MANOWAR + HOLYHELL + DIABULUS IN MUSICA

MANOWAR + HOLYHELL + DIABULUS IN MUSICA

10 – 09 – 10

Durango (Feria de Muestras)

MANOWAR

Esto es comenzar la temporada con fuerza. En un mes en el que todavía no suele ser habitual que pasen por aquí grandes giras, aun con la resaca de los festivales veraniegos e incluso con ganas de más conciertos al aire libre (que todavía es época), nos topamos de lleno con los Reyes del Metal esperándonos a la vuelta de vacaciones en nuestra propia casa. El lugar elegido para el concierto no es uno de los puntos habituales en Bizkaia, pero debemos ir acordándonos de la Feria de Muestras de Durango, puesto que por aquí antes de final de año también pasarán otros grandes como Alice Cooper y Motörhead. Los más metaleros tradicionales hemos echado en falta este verano un festival con nombres como estos y, para nuestro regocijo, parece que lo vamos a ir recibiendo a plazos en los próximos meses, ya que a estos hay que sumar nombres como Pretty Maids, Apocalyptica, Joe Satriani… Son muchos, buenos e importantes los conciertos que se comprimen en cuatro meses que nos quedan de 2010, así que podemos celebrar con motivos este final de año.

DIABULUS IN MUSICA

Pero lo que ahora nos ocupa es esta concentración true metalera en la que Manowar convierten sus conciertos merced a su propia actitud y pose labrada durante tres largas décadas. Por sorpresa nos pilló la presencia en el cartel de Diabulus In Musica, una banda navarra de la que se han oído maravillas últimamente. La tempranera salida a escena de la banda hizo que no pudiera disfrutar de ella íntegramente, pero doy fe de que el ambiente estaba bastante caldeado a eso de las 7:45 con el grupo aprovechando su escaso tiempo para presentarnos su propuesta sinfónica mezclando voz agresiva con la melódica y lírica voz femenina de Zuberoa. Sí ya se que esto lo hemos visto mucho en los últimos años, pero a tenor de lo que pude percibir, estos chicos lo hacen tan fantásticamente, llegan a ser técnicamente tan pulcros y compositivamente tan elaborados, que destacan. No sonaron nada recargados, no saturaron el sonido a pesar de su ampulosidad. Pusieron los puños en alto recibiendo el apoyo de la concurrencia a una propuesta siempre arriesgada que demostraron tener capacidad de ejecutar, contando con un sonido más que digno a pesar de su lugar de conejillo de indias en el cartel.

DIABULUS IN MUSICA
DIABULUS IN MUSICA

Curiosamente resultó algo más parado el personal con Holyhell. La banda del ex – batería de Manowar Rhino, a los cuales ya conocíamos de su actuación hacía un año en el zaragozano Metalway, vino esta vez a mostrarnos su mejores galas. De hecho, me causaron una impresión mucho mayor que hace doce meses a pleno son del mediodía. Tampoco era difícil dadas las circunstancias, pero sí que pienso que menosprecié entonces demasiado la propuesta de una banda que tiene condiciones para agradar a los seguidores del metal melódico. Tal vez demasiado para los aguerridos fans de Manowar, que pueden echar en falta algo más de fuerza. Aquí el teclado lo envuelve todo, la guitarra del magistral Joe Stump se desenvuelve con total limpieza lejos de los riffs más aplastantes y la voz de Maria Breon es, simplemente, encantadora.

