CRÓNICA: STRATOVARIUS + AMARANTHE + SEVEN KINGDOMS

STRATOVARIUS + AMARANTHE + SEVEN KINGDOMS

7 – 04 – 13

Barakaldo (Rockstar Live)

 

 

Casi no se les veía en el cartel, pero la noche la arrancaron Seven Kingdoms, una banda de power metal muy tradicional. Nos los encontramos actuando con tal puntualidad que el primer tema comenzó cuando yo entraba por la puerta. La banda está liderada en el escenario por la rubia vocalista Sabrina Valentine, una mujer que sabe moverse en el escenario y ganar al público. Si musicalmente no aportan nada demasiado especial, hay que reconocer el trabajo de melodías y composición que tiene sus canciones para no quedar resumidos, al menos, a la más básica expresión del estilo que proponen. La gente captó esa elaboración y la entrega de la banda, con una vocalista que consiguió con su convencimiento que el público respondiera.

SEVEN KINGDOMS
SEVEN KINGDOMS

Los de Florida tienen tres discos editados, pero el protagonismo de su escaso periodo de tiempo en el escenario se lo llevó el último “The Fire Is Mine”, del cual de manera consecutiva cayeron “After The Fall”, “Flame Of Olympus”, “Fragile Minds Collapse” y “The King In The North”. El público respondió muy bien ante una banda muy desconocida por aquí. Terminaron el concierto con un recuerdo para su anterior y homónimo disco con “Into The Darkness”, entre un personal que sonoramente pidió algo más. No es muy habitual con unos teloneros que parecían casi un convidado de piedra en un cartel con los otros dos nombres mucho más resaltados, así que todo un logro lo suyo.

SEVEN KINGDOMS
SEVEN KINGDOMS

Pero la gente se había movilizado para ver a los dos cabezas de cartel. Y es que por el tiempo que estuvieron ambos en las tablas y por la respuesta del público se pueden equiparar totalmente Stratovarius y Amaranthe en esta gira. Estos últimos han conseguido con dos discos una pequeña revolución en el metal europeo. Reconozco que su propuesta no es de las que a mí, personalmente, más me atraiga. Sus canciones pecan a veces de comerciales, a pesar de la utilización del matiz de la voz agresiva, pero sobre todo me parece un tanto artificial, fundamentalmente en un directo donde los samplers son claves para su sonido.

SEVEN KINGDOMS
SEVEN KINGDOMS

Ahora bien, el trabajo vocal de los tres miembros del grupo encargados de esa labor es de quitarse el sombrero. No me gusta que siempre tengan que llegar a un estribillo tan claro, porque aprecio más los detalles de elaboración, como se concatenan las voces, como se alternan y como se unen en coros. Todo ese desarrollo que les podría hacer una banda más progresiva es lo que más me atrae, pero ellos se mantienen en una postura más intermedia entre el power y el heavy metal melódico, con una modernización y guiños agresivos. Por cierto, que esta parte a la voz esta noche la desarrollaría Henrik Englund, sustituyendo a Andreas Solveström. Apareció en escena perfectamente acoplado a sus compañeros para arañar con sus gruñidos las limpias líneas vocales tendidas por Elize y Jake E.

AMARANTHE
AMARANTHE

Está claro que con esta propuesta han dado en el clavo, porque con tan solo dos discos arrastran un número de incondicionales que esta noche se dejaron notar muchísimo. Hubo buena parte del público que había ido principalmente por verles a ellos. Fue un clamor la sala desde que los tres cantantes se pusieron frente al escenario, no solo demostrando un engranaje perfecto en el plano vocal, sino que en sus movimientos también saben interactuar sin colisionar y sabiendo moverse.

AMARANTHE
AMARANTHE

Con un nuevo disco bajo el brazo de título “The Nexus” la banda no quiso cebarse en su presentación. Editado en el mes de marzo, todavía quieren dejar madurar más los temas, aunque nos expusieron buenas demostraciones de lo que se esconde en el mismo, como el propio “Invencible”, “The Nexus”, “Infinity” o un “Burn With Me” con el protagonismo de las voces limpias de Jake y Elize. Esta chica se ha convertido en una de las nuevas divas dentro de nuestra escena en muy poco tiempo. Levanta admiración y sabe ganarse al respetable. Al final del concierto sería la última en abandonar las tablas. Pero como imagen del grupo yo me quedo con los tres vocalistas juntos. Pocas veces se ven en escena tantos cantantes como instrumentistas.

