IRON MAIDEN

“The Number Of The Beast”

– 1982 –

Tercer trabajo en la carrera de Iron Maiden con algunos cambios sustanciales que a la postre han sido definitivos en la carrera del grupo. Primeramente tenemos la sustitución a la guitarra de Dennis Stratton por Adrian Smith y lo que a la postre ha marcado el camino de la banda en el aspecto vocal dejando una huella imborrable para la posteridad: la sustitución en las laboras vocales de un excelente Paul Dianno por un hasta ahora desconocido Bruce Dickinson.

Después de esta introducción vayamos a lo que es el disco en sí. Primeramente señalar que este disco marcó un punto y a parte con sus dos anteriores trabajos, en el cual Iron Maiden dieron definitivamente identidad a su sonido propio, algo que en sus dos primeros discos ya estaba palpable; con una factura y originalidad insuperable. Pero es ahora cuando definitivamente Iron Maiden despega hacia la fama mundial, gracias al “The Number Of The Beast”, que marcó un punto de inflexión en su carrera.

A nivel compositivo la mejora es increíble demarcándose totalmente de todo lo hecho hasta el momento y confiriendo a su sonido unas características únicas que aún en nuestros días siguen siendo inimitables. La labor vocal del hasta el momento desconocido Bruce Dickinson es sensacional, Steve Harris acertó plenamente con la elección de este vocalista, que acompañado por todo el conjunto del grupo, dan a este disco una unión perfecta dando lugar a ocho temas vibrantes y espectaculares, que a la postre se convertirían en grandes clásicos del Heavy Metal mundial.

Vamos ahora con los temas que componen este disco. Lo abre la potente Invaders, un corte muy Heavy al estilo Maiden, el disco continua con Children Of The Dammed otro excelente corte cargado de buen hacer por parte de todos los músicos. Ahora llegamos a unos de los grandes cortes del álbum como es The Prisioner espectacular por todo lo que confiere a él, tanto como compositivamente como por la interpretación del tema. A continuación nos encontramos con 22 Acacia Avenue, la continuación de su ya famoso Charlotte The Harlot, de su primer disco homónimo, una magnífica continuación del tema. Seguimos con otros dos grandes temas que se han convertido en grandes clásicos con el paso del tiempo como son The Number Of The Beast y Run To The Hills. Increíbles, no tengo palabras para describirlas, dos cortes de puro Heavy Metal al más puro estilo Maiden. Para continuar tenemos el corte número siete que no es otro que Gangland sin ser un corte malo se hace el corte menos llamativo del disco que aun así rebosa calidad por los cuatro costados y para terminar Hallowed Be The Name, un corte espectacular donde los haya. Lo tiene todo, emotividad, partes más duras, más lentas, lucimiento vocal, nivel de instrumentación perfecta y gran tema para acabar un disco.

En definitiva lo que más tarde ha sido considerado como el mejor disco de Iron Maiden en su carrera, cosa que no comparto en absoluto, porque pienso que cada uno de sus discos han marcado un antes y un después dentro de Heavy Metal a nivel mundial. Lo que sí hay que reconocer es que este disco marcó el punto de lanzamiento de un grupo que ha llegado al máximo dentro de lo que un músico puede conseguir en su carrera y algo de admirar en ellos es que no se conforman y con cada obra que sacan van un punto más allá.

Para concluir, este disco es una autentica joya. No dejes de escucharlo y tenerlo en un lugar preferente es tu estantería, al igual que todas sus obras. Estamos realmente ante un grupo increíble y único, no dejes de disfrutar con ellos.

JONATAN RODRIGUEZ (jonatanrodriguezvizan@latinmail.com)