CRÍTICA: SKUNK D.F.

SKUNK D.F.

(Pigmalión)

8/10

Pienso que hay un conjunto de grupos que deberían haber sido los que, al menos a nivel estatal, hubieran cogido ese tan ansiado y mencionado en estos tiempos relevo generacional en esto del metal. Para ello se requiere además de calidad, ser una banda capaz de aportar algo distinto, tener personalidad y ser original. En este aspecto creo que Skunk D.F. es una de las bandas que deberían ser, tras más de 20 años de constancia en su trabajo y de canciones siempre sinceras y de sentimiento abrumador, uno de los grandes. Pero me reafirmo una vez más en que en esto de la música la originalidad rara vez se premia y demasiadas veces se castiga.

No es que los madrileños dejen de tener una legión de seguidores fieles que les garantizan el aliento y apoyo allá donde vayan, pero aun así siempre me parece que eso de banda infravalorada hay que aplicarlo demasiadas veces, sobre todo cuando no te encajonas en un terreno concreto de la música y eliges tu propio camino.

Pese a ello no quiero ponerme pesimista, porque lo cierto es que la banda continúa activa con fuerza, editando un nuevo trabajo como este “Pigmalión” que les insufla salud para el presente. No voy a decir que estemos ante el mejor trabajo de su carrera, pero no se deja de percibir en cada uno de estos 11 cortes la misma sinceridad y sentimiento, bajo las características señas de identidad de la banda que les distinguen del resto y que uno siempre se alegra de volver a encontrar en cada disco.

No hace falta ir mucho más allá para corroborarlo con el liberador “Arde”, un inicio que da paso a una conjunción de guitarras muy fuertes, recordando los principios del grupo, en “Salvaje”, aunque con unas melodías vocales más actuales. Cierto es que Germán parece romper y rasgar la voz en este disco más que en los inmediatamente anteriores, buscando aunar matices muy dispares. Podemos también apreciarlo en el siguiente “Los Niños Siguen Perdidos”, pasando a una parte central del disco más detallista y profunda, como apreciamos en “Imparable”, antes de un pulido “El Chico De Las Estrellas”.

Las guitarras siguen reinando en “Samsara”, corte intenso donde Germán vuelve a darle matices a una voz que intenta insuflar rabia y melodía fusionadas. “Terrorismo Emocional” me ha parecido de los cortes más significativos del disco, hiriente en su expresión, precedido de la intro hablada “Aléjate De Mi”. Desgarrador, pero a la vez con muchos elementos ornamentales que le dotan de cierta introspección. Y más fuerza tenemos en un agresivo “Adóptale”, dando un respiro en la sutileza de “Golem” y terminando sin dar tregua con un tema elaborado que tiene muchas de la facultades unidas de Skunk D.F. “Algo Grande”.

No desfallecen Skunk D.F. en su carrera. Y no lo digo en ningún sentido como si fuera una banda que a estas alturas se siga moviendo por la inercia. Siguen plasmando verdadera emoción en sus trabajos, siguen poseyendo un sello característico y encuentran la manera de ser fieles a sí mismos y lograr sonar frescos en una recomendable nueva obra como “Pigmalión”, con una inquebrantable credibilidad.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

INFORMACIÓN ADICIONAL:

Sello: Maldito Records