AMARANTHE
AMARANTHE

Eso sí, faltan los teclados, aunque puntualmente en “Amaranthine” los toque el guitarrista Olof Mörck. Creo que deberían buscar urgentemente alguien con cualidades para desempeñar esta labor en vivo. Entre sus 15 temas (más que Stratovarius), se encontraron piezas muy celebradas por el personal, caso de “Serendipity”, “My Transition” o “Rain”, pero fundamentalmente antes de los bises el ideal para las  discotecas “Call Out My Name” fue de lo más celebrado. Hay canciones donde especialmente se hace notorio lo fundamental del sonido grabado, como en “Mechanical Ilusion”. Sin embargo, la gente encantada pedía más y el grupo se dio el lujo de marcar un pequeño parón para hacer unos bises, muestra de que no eran teloneros de los siguientes. Esos bises fueron para “Automatic” y “Hunger”, dejando al joven público seguidor del grupo con una sonrisa de oreja a oreja.

AMARANTHE
AMARANTHE

Pensé que alguno hasta se marcharía de la sala antes de ver a Stratovarius. Y hubo casos, pero por fortuna contados. Los finlandeses siguen teniendo tirón, aunque la de este domingo no sería una de las grandes entradas para ellos. Sin embargo, el seguidor del heavy metal más tradicional se dio cita para disfrutar con esos temas clásicos y nuevos de una banda que continúa adelante capitaneada por Timo Kotipelto, junto a Jens Johansson único superviviente en el grupo de la vieja guardia.

AMARANTHE
AMARANTHE

Pero es que las incorporaciones al grupo son de una contrastada calidad y ya lo han demostrado en sus anteriores discos tras los turbulentos tiempos que acabaron con Timo Tolkki fuera del grupo. Ya son conocidos Matias Kupiainen y Lauri Porra por todos y esta noche era el momento de conocer a Rolf Pilve, encargado de la difícil labor de sustituir a un Jörg Michael que es toda una leyenda de la batería. De nuevo la banda ha vuelto a acertar y no ha cogido al primero que se le ha cruzado por la calle.

STRATOVARIUS
STRATOVARIUS

El set list se hizo corto, apenas fueron 12 temas, más un solo de batería y otro de teclado, llegando a una hora y cuarto de actuación que para una banda que lleva en activo desde 1984 me sabe a poco. Pero bien es cierto que ese tiempo en las tablas fue aprovechado por el grupo, que olvidó su nefasto concierto en su anterior visita a este mismo lugar, con un virus gástrico que a Kotipelto apenas le dejaba cantar. Esta vez los vimos en mejor forma.

STRATOVARIUS
STRATOVARIUS
STRATOVARIUS

Tuvieron coraje para defender su nueva propuesta “Nemesis”. No me ha parecido el mejor disco de la nueva etapa de Stratovarius tras la marcha de su anterior líder, pero en directo me gustó cómo funcionan temas tan directos como “Abandon”, “Halcyos Days”, “Fantasy” o el single “Unbreakable”, ideal para descargarlo en los conciertos, así como el resultado del relajado “If The Story Is Over”. Entre estos temas hubo una muestra de su discografía en la que echaríamos de menos más temas clásicos como “Speed Of Light”, que cayó muy pronto para regocijo de todos, pero que sin embargo no sería presagio de un repertorio del agrado de los más tradicionales seguidores.

STRATOVARIUS
STRATOVARIUS

Y es que salvo “Eternity” (uno de sus clásicos no más conocidos del “Episode”) y “Black Diamond”, comenzado como suele ser habitual por solo de teclado de un espléndido Jens Johansson, un musicazo como la copa de un pino que sigue moviendo sus dedos sobre las teclas como nadie; no habría otro gustazo de estas características. Ahora bien, me quedo con un inesperado “Destiny”, cuyos 10 minutos fueron sublimes. Admitiendo la dificultad ahora mismo de Timo Kotipelto para llegar a ciertos agudos, el vocalista conserva su natural registro vocal intacto. Se entiende que a día de hoy temas como “Father Time” prefiera dejarlos fuera.

STRATOVARIUS
STRATOVARIUS
STRATOVARIUS

Pero el concierto fue llevado a cabo con una buena interpretación, sin dejar de lado singles como “Eagleheart” que son siempre un seguro de respuesta en directo. Evidentemente en este sentido, sitio reservado para terminar el concierto y poner a todos a cantar tiene “Hunting High And Low”, que no faltó esta noche y tampoco falló en su conexión con el personal.

STRATOVARIUS
STRATOVARIUS

Stratovarius también escucharon el reclamo de más. Y es que en su caso se debe a dos factores. Uno, que nos habían dejado buen sabor de boca, y otro, que tienen repertorio y son un clásico tan grande que cabe exigirles mantener en sus directos muchos temas que echamos de menos. Al menos nos podemos quedar con que esta noche vimos a unos Stratovarius en buen estado.

Texto: ANTONIO REFOYO (antonio@lamiradanegra.es)

Fotos: MARI JOSE MARTIN (mari@lamiradanegra.es)