HOLLYHELL

Comenzaron el concierto con “Holy Water”, presentándonos su único disco hasta le fecha. En este tema la voz se adornaba con efectos de coros que dejaban un resultado algo artificial. Me gustó más el siguiente “Revelations”, donde ya vimos a una banda más entera ante esta presentación. La melodía brilló mientras que fuera aún atardecía, cosa que se podía ver perfectamente a través de las grandes cristaleras del recinto. El grupo fue causando mejor sensación a medida que pasaban temas como “Gates Of Hell” o “Angel Of Darkness”, sin embargo diría que la conexión con el público no llegó a ser total. Tal vez al público heavy no le llegue demasiado tanta melodía y no acabe de tragar esos tonos líricos al final de las estrofas, donde un cantante estándar de heavy metal metería algún agudo. Pero esto también les hace algo distintos a Holyhell. Se despidieron con un homenaje a Ronnie James Dio con la versión de “Holy Diver”, dejándonos la invitación para pasarnos por el puesto de merchandising donde estarían firmando y haciéndose fotos con aquel que lo deseara.

HOLLYHELL

Y llegaba el turno de Manowar, que pueden comprobar que a medida que pasa el tiempo, con más o menos críticas, siguen causando mucha expectación además de contar con un buen sector de público que los defiende a capa y espada hagan lo que hagan. Pero Joey DeMaio y sus chicos se han dado cuenta de que la gente ya está cansada de tanto solo interminable, de parrafadas innecesarias (y casi siempre absurdas) y de parones en mitad del concierto para montar el circo con algunas señoritas. Ya comprobamos en su concierto de hace un año en Zaragoza que el planteamiento ahora es otro y el grupo descarga con continuidad mostrando el nivel de un grupo grande que no debe dejar de demostrar por qué lo es. Probablemente sin tanta película como se han montado en torno a sí mismos todavía estarían mejor considerados como banda influyente e imprescindible en la historia del heavy metal. Aunque para que vamos a montar un ranking si estamos ante la banda número 1 del mundo mundial, según palabras literales del propio Joey DeMaio esta noche.

HOLLYHELL

Pero no se liaría demasiado esta vez el singular bajista con sus palabras, ya que el grupo descargó con toda potencia, a su habitual volumen, sin más espectáculo visual que su propia imagen y la de las habituales inmensas paredes de pantallas atronadoras a ambos lados de la batería. Batería, por cierto, que teníamos la incógnita de quien ocuparía tras la recientísima marcha de Scott Columbus. Aunque desconocía al veterano rubio que asía las baquetas, según la información que recibí in situ se trata del primerísimo batería que formara parte de Manowar. Lo que aún no se es si será miembro definitivo o les está haciendo un favor en esta gira.

HOLLYHELL

Lo cierto es que el hombre no habrá vuelto para rememorar viejos tiempos, porque el grupo poco o nada rescató de sus comienzos. De hecho, y para sorpresa de todos, Manowar se dedicó a presentarnos temas de sus últimos lanzamientos. Todo el grueso del concierto se basó en “Warriors Of The World”, “Gods Of War” y “Thunder In The Sky”, referencias de los últimos años. Parece que después de tirarse años sin editar nuevos temas, ahora han decidido defender el valor de la música más actual de la banda. Evidentemente, es una postura que no a todo el mundo gusta cuando tenemos a una banda con verdaderos himnos históricos que hoy se quedarían en el tintero, pero hay que decir en un análisis frío que el grupo estuvo musicalmente impecable. Eric Adams sigue poseyendo una voz que nos hace asegurar que todavía a día de hoy es un vocalista al nivel del mejor en esto del metal; y quiero destacar especialmente a Karl Logan a la guitarra, que se lució en cada solo. Llamó la atención que el normalmente protagonista DeMaio tuviera una posición un tanto más modesta de lo habitual, con menos pose y mucho más natural.

MANOWAR
MANOWAR

La banda comenzó a hacer temblar el suelo con “Hand Of Doom”, que siempre me pareció un temazo para cerrar “Warriors Of The World” y que para comenzar la noche fue un verdadero trueno. De nuevo el grupo se mostró apabullante de sonido, tal vez realzando en demasía los graves, que nos hacían temblar el estomago. Y es que así son los auténticos Manowar. “Call To Arms” puso de manifiesto que también en los últimos años el grupo ha grabado buenísimas canciones. También lo es “Swords In The Wind”, aunque sí que me parece un fallo colocar una balada de forma tan temprana cuando el grupo estaba despegando.

