNAMBULA

Aparte de eso no sumergimos en el asfixiante ambiente de un excelente grupo en esta tesitura con temas como “Luna Del Desierto”, “Satanás”, “Esperpento”, “Lascivia” o “El Laberinto De La Musa Verde”, que tiene uno de los riffs más envolventes y característicos de su estilo. El descriptivo “Nido De Suciedad” serviría como resumen de este cavernoso sonido, surgido desde el subsuelo.

SÖNAMBULA
SÖNAMBULA

No serán la propuesta más accesible, pero logran recrear lo que tienen en mente. Esa ambientación que hace el aire irrespirable, unida a la misma presencia de un grupo que rezuma un aura completamente añeja dentro del metal extremo, desde la misma pancarta que el grupo colocó para adornar el escenario de este Sótano que es la sala Edaska ideal para acogerles. El ambiente propicio para invocar espíritus malignos. Ahí es donde ellos se sienten cómodos.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)