SU TA GAR + ERATU

4 – 01 – 14

Bilbao (Kafe Antzokia)

 

 

Su Ta Gar se daba cita con sus seguidores en un Kafe Antzokia lleno hasta la bandera aún en fechas navideñas. Sus seguidores no se despistaron en estos días un tanto especiales para arropar a la banda de Eibar con un ambiente digno de grandes ocasiones, como se merece un grupo que es precisamente de los grandes a todos los niveles. No descubro nada. Recuerdo cuando hace años presentaba a Su Ta Gar a amigos de fuera de nuestra tierra como una curiosidad de cómo sonaba el heavy metal en euskera y que algunos de estos me sorprendieron al considerarlos uno de los mejores grupos que habían escuchado, incluso por encima de los clásicos nombres a nivel internacional. Todavía conozco a quien sin hablar la lengua en la que se expresan estos temas sigue manteniendo idéntica o más devoción por ellos, y es que la música es bastante más universal. En cualquier caso, reconozco que entonces me parecía difícil que Su Ta Gar rompieran como finalmente han roto todas las barreras, aunque alguno siga diciendo esa frase odiosa de dónde hubieran llegado si no cantaran en euskera o si no fueran de aquí. Pues entre otras cosas, no serían Su Ta Gar y la identidad es una clave en esta banda por la que la gente les ha seguido durante tantos años sin desfallecer junto a ellos.

ERATU
ERATU

Hoy jugaban en casa, porque cualquier punto de Euskal Herria para ellos es su casa. Primero, porque mueven a gente de diferentes lugares. Ejemplo es que en vísperas de un derbi futbolero entre Real y Athletic incluso hubo ánimos encontrados para uno y otro equipo en algún momento del concierto. Siempre en un excelente ambiente. Y segundo, porque en cada lugar al que vayan se van a encontrar con un puñado de fieles que se identifican plenamente con el grupo, además de admirar su calidad musical.

ERATU

Y lo que hoy nos ocupaba era la música, que no solo nos da la posibilidad de encontrarnos con artistas consagrados, sino que cuenta con una escena siempre con bandas emergentes en su haber. En este caso podíamos conocer en vivo a una banda de reciente creación llamada Eratu. El trío se entregó para abrir la noche por todo lo alto mientras que la sala iba acaparando más y más personal. Tienen dos discos en su haber, el homónimo “Eratu” de 2011 y el reciente “Ispilu Iluna”. Nos brindaron  una colección de temas propios interpretados con muchas ganas, reflejando un sonido potente, muy directo, pero también asequible a muchos oídos. Una buena forma de conectar con el personal, cosa que finalmente lograron, sobre todo al final de su descarga, con temas como “Dominak” o “Akordatzen”, aunque en el transcurso de la descarga hubo temas que personalmente me gustaron bastante como “Zergatik” o “Negarrez”. Una banda con tablas y actitud como para resultar así de efectivos en directo.

ERATU
ERATU

Todo listo para que al filo de las 11 de la noche Su Ta Gar apareciera en el escenario para brindarnos una extensa descarga que repasara su amplia trayectoria. No se dejaron en el tintero material de todas las épocas desde su debut en 1991 con “Jaiotze Basatia” hasta el más reciente y aún calentito “Bizirik Gaude”. Otra cosa puede ser que entre tal cantidad de temas alguno echara en falta su posible favorito (a mi me pasó con “Fagozitosia”), pero el concierto fue de lo más completo, con una ejecución fantástica en la mayor parte de la actuación y momentos emotivos e inolvidables, por mucho que hayas podido ver a la banda mil veces en directo.

SU TA GAR
SU TA GAR

El grupo sale a por todas con “Bidegabekeriaren Balantzan”, preparándonos para presentarnos en vivo temas de su última obra de la cual de manera consecutiva tuvimos “Giza Harresia”, “Bizirik Gaude” y “Nana”. Es de destacar el nivel que la banda sigue atesorando en sus trabajos. Si bien los clásicos son enormes por el hecho de ser clásicos aparte de grandes temas, a estos nuevos solo les falta que el paso del tiempo les siente igual de bien para estar a la altura, puesto que Su Ta Gar ha seguido ofreciendo temas para ser muy tenidos en cuenta, nada de relleno que les permita seguir girando. Os recomiendo sus últimos trabajos si es que os habéis quedado en la época de los 90.

SU TA GAR
SU TA GAR

Evidentemente la respuesta suele ser mayor, en cualquier caso, cuando echamos la vista atrás. Y el primero que provocó un levantamiento del ánimo general envuelto en un  halo de nostalgia fue “Arbasoen Mendekua”. Sin embargo, el mejor tramo del concierto llegaría más adelante, tanto para los que disfrutamos por igual de sus discos más primigenios como de los nuevos discos.

SU TA GAR
SU TA GAR

Porque tampoco queda a la zaga “Norbera Bere Ametsen Jabe” de su anterior “Ametsak Pilatzen”, que siendo single de ese trabajo se ha grabado en la memoria de todos a fuego. Su Ta Gar tiene esa capacidad de dejar temas imborrables, fácilmente recordables a la vez de suponer auténticos temazos de heavy metal con un trabajo instrumental digno de alabar. Musicalmente la banda sigue estando a una gran altura para clavar en este momento de la descarga significativos cortes que su gente acogió con los brazos abiertos como “Gau Iluna Amaitu Da” y “Begira”.