MANOWAR

Sin embargo, nos quedaba por seguir disfrutando con temas como “Let The God Deicide”, “Die For Metal” o “The Sons Of Odin”, donde el público se metió más de lleno en la descarga dejando oír sus voces con nitidez. No nos libramos entre tanto del solo de bajo ni del juego vocal de Adams abusando del público, pero no llegó a hacerse pesado. De hecho, tras el solo del bajista la actuación se alzó hacía el punto más cercano al éxtasis metalero con un “Warriors Of The World United” que fue un verdadero ritual. Un tema que ya ha calado como verdadero clásico entre los más fieles seguidores. Y pudimos seguir alucinando con el poder de una banda que con una base de trío y una imponente voz al frente es capaz de sonar con toda la grandeza. Nadie le puede discutir este hecho a los americanos. Lo pudimos comprobar con “God Or Man”, “Thunder In The Sky” o “House Of Death”, siempre haciendo gala de algunos efectos propios del grupo para dejar un acabado total, pero que no resta méritos a una banda que se nos mostró muy en forma.

MANOWAR

Hasta aquí hora y cuarto de concierto impecablemente llevado adelante por unos Manowar muy cambiados con respecto a otras visitas. Para empezar, salvo en festivales con el lógico recorte horario, costaría creer que el grupo amenace tan pronto su retirada. Pocos quedarían sin mosquearse por el hecho de que no hubiera caído ni uno de sus clásicos cuando Joey DeMaio nos dio un pequeño discurso parte en euskera y parte en castellano, sin chuleta. Y la verdad que resultó bastante sincero el agradecimiento, sin tirarse la cerveza por el pecho, como sincero resultó la colocación del grupo y de sus fans como los número 1. A ver quién no se lo permite a estas alturas.

MANOWAR

Ya había sido pedido el “Hail and Kill” por la gente cuando la banda hizo su propio homenaje a Dio con “Heaven & Hell”. Aquí ocurrió el único infortunio de la noche para la banda cuando en pleno arranque de solo la guitarra de Karl Logan sufre una avería y se ve obligado a cambiarla en tan delicado momento. Menudo cabreo se cogió el tipo. Sin embargo, hay que reconocer la forma en que desarrollaron el tema, empezando otra vez por la gran voz de Eric Adams, captando mucho de la original, también en ese solo tan especial y tan difícil de emular con ese feeling, que Logan rehizo ya con una guitarra en perfectas condiciones.

MANOWAR
MANOWAR

Con esto la banda encaró el final echando la vista por fin atrás con “Brothers Of Metal”, “Kings Of Metal” y el añorado “Hail And Kill”, del cual cuajaron una fabulosa interpretación dirigiéndose en cada estribillo a un flanco del público para terminar en el centro. A falta de otros grandes clásicos este fue el tema de la noche, sin menospreciar todo lo que el grupo había hecho con anterioridad ni el final “Black Wind, Fire & Steel”, tras el cual el bajista rompió sus cuerdas, síntoma de que ya no habría más, sin llegar a las dos horas de concierto. Parece que nos los han cambiado o también puede que hayan hecho caso a las críticas del público que puede preferir un concierto más intenso como este y con menos chorradas de por medio. No voy a negar que casi uno se preocupa, como cuando ese niño inquieto que no deja de dar la lata un día aparece muy formal y piensas: ¿no estará malo? Lo cierto es que tampoco faltaron las pinceladas propias de un grupo que sigue siendo diferente al resto y que cuajó una actuación portentosa, aunque alguno no se iría del todo contento por echar en falta más temas antiguos. No le quito su parte de razón, pero tampoco se debe dejar de agradecer y valorar que la banda apueste por lo nuevo, aportando algo de frescura a su trillado discurso, y no repita los mismos shows, que sería lo más fácil.

Texto: ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

Fotos: MARI JOSE MARTIN (mari@lamiradanegra.es)