UNISONIC

(Light Of Dawn)

7´5/10

 

 

 

«Eagle fly free, let people see. Just make it your own way», «In the streets on Halloween there´s something going on, no way to escape the power unknow», «Dr. Stein grows funny creatures, lets them run into the night»….

Difícil quitarme de la cabeza estas melodías mientras me dispongo a hablaros del nuevo trabajo del Sr. Michael Kiske, lógico e injusto, lo reconozco. Mucho ha dado de que hablar el bueno de Kiske en estos últimos 15 años desde su marcha de la banda que le dio todo, su largo silencio y su posterior resurgimiento con bastante poca fortuna. Afortunadamente, lejos quedan ya aquellas declaraciones desafortunadas vertidas por el rubio/calvo alemán sobre la comunidad metalera. Supongo que el paso de los años, el perdón por parte de dicha comunidad y el perdón en forma de trabajos volviendo a sus raíces por parte de Kiske, han hecho que todo vuelva a la normalidad. También es cierto que todo lo que hizo musicalmente después de Helloween fue muy duramente criticado por querer explorar nuevos horizontes, los fans de la banda jamás se lo perdonaron y quizá por eso se le fue la mano. Otros ejemplos de grandes del Metal como: Bruce Dickinson, Rob Halford, Paradise Lost, Queensryche, etc. decidieron no encasillarse y evolucionar; a ninguno les salió bien y algunos supieron no desmarcarse tan drásticamente de su esencia. Lo cierto es que aunque todo el mundo tiene derecho a cambiar de vez en cuando aun teniendo el peso de la fama a cuestas, la historia nos demuestra que si un día con «x» estilo triunfaste, solo tú quieres cambiar no tu público.

Como parece que tendremos que esperar a la definitiva reunión de Helloween, que se hará, Michael se va poco a poco acercando al line-up original de la banda, recuperando otra vez esa energía perdida y que tan bien conserva su amigo Kai Hansen. Esto es un poco como un partido de futbol en el que a pesar de haber once jugadores en el terreno, solo hay diez, se pasan el balón entre ellos y su única misión es que el jugador número once no toque bola, Michael Weikath. Pero seguro que habrá prima lo suficientemente suculenta como para que se desenfurruñe Weikath y sus amigos le dejen jugar, lo de siempre vamos.

Bueno, culebrones del pasado y divagaciones a parte os hablo un poco de este segundo trabajo de Unisonic. «Light of Dawn» se presenta como la continuación de su primer trabajo homónimo editado en 2012 el cual cosechó muy buenas críticas, supuso el regreso de Michael Kiske a la escena, la unión de dos grandes del metal y dio la sensación de estabilidad lejos de proyectos aquí y allá con este y con aquel.

A mí personalmente ese Unisonic me decepciono, de alguna manera me esperaba algo más espectacular teniendo en cuenta el dream-team del que estaba formado. Tampoco esperaba los «Keepers» ni nada por el estilo, simplemente me pareció un flojo debut a pesar de tener temas más o menos resultones. Parece como si se tratara de una estrategia y es que al llevarme al oído este segundo trabajo me da esa sensación, parece como si fuera a propósito el no querer desplegar tan descaradamente su potencial desde el principio y sí meter en medio un álbum de transición Hard Rock con algo de Heavy Metal.

El disco, de portada bastante pobre a mi modo de ver, arranca con una intro llamada «Venite 2.0», intro ideal para abrir sus shows obviamente y que recoge algunas de las melodías que más tarde oiremos. Y…¡sorpresa!, «Your Time Has Come», ¡la primera en la frente!, un primer golpe con unos fraseos doblados de guitarras me hacen retroceder en el tiempo, llenarme de esperanza y sonreír. Sonreír un poco por que la comparación con los Helloween o Gamma Ray más gloriosos es irremediable y sonreír también por que, ¡qué coño!, ¡esto es lo que nos mola! Un gran tema lleno de grandes solos de guitarra, grandes ritmos galopantes a base de doble bombo, estructuras simples e himnos muy cantables a cargo del gran Michael Kiske. Un cantante que ha sabido mantener sus enormes dotes a lo largo del tiempo llegando a igualar aquellas notas altas que le hicieron tan famoso. Bien es cierto que su voz a adquirido también nuevas tesituras como él a mi modo de ver un tanto cansino vibrato acelerado.

«Exceptional» es su single y con él su correspondiente video clip. Un tema que sin duda funcionara a las mil maravillas en directo. Medio tiempo en el que destaca la canción por encima de cualquier músico, con un buen estribillo, contundente y clásico.

Son muchos los detalles compositivos que te hacen comprobar el peso de Kai Hansen, y es que a pesar de no poder quitarte de la cabeza el hecho de que este disco o grupo no es de Michael Kiske en solitario, es precisamente todo lo contrario, de hecho Kiske a penas compone.