SU TA GAR
SU TA GAR

Pasamos nuevamente a presentar ese nuevo disco del que pueden sentirse, una vez más, orgullosos con “Nazkatu Naiz” y “Txakurrak Solte”, sonando con una tremenda fuerza en manos de esa potencia de una maquinaria en la que Aitor Gorosabel sigue siendo el capitán que guía el rumbo, siempre con el fiel Xabi Bastida al lado, que se iba a hacer cargo de la guitarra acústica en algunos momentos como el que nos tocaba a continuación, que abría una parte de ensueño para sus seguidores. Ya que interpretaron íntegramente el inicio de uno de sus trabajos más queridos como es “Hotrzak Estuturik· con la intro instrumental maravillosa “Ekaitza Eta Barealdia” continuada por “Azkar Zuregana” y “Nazka”, entremedias colaron un espectacular “Piztia” que con casi 20 años de diferencia con los anteriores demostró la altura a la que se ha mantenido la banda con los años, pero inmediatamente “Itxaropena” ponía un punto de calma y de magia en la descarga, con todo el público cantando apasionadamente otro tema de aquella obra maestra del metal del año 1992. Tramo del concierto para enmarcar.

SU TA GAR
SU TA GAR

Si hablo de ejecución fantástica no solo tengo que mencionar a la parte tradicional de la banda, en la que Aitor Gorosabel sigue siendo un guitarrista que no sé hasta qué punto debería ser más valorado como instrumentista. Sin ir de guitar hero por la vida, lo cierto es que su limpieza a la hora de sacar sonido de sus seis cuerdas no lo iguala cualquiera. Mantiene la habilidad en los dedos que le ha caracterizado siempre. Pero junto a Xabi y a él tenemos la imponente pegada de Galder Arrillaga, quien sustituyera a su hermano Borxa en los 90 y que finalmente, tras un periodo de ausencia, quedó definitivamente como batería de la banda dando unas espectaculares prestaciones, como vimos esta noche. Y totalmente adaptado a la banda se le ve a Igor Diez, la más reciente incorporación al bajo, muy implicado, a gusto y sonriente junto a sus compañeros y sin temblarle el pulso cuando tenía que dar un paso al frente.

SU TA GAR
SU TA GAR

Se atisbaba la recta final con “Geroaren Hazi Heziak”, con improvisado cambio de guitarra de Aitor que dejó esta interpretación y la siguiente un poco menos fluida si nos ponemos en el análisis más pormenorizado. Pero nada impidió el disfrute del personal de esta recta antes del punto y seguido con un siempre esperado “Jo Ta Ke”, himno donde los haya.

SU TA GAR
SU TA GAR

Quedaba tela por cortar aún y la banda regresaría hasta en dos ocasiones para interpretarnos 6 temas más. Evidentemente, nadie se imaginaba que Su Ta Gar se marchara sin brindarnos el clásico “Mari”, por supuesto no faltó, acompañado por un par de piezas recientes como “Ez Etsi Orain” y “Zure Baitan”. Pero la banda iba a completar aún más su actuación, regresando con “Jainko Hilen Uhartean”, clara muestra de cómo temas recientes van adquiriendo un peso como para mantener los ánimos cuando nos acercábamos a las dos horas de concierto. Eso sí, a la gente le puso antes las pilas la versión de La Polla de “No Somos Nada”.

SU TA GAR
SU TA GAR

Quedaban fuerzas para que el fuelle no cesara de insuflar aire hasta el final, que definitivamente llegó con las interpretaciones de “David Eta Goliath” y “Rotaflexa Garraxika”. Hay dos condicionantes que siempre se han aplicado a Su Ta gar. Uno es que al ser de aquí puedan ser menos valorados y otro que por cantar en Euskera se han cerrado puertas. O bien han superado las dos o ninguna de las dos ha sido nunca cierta, porque el número de seguidores que han conseguido en diferentes lugares es cada vez más grande y porque si hay una banda fuerte en tierras vascas esos son ellos. La clave está en la aceptación de quien se abre a escuchar, ante lo que la banda guipuzcoana haya tenido que enfrentarse con una parte de incomprensión, pero también con muchos que han sabido valorar su calidad, a veces un poco eclipsada por quien les acogiera como una banda más bien comprometida en sus mensajes, algo que solo representa una parte de la personalidad de un grupo de heavy metal excelente en todos los sentidos. De hecho, es muy difícil encontrarse con otra banda que llegue a estos niveles de aceptación tras un concierto que se despidió al grito general de jo ta ke irabazi arte mientras los músicos alzaban sus instrumentos como un brindis por una gran noche que nos hizo ver a unos Su Ta Gar en un estado de forma encomiable. No solo vivos, arrasadores.

Texto: ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

Fotos: MARI JOSE MARTIN (mari@lamiradanegra.es)