CRÍTICA: GARY HOEY – DUST & BONES

GARY HOEY

(Dust & Bones)

9/10

Pudo entrar en la banda de Ozzy cuando entre los seleccionados para la audición el madman decidió quedarse con Zakk Wilde. Tras ello el guitarrista americano inició una carrera en los duros noventa, con el auge del grunge enterrando a los músicos como él, de escuela más tradicional. Sin embargo, eso no le ha impedido llevar una larga y brillante trayectoria cuya última referencia es este “Dust & Bones”. Un trabajo con una engañosa orientación bluesera, puesto que si bien el inicial “Boxcar Blues” nos lleva por esos terrenos y el siguiente “Who´ss Your Daddy” se vuelve un rock movido y completamente tradicional, la obra no deja de tener piezas con un punto más endurecido y hard rockero, como el caso de “Born To Love You” o el homónimo “Dust & Bones”.

El guitarrista saca mucho brillo y matices a una guitarra que no se encasilla en ningún terreno, que no para de funcionar y de ofrecerse, con los toques slade en el homenaje a Johnny Winter “Steamroller” o el aroma a blues de poso más actual en un “Coming Home” con la colaboración de Lita Ford de sorprendente resultado. Para volver a las raíces ya dejan para más adelante temas como “Back Up Against The Wall” o un “Blind Faith” con cierto toque country.

Pero como el disco no deja de virar, no hay que perderse piezas de rock duro tan elegantes como “Ghost Of Yesterday”, y la un tanto más pausada “This Time Tomorrow”, terminando con un virtuoso “Soul Sufer”. Si bien el guitarrista demuestra a lo largo de todo el disco el tremendo colorido que con absoluta pulcritud pueda sacar a su guitarra. Su música nace en el rock & roll más tradicional, late con el sentimiento del hard rock y fluye con el alma desgarrada del blues. Todo un discazo que acumula múltiples y variadas experiencias en torno a la amplitud de esos sonidos.

ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

INFORMACIÓN ADICIONAL:

Sello: Top Artist Promotion (www.topartistpromotion.com)

Fecha de salida: 29 de Julio de 2016