Volvemos a la carga con otro tema puramente “powermetalero” en la onda del segundo corte antes mencionado. Este se llama «For The Kingdom»y aqui Michael Kiske combina su alto timbre característico con el otro más bajo y comedido. Una gran canción que hará las delicias de los fans más cercanos al estilo Power Metal europeo.

«Not Gonna Take Anymore», es una canción-himno por todo lo alto. Recoge los elementos esenciales de toda canción festera con una alta dosis de optimismo, buen rollo en su estribillo y riffs metaleros a tope que bien podrían firmar sus compatriotas Accept o sus vecinos Saxon.

Hard Rock/Metal y del bueno nos llega con «Night Of The Long Knives». Según va avanzando la escucha vas animándote y alegrándote por este segundo trabajo de la banda. Es en este tema precisamente donde realmente me doy cuenta de que el objetivo de este trabajo está resultando, me descubro como un seguidor que mueve su cabeza disfrutando a tope de un tema que me evade y me recuerda que este estilo sigue en boga con el consiguiente orgullo. Tema redondo.

Y seguimos con Heavy Metal con dos «c…..s». Otro tema duro y afilado donde cabe destacar la música por encima de su vocalista. No es que Kiske baje el pistón ni mucho menos, es que en esta canción tanto los pasajes e interludios como los solos de guitarra son verdaderamente alucinantes, otro gran tema, de los de puñetazo en la mesa.

Llegan los arpegios de guitarra que te hacen pensar en la balada de rigor y resulta que lo que llega es en mi opinión la canción claramente más floja y sosa de todo el disco. A pesar de un inicio con un Kiske muy melodioso, el tema se resuelve de una forma un tanto fría con un estribillo carente de enganche al más puro estilo de aquellos temas compuestos por él en su» Chamaleon» y resto de posteriores composiciones.

«When The Deed Is Done» puede que sea más de lo mismo, esta tiene de bueno con respecto a su predecesora el tempo, algo más ligero y en general más dinámica aunque con ese regusto de canción de relleno. No está mal pero me temo que es un tema que atraerá tu dedo índice para pasar a la siguiente.

Después de la pausa o bajón volvemos a entretenernos. «Throne Of The Dawn» nos trae de nuevo otro medio tiempo metalero muy en la onda Judas Priest sobre todo en su parte central donde la pareja Hansen/Meyer nos recuerda a la que fue también pareja Tipton/Downing. Estribillo chulo, no es que sea una canción muy destacable pero buen tema.

Con «Manhunter» me doy cuenta de que el disco va en decrescendo, a priori este tema vuelve a ser otro tema potentillo con muchas raíces clásicas de Hard Rock y la verdad es que en parte lo consigue porque todo va bien excepto una cosa, su estribillo. Un estribillo que es medianamente pegadizo pero que resulta un tanto merengón debido en mi opinión a esos excesivos coros con los que se suele arropar Michael, ya en otras ocasiones ha tirado de ese tipo de arreglos vocales, creo que a los temas nos les hace ningún favor haciendo que suenen muy empalagosos.

Y llegamos al último tema del disco sin contar con el tema extra incluido en la versión europea. «You and I», esta sí que sí, no se esconde de nada y no se presenta como un medio tiempo lento ni cosas parecidas, esta es una balada con mayúsculas. La verdad es que este tipo de baladas fueron en parte las encargadas de «arruinar» la fama de Kiske por eso me parece loable y arriesgado incluir no solo esta si no algunas de las antes mencionadas en el disco. Cuando una balada se te clava, se te clava para siempre y es eso mismo lo bueno de ellas, que el carácter melancólico te atrape y te haga soltar lo que llevas dentro. No es el caso de este último tema, lamentablemente otra balada más de las muchas que tiene, por que a pesar de decir otra vez que esto es un grupo y no un proyecto en solitario, tengo la sensación de que las peores canciones del disco están firmadas por Michael Kiske.

«Judgement Day» es el bonus track y sin más, no es un tema deslumbrante pero tampoco del montón, sin ninguna duda hubiera incluido este tema en vez de otros que si me parecen más flojos. Es un tema de puro Hard Rock bastante alegre y que para nada parece ser el típico tema de desecho o relegado a ser bonus-track. No está mal.

Resumiendo, un avance importante en esta consolidada nueva aventura de Kiske y Hansen en la que espero siga teniendo continuidad y no acabe siendo un cameo que dura demasiado por parte de Hansen hacia Kiske para darle a este un empujón y luego darse el piro como a muchas series de televisión les pasa. Buen disco.

GUILLERMO FERNANDEZ

INFORMACIÓN ADICIONAL:

Sello: Top Artist Promotion (www.topartistpromotion.com)

Fecha de salida: 1 de Agosto de 2014